Los cambios del Senado a la Cuenta Pública para evitar el “personalismo” de Piñera
La Comisión de Régimen Interior enviará una nota al Ejecutivo para manifestar la disconformidad con la cobertura de la cuenta.
A pesar de que el Gobierno quedó bastante conforme con la Cuenta Pública del Presidente Sebastián Piñera -especialmente porque marcó en promedio, 27,5 puntos de rating, siete más que en 2018-, los dueños de casa y organizadores no comparten esa visión.
La mesa del Senado, presidida por Jaime Quintana (PPD), primero manifestó al titular de la Segpres, Gonzalo Blumel, los reparos por la puesta en escena del discurso presidencial. Después se lo comentaron directamente el ministro del Interior, Andrés Chadwick, en la reunión que mantuvieron la mañana del miércoles en el Congreso, con motivo del acuerdo nacional para el mejoramiento de la política y las instituciones.
Tanto Quintana como el vicepresidente de la Cámara Alta, Alfonso de Urresti (PS), cuestionaron “el manejo arbitrario de los tiempos” por parte de La Moneda y el excesivo “personalismo” del Mandatario.
El asunto no quedó ahí y, durante la tarde de ese mismo día, se evaluó la situación en la sesión de la Comisión de Régimen Interior de la Senado. En la instancia, los senadores acordaron enviar una nota al Ejecutivo, donde se manifiesta la disconformidad y se pide adoptar los resguardos necesarios para los próximos años.
“La queja que se planteó en la comisión es que se vio una cuenta muy personalizada, donde el centro de todo estuvo concentrado fundamentalmente en el Presidente y sus ministros. La presencia del Congreso y sus representantes básicamente no tuvo connotación”, expresó a PAUTA el senador David Sandoval (UDI), integrante de la Comisión de Régimen Interior.
El también integrante de la comisión, senador Carlos Montes (PS), comentó que la aprobación de esa nota al Ejecutivo se debe a una evaluación de la cobertura, en que se critica una filmación más centrada en el gabinete y en parlamentarios oficialistas.
“Estas son cosas que ya ocurrieron, pero a futuro hay que arreglarlas. El Presidente es el protagonista, pero hay que buscar una filmación más equilibrada, sin sesgo […] La testera prácticamente no la mostraron, fue una transmisión mucho más desequilibrada de lo normal”, apuntó el legislador socialista.
El legislador gremialista coincide con Montes y añadió que, dado que la mesa de la corporación entregó todas las facilidades al Mandatario, en cuanto al horario y la organización, la mesa esperaba una “relación más recíproca”. Esto, dado que la Cuenta Pública tiene por efecto cumplir con una norma constitucional, donde el Presidente rinde cuentas ante el Congreso.
Sandoval comentó que el excesivo protagonismo de los jefes de Estado de los últimos años necesariamente debe corregirse, para garantizar una ceremonia “más armónica y así descentralizar las futuras presentaciones”.
La elaboración de la nota, como precisó el parlamentario, quedó en manos del secretario del Senado, Raúl Guzmán, quien deberá remitir el documento en los próximos días a nombre del Congreso. Además de esto, los senadores De Urresti y Quintana trabajarán en una propuesta para hacer las modificaciones que estiman convenientes.
Horario prime
Considerando los niveles de audiencia que alcanzó esta primera Cuenta Pública en horario prime, el Presidente Piñera confirmó a diversos medios de prensa su intención de mantenerlo para los próximos años. Sin embargo, esto no está zanjado. Es más, desde la mesa que preside Quintana recuerdan que “ellos son los anfitriones” y que esa definición también pasa por el Senado.
“Aquí quien decide cuándo y a qué hora se hace la Cuenta Pública es el Senado”, subrayó sobre este punto Carlos Montes.
Además, fuentes de la mesa consultadas por PAUTA consideran que realizar los próximos mensajes presidenciales en las mismas condiciones de este año no sería conveniente, dado el nivel de alteraciones que se produjeron en Valparaíso durante todo el día. De hecho, los cortes de tránsito y cierres de perímetros comenzaron a las 8:00 horas y recién se restableció la normalidad una vez terminado el discurso del Mandatario, casi a las 23:00 horas.
Esto se habría solucionado, a juicio de Montes, si la cuenta se hubiese mantenido a las 10 de la mañana. Para él, que el mensaje presidencial sea durante la noche es bastante “absurdo”. Además, reprochó que no se haya autorizado el permiso para marchar durante la jornada. “Eso no fue correcto”, dijo.
En cuanto a la opción de que los próximos discursos presidenciales se realicen el primer martes de junio, desde el Senado manifiestan que habrá que esperar que el Ejecutivo ingrese el proyecto que esto requiere para dejar atrás el 1 de junio como el día de la Cuenta Pública presidencial.