Noticias falsas y cómo combatirlas
Las noticias falsas o ‘fake news’ arrecian en tiempos de crisis, especialmente a través de las redes sociales y los servicios de mensajería. Pero hay que saber cómo reconocerlas y combatirlas.
A diferencia de lo que ha sucedido en términos informativos en el pasado, hoy las redes sociales y los servicios de mensajería funcionan como carriles paralelos de “periodismo ciudadano” y difusión de noticias en relación a los medios tradicionales. Así, las posibilidades de acceder y consumir información se multiplican en plataformas digitales. Pero, al no contar con un filtro o una edición a la que se ponga contexto, muchas veces la información difundida puede ser que esté fuera de contexto, inconclusa o sea derechamente falsa.
El concepto de las fake news ha crecido en los últimos años y, más allá de que el concepto se refiera efectivamente se refiera a noticias falsas, también ha sido utilizado para desvirtuar informaciones que no le convienen a los actores de las mismas. Y nuestro país, por cierto, no se ha visto ajeno al fenómeno. Especialmente en tiempos de crisis.
The Paradox of Participation Versus Misinformation: Social Media, Political Engagement, and the Spread of Misinformation es el título de una investigación hecha en Chile y publicada en Digital Journalism, una de las revistas científicas con mayor impacto en periodismo digital, donde académicos de la Universidad Católica y de la Universidad de Boston realizaron en conjunto un estudio enfocado en el fenómeno de las noticias falsas en nuestro país, perfilando quiénes son y cómo difunden noticias falsas en el país.
Mediante una encuesta a una muestra nacional de usuarios de internet de dos olas, la primera realizada en 2017 y la segunda en 2018, el estudio cuantifica cuán expuestos están los usuarios de internet a información falsa, cuántos creen que ellas son verdaderas y cuántos las comparten con sus contactos. “Más del 75% de los encuestados informaron estar al tanto de al menos cuatro afirmaciones que eran falsas, especialmente las relacionadas con rumores en torno a los grandes incendios forestales de 2017 y a los mitos científicos relacionados con las vacunas”, detalla Sebastián Valenzuela, uno de los autores del estudio.
Sin embargo, la proporción de encuestados que cree que estas historias son ciertas es considerablemente menor. En promedio, solo el 24% de los encuestados considera que las afirmaciones son “muy” o “extremadamente creíbles”.
Verificar la información
Más allá de las cifras, las noticias falsas son una realidad que aflora en demasía en momentos de crisis. Podría ser entendible el querer creer una noticia enviada por un familiar o cercano. Fotos, videos cortos, audios. De la misma manera, a veces la información recibida puede llegar a ser tan espectacular, chocante o insólita, que el usuario no se cuestiona la veracidad de la misma. Y ese es justamente el nudo del problema.
Este fin de semana recién pasado, a propósito de la crítica situación que está atravesando el país, las fake news han vuelto a aflorar. Y es entendible. Pero el punto es verificar la información recibida, ya que es responsabilidad de cada uno velar por lo que es emitido como noticia. “En el mediano y largo plazo las noticias falsas tienen un efecto súper corrosivo, porque en la medida en que tú crees que son verdad, empiezas a perder confianza en el sistema político completo”, afirmó el investigador.
Entonces, vayan algunas recomendaciones al momento de ver o recibir algún tipo de información que no provenga de medios de comunicación establecidos.
1. Luego de recibir algún tipo de información –un audio, video o texto– y antes de realizar cualquier acción, es muy conveniente tomarse un minuto y considerar si la noticia es, efectivamente, cierta. Por ejemplo, a partir de cuál es la fuente. Por lo mismo, se recomienda verificar dicha información con otros medios antes de compartirla. Porque los rumores son solo eso: rumores.
2. Las noticias falsas tienden a provocar un alto nivel de reacción emocional, especialmente a partir de sus titulares. Eso es parte de la estrategia. Pero hay que desconfiar. Las noticias inventadas, muchas veces, se hacen para causar grandes sorpresas o rechazo visceral.
3. Las noticias falsas suelen confirmar convicciones. Parte esencial del desarrollo de la llamada “cámara de eco” es generar información falsa que llame a realzar algún tipo de idea preconcebida. Dado que la noticia falsa exacerba lo anterior, se genera el “tenía razón”. Hay que tener cabeza fría y siempre confirmar la información o noticia recibida.
4. Cuando una noticia es cierta, lo más probable es que cuente y cite fuentes, links, documentos oficiales y autores que dan pie la veracidad de la misma. Las noticias falsas usualmente carecen de estos elementos.