Las “reflexiones” tras la propuesta de educación sexual del Gobierno

La propuesta elaborada por el Minsal y el Mineduc plantea modificaciones que amplían la cobertura en la entrega de educación sexual a partir de quinto año básico.

Un importante hito marcaron los ministros Marcela Cubillos y Emilio Santelices este miércoles 15 de mayo. En conjunto, los titulares del Mineduc y del Minsal presentaron el proyecto de ley que busca introducir modificaciones que amplían la cobertura en la entrega de educación sexual a partir de quinto año básico.

Esto porque, de acuerdo con la actual normativa, los establecimientos educacionales reconocidos por el Estado están obligados a impartir programas especiales de educación sexual recién a partir de primer año medio. Como dijo la propia ministra Cubillos: “Tener esta obligación a partir de primero medio es llegar tarde”.

El proyecto -que se ingresará a la Comisión de Educación del Senado en los próximos días- introduce cambios a la ley 20.418 y propone que, en base “al proyecto educativo de cada establecimiento educacional, sus convicciones y creencias, y siempre con la participación de los respectivos centros de padres y apoderados”, se pueda fortalecer la educación.

Así lo reconoció el ministro Santelices, quien además planteó que esta “es una materia que como país estamos preparados y debemos abordar”. Y agregó: “Debemos entregar herramientas para que ellos puedan tener una educación sexual integral y que con ellas puedan abordar de mejor manera diferentes situaciones”.

Los programas deberán incluir, de acuerdo con una minuta elaborada por las carteras, contenidos para un “adecuado desarrollo afectivo, un ejercicio responsable de la propia sexualidad, así como también para la prevención de Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS) y del abuso sexual”.

Según lo expuesto por los secretarios de Estado, el Ministerio de Educación entregará orientaciones a los establecimientos para la elaboración del programa.  Sin perjuicio de lo anterior, la cartera pondrá a disposición de los establecimientos distintas alternativas para su implementación.

¿Por qué surge el proyecto?

La iniciativa presentada por Cubillos y Santelices es una materia que vienen trabajando desde hace meses. Responde, en parte, al “complejo” aumento de casos de VIH y de otras enfermedades de transmisión sexual.

Además, de acuerdo con los planteamientos que entregaron desde el Ejecutivo, a estos factores se agregan los índices de embarazo adolescente. Si bien las cifras han disminuido en general, sigue preocupando que las tasas en menores de 15 años no alcancen una reducción significativa.

Por esto, plantearon que “es importante hablar de estos temas con el fin de adoptar una actitud de responsabilidad hacia ella. El objetivo es lograr comportarse con responsabilidad, no solo pensando en sí mismos, sino en el entorno que nos rodea”.

Así, surge como máxima que “la salud sexual debe defender, proteger, mantener y respetar los derechos sexuales de todas las personas”. Asimismo, explicitaron que la educación sexual, prepara y da competencia a niños, niñas y jóvenes a través de información, habilidades y valores para que enfrenten y vivan su sexualidad de manera segura y responsable.

La conceptualización en que se apoyan

Pese al consenso de que hay mayor información y más libertad para hablar sobre sexualidad, desde el Ejecutivo -como da cuenta la minuta antes citada- plantearon que sigue existiendo desinformación y cierto grado de control social, pasando desde una “sexualidad tabú” a un “atletismo sexual”.

Según mencionaron, “se exige a todas las personas tener una vida sexual placentera e hiperactiva según nuevos parámetros socioculturales, visualizando la sexualidad como un bien de consumo y generando nuevos mitos sexuales, nuevas problemáticas y también disfunciones sexuales. Por lo anterior, cobra especial relevancia la entrega de información actualizada y basada en evidencia científica respecto a la sexualidad y la salud sexual de las personas”.

En esta misma línea, sostuvieron que otra de las falencias es que aún hay quienes piensan que la sexualidad comienza en la adolescencia y termina con el fin de la vida reproductiva de las personas.

La recepción parlamentaria

El presidente de la Comisión de Educación del Senado, Juan Ignacio Latorre (RD), valoró la idea presentada, a pesar de que aún no conoce detalles de la iniciativa. “La derecha hace varios años se oponía a que existiera educación sexual en los establecimientos, entonces valoro que ahora se presente una iniciativa. Habrá que ver el contenido, pero que sea en conjunto con el Ministerio de Salud, creo que da una oportunidad para introducir en el sistema una educación integral”, comentó a PAUTA.

Eso sí, advirtió que la propuesta ya deja entrever mensajes de tono conservador que podrían obviarse en la discusión, como hablar de “atletismo sexual”. Aseguró que “obviamente los gobiernos ponen de su cosecha en los mensajes de la ley, a veces uno puede percibir cierto tono conservador, cierto prejuicio hacia los temas de la sexualidad. Históricamente han tenido contradicciones en esta materia, pero es un imperativo tener políticas públicas. Siempre los proyectos se podrán mejorar”.

De la misma forma, Camila Rojas (Comunes), presidenta de la Comisión de Educación de la Cámara, subrayó que si este proyecto no se traduce en “un derecho de educación sexual informada y pertinente, no se logra avanzar. Esto, porque la bajada queda al arbitrio de los programas educativos o a la visión de los apoderados de un colegio”.

Lo que podría pasar, a juicio de la diputada, es que, aunque se parta de una edad más temprana, fija una “obligatoriedad de papel”. “La educación sexual debe dejar de ser una carga privada de las familias y no puede ser una voluntad antojadiza de los establecimientos”, enfatizó.

Desde RN ciertamente aplaudieron el anuncio de Cubillos y Santelices. El diputado Andrés Celis, como dijo a este medio, hace tiempo que había solicitado que se ampliara la cobertura de la educación sexual, por lo que celebró la propuesta. Eso sí, reprochó la forma en la que se emplearon algunos términos. Tal como advirtió Latorre, le hizo ruido que el gobierno hable de “atletismo sexual”.

“Creo que la frase fue desafortunada, porque se refieren a que hay libertinaje, pero se entiende como una caricatura. Comprendo el trasfondo, es el libertinaje que hay, pero lo ponen con palabras poco adecuadas. Yo no hubiese ocupado esas palabras, es un error comunicacional, pero me quedo con el mensaje”, aseveró.

Respecto a posibles resistencias que podría generar la iniciativa en sectores más conservadores, Celis dijo que espera que no haya oposición, “creo que en general va a haber conciencia de que este tema está desbordado”.