Alejandra Blanco: Si las denuncias son informales “la universidad no tiene posibilidad de actuar”
La coordinadora del Programa de Prevención de Violencia Sexual de la UC comenta el trabajo que realiza el plantel en este ámbito y aborda la polémica que involucró a dos candidatos de las elecciones Feuc.
Alejandra Blanco es sicóloga y trabaja en el área de prevención de la Unidad de Prevención y Apoyo a Víctimas de Violencia Sexual de la Pontificia Universidad Católica de Chile. La profesional forma parte de este espacio junto a otra especialista quien se dedica al apoyo a los víctimas.
Esta unidad viene trabajando desde hace un tiempo para implementar la política de prevención y apoyo que ha impulsado en los último años el Consejo Superior de esta casa de estudios. Blanco explica cuál es la importancia de este espacio, del cual es coordinadora, y además pone en perspectiva lo que está sucediendo con las denuncias de violencia sexual en la primera vuelta de las elecciones Feuc. La especialista destaca la relevancia de que este tipo de denuncias lleguen a los canales formales de la universidad para así realizar el acompañamiento que corresponde.
—¿Cómo han visto desde esta unidad lo que está ocurriendo con las denuncias por violencia sexual contra candidatos a la Feuc?
“La verdad es que esta unidad no pone el foco en ese sentido. Nosotras estamos más bien preocupadas del trabajo con las víctimas, entonces nuestra orientación va en la línea de tratar de acercarnos a quien haga esas denuncias y de ponernos a disposición. El objetivo de la universidad es llevar cualquier tipo de denuncia o acusación en torno a temas de violencia sexual hacia los canales formales que la universidad ha establecido para trabajar con ellos, tanto en términos de apoyo sicológico como también en términos de las investigaciones que se puedan llevar a cabo ya sea por la secretaría general o si la víctima lo estima pertinente a través de apoyo jurídico”.
—¿En términos concretos esto apuntaría entonces a evitar este tipo de denuncias anónimas?
“Nuestro trabajo es tratar dirigir que estas denuncias se conduzcan por los canales formales de investigación que ha establecido la universidad y el ordenamiento jurídico chileno”.
—¿Cómo ven el hecho de que en estos casos las denuncias aparezcan en una primera instancia bajo el anonimato?
“En tanto sean denuncias anónimas las posibilidades de acceder a estas víctimas no son muchas, entonces el trabajo es más bien enfocado en difundirnos. En esa difusión hemos trabajado con representantes estudiantiles, con distintas unidades académicas y representantes de los trabajadores”.
—¿Cuál es el riesgo de que los hechos se presenten informalmente?
“Mientras las denuncias permanezcan en los canales de la informalidad la universidad no tiene posibilidad de actuar ni de tomar medidas. Por eso es importante que las víctimas se acerquen a los canales formales para poder garantizar un proceso dentro de ciertos parámetros de investigación y no se queden en el espacio colectivo que es más bien desorganizado”.
—En esta importancia de llegar a los canales formales, ¿cómo se logra?
“Por una parte haciendo difusión para llegar a todos los actores de la universidad para que se generen las confianzas necesarias para acudir a los canales formales. En la medida en que no se acuden a los canales formales, se produce el rumor y la difusión de situaciones que no tienen posibilidad de ser investigadas pertinentemente. Esto deja a la víctima en una posición en que sólo logra decir lo que pasó y no obtiene una respuesta institucional y por otro lado quien está siendo acusado queda sin la posibilidad de acceder a un debido proceso como el que tenemos todos los chilenos”.
—Ahí la relevancia de la difusión…
“Por eso nuestro trabajo de promoción tienen que ver con acercarse a la comunidad. Por eso es que visitamos las unidades académicas para promover esa confianza, porque entendemos que es un proceso y que tiene que ganarse”.
—¿Las denuncias contra los dos candidatos han llegado a estas instancias formales?
“Nosotras preferimos no referirnos a casos particulares, porque una de las características que tiene esta unidad es la confidencialidad”.
—¿Qué costos puede tener esto en una situación como las elecciones de federación?
“Tampoco nos referimos a las implicancias políticas que se podrían producir, ya que eso tiene que ver más bien con el proceso que lleva la elecciones de la Feuc”.
—¿Cómo se desarrolla el trabajo de prevención y apoyo de esta unidad en la universidad?
“Lo que estamos haciendo tiene que ver con reunirnos con todos los actores centrales que hay adentro de la UC para darnos a conocer primero como unidad. El objetivo de este espacio es articular la respuesta que da la UC en casos de violencia sexual haciéndose cargo de acompañar a las víctimas en cualquier proceso que quieran emprender”.
—¿Cuánto tiempo lleva la universidad en esto?
“La UC lleva dos años trabajando en el tema. Primero se generó una política que tiene que ver con el establecimiento de cuáles son los principios que rigen a la universidad sobre esta temática. Luego se generaron protocolos de acción y posteriormente esta unidad viene a ser el brazo operativo de esta declaración de principios que hace la universidad en torno a la violencia sexual para hacer un acompañamiento especializado a quien puede haber sido víctima de violencia sexual tanto al interior de la universidad como afuera”.