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El revés de Dobra Lusic sella una semana política fallida del Gobierno

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POR Gladys Pierola |

El nombramiento, negociado durante semanas, se cayó por falta de votos de la oposición. El impasse se suma a rechazos de Admisión Justa y Reforma Previsional.

El Gobierno no ha tenido una semana fácil. Al rechazo de la idea de legislar el proyecto de Admisión Justa, los vaivenes de la Reforma Previsional -que deberá despejarse este jueves- y el escándalo de indicios de manipulación de las cifras de inflación del INE, se sumó otro episodio más: la fracasada gestión del nombramiento de Dobra Lusic como integrante de la Corte Suprema.

Luego de semanas de negociaciones, lo ocurrido durante la jornada del miércoles en el Senado refleja por qué la tarea en la gestión política del Ejecutivo tuvo más sinsabores que triunfos en estos días. 

El paso a paso 

El ministro de Justicia, Hernán Larraín, llegó este miércoles al Congreso preparado para una jornada difícil. Los 29 votos que necesitaba en el Senado para que la ministra de la Corte de Apelaciones llegara al máximo tribunal no estaban asegurados y su nominación se veía cada vez más lejana.

De hecho, a primera hora, Larraín conversó con Lusic, quien le habría manifestado que frente a las polémicas de los últimos días y la falta de respaldos suficientes en el Cámara Alta, lo mejor era dar un paso al costado y no continuar con la postulación.

“Dada esta campaña pública que se había generado en su contra, los antecedentes que ella tenía la hacían pensar que ese retiro de apoyo recomendaba que era mejor para ella declinar de esta postulación”, dijo Larraín, tras la fallida sesión especial. 

En este escenario y con el oficio que daba cuenta del retiro del nombre en la mano, el titular de Justicia, junto con el ministro de la Segpres, Gonzalo Blumel, se jugaron su última carta con la oposición: se reunieron en más de una oportunidad durante la mañana con la bancada socialista -que para los cálculos del Ejecutivo eran apoyos claves- pero no lograron su aceptación, sumando así un capítulo más a la semana negra del Gobierno.

Los ministros de Justicia, Hernán Larraín, y de la Segpres, Gonzalo Blumel, intentaron sumar apoyos, pero no lograron el número necesario.

Ambos ministros conversaron arduamente con el senador PS y miembro de la comisión de Constitución, Alfonso de Urresti, y con el jefe del comité socialista, el senador Carlos Montes. Pero fue cerca de las 14: 00 horas cuando se selló la caída de Lusic, ya que el senador Montes les confirmó que en el PS no estaban los siete votos, que un principio se habían comprometido, ni tampoco se contaba con al menos cinco, como pedía el Gobierno. Al contrario, la bancada se dividió en tres apoyos, liderados por José Miguel Insulza, Juan Pablo Letelier y Rabindranath Quinteros y en cuatros que no estaban convencidos: Álvaro Elizalde, Isabel Allende, Alfonso de Urresti y el propio Montes. 

“Nosotros no estuvimos contra Dobra Lusic, pero para tomar una decisión sobre un ministro de la Corte Suprema, que es tan importante, tenía que aclararse la relación que tenía con un operador como John Campos. Eso no estuvo claro y no está claro ahora”, dijo a PAUTA el senador Montes. 

De hecho, la polémica por su relación con Campos fue determinante en la decisión de la bancada PS, donde aseguran que fue clave el informe jurídico que se dio a conocer el viernes pasado y que no coincidía con la versión que entregó la jueza la semana pasada a la comisión de Constitución. 

El documento, que fue redactado por la fiscal Carla Troncoso, por encargo de la Corte de San Miguel, señala que la ministra Lusic recomendó e hizo llamados teléfonicos a favor de Campos para el cargo de Notario Público en la 5° Notaría de San Miguel.

Incluso los senadores PS pidieron el lunes más detalles del informe al propio ministro de Justicia, aunque la respuesta no fue satisfactoria para ellos. “La valoramos por el papel que jugó en temas de derechos humanos, pero apareció esto y era poco serio que el Senado y que nosotros tuviéramos un pronunciamiento sin que se aclararan esas cosas”, agregó el jefe de la bancada socialista. 

Pero no todos quedaron conformes en el partido que lidera Álvaro Elizalde. De hecho, el senador Insulza comentó que era “una injusticia” la situación y que Lusic era “la víctima” de los errores cometidos. “No tiene mucho sentido que hagamos catarsis y nos golpeemos el pecho, diciendo que de aquí en adelante vamos hacer algo distinto. Las cosas estuvieron mal hechas y una persona completamente inocente paga las consecuencias por eso”, comentó Insulza. 

Responsabilidades cruzadas

“La Corte Suprema hizo su propuesta. El Presidente, ateniéndose a los antecedentes, al hecho de ser mujer y al contar con el respaldo mayoritario de los senadores, hace una proposición. Quienes no han permitido esto han sido los senadores. Por lo tanto, nuestro problema no está en el Gobierno”, dijo el ministro Larraín al ser consultado por si la fallida nominación era un revés para el Ejecutivo. 

Lo cierto es que los ánimos quedaron tensos en la Cámara Alta, donde las recriminaciones fueron cruzadas, aduciéndose mutuamente responsabilidades del Gobierno y de los parlamentarios. 

Además, a La Moneda le había costado alinear a Chile Vamos, donde varios de los senadores pusieron en duda el apoyo a la magistrada.

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Sin embargo, lo más complejo fue con la oposición, pues desde un inicio el PPD había señalado que el nombre de Lusic no había sido gestionados con ellos, por lo que no se les podían endosar la responsabilidad. Mientras, en el oficialismo institían que la nominación había sido impulsada por la ex Nueva Mayoría y ahora lo desconocían. 

“En todas las conversaciones el único nombre al que ellos me hicieron referencia fue el de Dobra Lusic. Nunca me propusieron un nombre distinto”, señaló el ministro Larraín, quien además aseguró que le había consultado a todos los comités, incluido al PPD, a través del senador y presidente de la comisión de Constitución, Felipe Harboe.

Harboe, por su parte, apuntó a que le parecía injusto que se responsabilizara a su partido, pues había un problema de procedimiento por parte del Gobierno. De hecho, el parlamentario hizo hincapié en la postura que había tomado el Ejecutivo, muy proactiva al nombre de Lusic. “En todas las conversaciones le comenté (a Larraín) que no había acuerdo”, explicó en la sala el parlamentario del PPD. 

El tema también fue recriminado por el senador de la UDI, Iván Moreira, quien se fue en picada contra la tienda que lidera Heraldo Múñoz. “Aquí el gran responsable de este desacuerdo es el PPD”, señaló. Y agregó, “no nos engañemos y no digamos que no hay cuotas políticas en este parlamento para las votaciones, porque eso es una mentira”.

En este escenario, el ministro de Justicia anunció que se hará una propuesta para cambiar, entre otros, el mecanismos para nombrar a los nuevos jueces, ya que, según él, “este sistema en muchos aspectos está haciendo crisis”.

Punto que fue compartido con el presidente de la Cámara Alta, Jaime Quintana. “De esto tenemos que sacar lecciones y esta mesa del Senado hará todo lo posible para transparentar los procesos”, agregó el parlamentario PPD y detalló que los legisladores también tienen que hacer “una autocrítica”: ser más rigurosos con los nombramientos.

Mire la presentación de este tema en Primera Pauta: