Roberto Méndez y la CEP: “Es como una bancarrota del sistema político”
El analista se sorprende por la profundidad del pesimismo ciudadano, destaca la confianza de los chilenos en la democracia y ahonda en la mala percepción de Carabineros.
“Yo he trabajado muchos años en la democracia haciendo encuestas y la verdad es que nunca había visto un resultado tan negativo, con tanto pesimismo, tanta oscuridad con respecto, no solo a las instituciones políticas, sino que con respecto a la economía”.
Roberto Méndez es una de las voces más autorizadas en análisis de la opinión pública. El ahora profesor de la Escuela de Gobierno de la Universidad Católica fue fundador y presidente ejecutivo de Adimark, y con esa experiencia conversó con Pauta Final, de radio PAUTA, para analizar los resultados de la encuesta del CEP, que mostraron una caída general de todos los políticos y las instituciones.
“Es como un estado de ánimo extremadamente pesimista, es una especie de bancarrota del sistema político, porque no hay ninguna institución que supere el 10% y los liderazgos personales se deterioraron todos. Entonces muestra un distanciamiento, un quiebre entre la opinión pública y la clase política muy grave, porque debilita enormemente a la democracia”, asegura.
En el sondeo publicado el jueves 16 de enero por el CEP, la aprobación del Presidente Sebastián Piñera cayó al 6%, mientras que su rechazó ascendió al 82%. Sin embargo, Méndez es cauto respecto de la suerte del Mandatario, más allá del muy mal momento en términos de adhesión ciudadana.
“La encuesta hay que verla en la fecha en la que se hizo, que fue en el peor momento de toda esta crisis que se origina en octubre. Fue en un momento de noviembre cuando la violencia estaba desatada y parecía que no había ninguna forma de manejarla. Era un momento extraordinariamente malo. Yo no creo que la rueda de la fortuna esté echada, estas situaciones no pueden durar demasiado y es probable que haya algún tipo de cambio, ya sea por las iniciativas de este Gobierno en el proceso plebiscitario o por que la economía empieza a mejorar un poco, pero es difícil que se mantengan todas estas variables en este estado tan calamitoso como lo vemos hoy”, plantea.
El valor de la democracia
Uno de los pocos datos positivos de la encuesta es que la gran mayoría de los chilenos (64%) asegura que prefiere la democracia por sobre cualquier otro sistema de gobierno. Al respecto, Méndez destaca la fe de las personas en este modelo democrático de la política. “Eso da esperanza de que esto pudiera arreglarse”, dice.
Y en este escenario, ¿a qué puede aferrarse el Presidente? Méndez da pistas precisamente anclándose en la valoración que tienen los chilenos de la democracia. “A lo que se tiene que aferrar esencialmente es a la confianza de las personas en la democracia. Porque él es el Presidente democráticamente elegido. Entonces, aun cuando tenga estos niveles de aprobación tan malos, sigue siendo el Presidente que el pueblo eligió democráticamente, incluso por amplia mayoría y, por lo tanto, debe exigir el respeto y el apoyo para salir delante de esta situación”, comenta.
Y agrega: “Eso tiene que hacer. Y con humildad, retirarse en cuanto a comunicaciones, porque da la impresión de que mucho de este rechazo tiene [que ver con] un debilitamiento de su imagen personal. Incluso, todas las variables que se refieren a los atributos de la figura del presidente están agotados”.
“El dato más novedoso que vi…”
Para el ingeniero comercial y doctorado en la Universidad de Stanford, uno de los aspectos más novedosos fueron las malas cifras de Carabineros. Primero, porque el 64% de los consultados cree que sus efectivos violaron los derechos humanos de manera “muy frecuentemente o frecuentemente” durante la crisis que comenzó en octubre de 2019. Y segundo, por lo reacia que es la ciudadanía a que la policía actúe con fuerza incluso en casos de provocación o violencia. De hecho, el 57% de los encuestados “nunca” justificaría que carabineros use la fuerza contra un manifestante violento.
“Hay una desconfianza en Carabineros, porque el dato más negativo en el corto plazo es la opinión mayoritaria de que nunca se podría usar la fuerza para controlar a los manifestantes. Eso significa que el Estado queda maniatado de controlar el orden público, eso lo hace más difícil en las políticas de corto plazo de cómo se administran estas manifestaciones. Ese el dato más novedoso que vi en la encuesta”, asevera.
Escuche la entrevista completa de Roberto Méndez en Pauta Final: