La dupla legal que irrumpe en el caso de los hermanos Frei

Juan Domingo Acosta y Alejandro Laura son los abogados que fichó el expresidente Eduardo Frei tras la autodenuncia de su hermano Francisco.

Aunque son de generaciones distintas, Juan Domigo Acosta y Alejandro Laura tienen una historia en común: ambos se formaron en sus comienzos trabajando en el estudio del penalista Nurieldín Hermosilla, padre de los abogados Luis y Juan Pablo Hermosilla.

Muchos años después, los caminos de los dos abogados, especialistas en casos de alta complejidad, se juntan pese a que trabajan en distintos estudios. Esto, luego de que fueran fichados por el expresidente Eduardo Frei Ruiz-Tagle tras la autodenuncia ante el Ministerio Público de su hermano menor, Francisco Frei, quien confesó –según publicó el jueves 29 el medio Interferencia– que realizó una serie de operaciones financieras sin autorización ni consentimiento del expresidente, perjudicando el patrimonio de su empresa Saturno S.A. en al menos $ 500 milllones de pesos.

La causa, que ingresó Francisco Frei a la Fiscalía Metropolitana Centro Norte, recién comienza. Y el fiscal a cargo, Francisco Jacir, ya realizó las primeras diligencias. Entre ellas, un allanamiento a la casa de Francisco Frei -el menor de los siete hijos del expresidente Eduardo Frei Montalva– y a su empresa Almadena (Almacenes y Depósitos Nacionales S.A.), desde la cual hizo varias operaciones irregulares usando la firma y huella de su hermano y el nombre de Saturno S.A. para solventar deudas en medio de la crisis que experimenta su firma.

Francisco Frei era el brazo derecho de su hermano en sus empresas desde hace 21 años.

Dos semanas antes de la autodenuncia, el 30 de julio, las hijas del exmandatario Magdalena y Catalina Frei Larraechea fueron nombradas por el directorio de Saturno como gerenta general y presidenta de la sociedad, respectivamente. Mientras que los poderes de Francisco Frei fueron derogados: dejó de ser el gerente general.

Acosta: el abogado del poder

Desde 2010, cuando Sebastián Piñera asumió en su primer gobierno, Juan Domingo Acosta se convirtió en uno de los abogados a quien el gobierno recurrió para varios casos complejos. Por ejemplo, fue el elegido por el entonces ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, para defenderlo en las dos acusaciones constitucionales que enfrentó en ese período. Y también lo representó cuando debió ir a declarar en el contexto del llamado caso Bombas 1.

Acosta, abogado de la Pontificia Universidad Católica de Chile y escritor de novelas policiales en sus ratos libres, es usualmente invitado a distintas comisiones parlamentarias para dar opiniones jurídicas en proyectos de ley.

En 2010, en plena hulega de los comuneros mapuches, participó en la elaboración de varios proyectos, entre ellos los cambios a la Ley Antiterrorista. En esa época era socio del estudio Espina, Zepeda & Acosta, donde compartía oficina con el actual ministro de Defensa, Alberto Espina, y con Carlos Zepeda, quien murió en 2013 y era uno de los mejores amigos de Piñera.

En los últimos años, Acosta -como Laura- ha estado tras varios casos complejos y de connotación pública: fue abogado en el caso Kodama de la ex ministra de Vivienda de Piñera Magdalena Matte, y también representó al economista Klauss Schmidt-Hebbel como querellante en el crimen de su hijo.

Además, defendió al exintendente de la Región del Biobío Jaime Tohá, mientras estuvo imputado tras el tunsami del 27 de febrero de 2010, y ha estado en los casos La Polar, Inverlink y Registro Civil, entre otros.

Uno de sus defendidos más públicos es el exarzobispo de Santiago Francisco Javier Errázuriz, en la causa por posibles encubrimientos de abusos sexuales.

Laura: del caso Farmacias al Registro Civil

Hace solo tres años que el abogado de la Univerisidad de Chile Alejandro Laura dejó el estudio de Nurieldín Hermosilla, donde comenzó a trabajar en 1998. Hoy es socio del estudio YLMV Abogados, otro de cuyos socios es Pedro Yaconi, pareja de Madgalena Frei.

Yaconi, a su vez, también trabajó años atrás en el estudio en el que estuvieron Acosta y Juan Pablo Hermosilla.

Como Acosta, Alejandro Laura también ha estado tras casos de alta complejidad. Por ejemplo, en el caso de la colusión de la farmacias, donde fue abogado de Sergio Purcell, quien era gerente general de Fasa.

Laura, además, formó parte del equipo querellante de Jorge Yarur contra Daniel Yarur. Por otra parte, Nurieldín Hermosilla y él fueron abogados de SQM en un juicio por usurpación de aguas contra una empresa de Francisco Javier Errázuriz.

Otros juicios complejos en la carrera del abogado fueron la defensa de Luis Eugenio Díaz, expresidente de la Comisión Nacional de Edución (CNA), y el caso del Registro Civil (2008), donde representó a la empresa Tata.