Adriana Muñoz pide impulsar paridad en elecciones municipales y parlamentarias
La casi segura nueva presidenta de la Cámara Alta desde marzo próximo aborda con PAUTA los objetivos que intentará empujar.
El acuerdo que había tomado la oposición respecto de la administración del Senado supone que la mesa debe ser liderada por un PPD en 2020. El pacto consideraba como candidato a Felipe Harboe, pero luego de considerar un “cambio de circunstancias”, este decidió dar un paso al costado.
“Corresponde en este momento la posibilidad de que la presidencia del Senado la ejerza una mujer. En consecuencia, he tomado la decisión de declinar mi postulación en favor de mi amiga Adriana Muñoz”, dijo el senador tras reunirse con ella y con el actual presidente de la Corporación, Jaime Quintana.
En entrevista con PAUTA, la senadora abordó cuáles serán sus principales objetivos si es que es validada en el cargo, lo que se definirá en marzo. Su aspiración es que la presidencia de la Cámara Alta, en línea con las demandas feministas, releve la agenda de la mujer.
– ¿Estaba dentro de sus planes llegar a la presidencia del senado? ¿Cómo asume este desafío?
“Se ha producido en el país un movimiento, una movilización de miles de chilenos y miles de mujeres, en busca de un cambio social, económico y cultural, donde la fuerza del movimiento feminista ha sido muy gravitante, muy importante. Eso ha llevado a instalar debates que no sospechábamos que podían adquirir la fuerza que han adquirido, como es la paridad. Eso también llegó a instalarse en el Congreso, donde cientos de mujeres, a través de cartas, solicitaban a los partidos y bancadas que establezcan paridad también en la testera de ambas corporaciones”.
“Ese es un escenario que yo no había vivido. No había tomado ninguna decisión de ocupar la testera, entendiendo que había otros colegas que estaban postulando. Por cierto, en la medida que me vi involucrada en el movimiento, que me parece muy pertinente, y como además he trabajado toda mi vida desde el movimiento de mujeres para fortalecer los liderazgos y que ocupemos cargos de conducción, yo no podía evitarlo ni retroceder. Tengo que asumir el discurso y compromiso que he tenido siempre”.
– Mencionaba que otros colegas suyos se estaban postulando a este cargo. ¿Cómo quedan las relaciones en su bancada? Ha trascendido que hubo presiones internas para que Felipe Harboe bajara su candidatura.
“Habían otras opciones. Además de Felipe Harboe estaba Pedro Araya, la misma Ximena Órdenes. Por cierto que cuando hay que tomar decisiones son procesos complejos. Pero creo que el gesto de Felipe, al hacerse cargo de las demandas feministas, habla muy bien de cómo fuimos tomando estas decisiones”.
– Siguiendo el sentido de que hay nuevas demandas sociales instaladas, ¿cuál espera sea su sello en la presidencia del Senado?
“Hay que tener una agenda feminista en el Senado. Hay muchos temas que van quedando relegados o no son tramitados con agilidad en materia de mujer. Mi idea es poder trabajar transversalmente con las mujeres… bueno, también con hombres, y relevar la agenda feminista, detectar los proyectos de ley en materia de mujer y enfatizar en la importancia de que sean tramitados”.
– Se está discutiendo la posibilidad de establecer paridad en el órgano constituyente que redactaría la nueva Constitución, en caso de ganar la opción Apruebo. ¿Espera que durante su presidencia se pueda discutir o avanzar en un Congreso también paritario?
“Nosotros tímidamente hemos avanzado en cuotas, gracias a la expresidenta Michelle Bachelet, que en 2015 presentó o hizo real la ley de cambio electoral. Ahí venía un capítulo en relación a las cuotas de mujeres en las listas de los partidos y en el proceso electoral”.
“Hoy como hemos avanzado, y el órgano constituyente va a ser paritario, porque lo que está pendiente es solo el mecanismo, nosotros creemos que también podemos avanzar a hacer un planteamiento a los partidos para que las elecciones parlamentarias y municipales se puedan plantear en paridad. Los tiempos dan para ese tipo de avance”.
– En el entendido de que toda esta crisis social también ha significado un reordenamiento de las fuerzas políticas, ¿cómo evalúa el desafío que tienen como oposición este 2020?
“La mayor sintonía con la ciudadanía y con las movilizaciones sociales. Debemos estar atentos a cuáles son las agendas sociales, económicas y culturales urgentes que plantea el país con mucha radicalidad. En eso, creo yo, estamos al debe. El enojo de la ciudadanía con la política y los políticos es absolutamente comprensible. Hay que buscar el camino de sintonía, de vínculo real y efectivo, en el sentido de dar cuenta de que nos estamos haciendo cargo de las demandas”.
“Es claro que en la política, en el parlamento, no podemos resolver el 100% los problemas. Es claro que aquí también estamos cruzados por intereses económicos que están expresados en las distintas bancadas. Eso requiere un debate más profundo y decisiones más fuertes. Por ejemplo, en el marco del debate de pensiones, debemos realmente sincronizarlo con lo que está pidiendo el país, que es tener un nuevo sistema de pensiones. Sin embargo, eso está bastante entrampado, porque se descuelga la DC de un acuerdo que teníamos bastante transversal y se llegan a acuerdos por su cuenta”.
– ¿Espera que acá, desde el Senado, se pueda articular una postura que les permita tener mayor unidad?
“Nosotros hemos hecho un trabajo bien transversal con la Cámara en algunos aspectos. Hemos logrado aunar criterios, porque eso da fluidez a la tramitación de los proyectos. Creo que ahora se puede seguir haciendo lo mismo. Es importante trabajar con las bancadas de oposición, y también con las de Gobierno, porque hay muchos temas en los que tenemos que buscar posturas más amplias. Tenemos que ser inagotables en buscar diálogo, acuerdo y entendimiento, sobre todo en la oposición, para que afinemos nuestras propuestas de cara al país”.
–¿Buscará mantener las instancias de coordinación que estableció el actual presidente, Jaime Quintana, con quien presida la Cámara de Diputados?
“Es una buena institucionalidad la que se instaló. Pienso, como soy bien partidaria de un Parlamento unicameral, que podríamos avanzar con mayor fluidez si eso se mantiene. Espero que podamos ir, frente a diferentes temas, en la lógica de ese 2+2”
– Está pendiente la modernización de varias instituciones, entre ellas del Congreso. ¿Espera que los cambios que se hagan a esta instancia vayan encaminadas a un Parlamento unicameral?
“Esos son trabajos a largo plazo, pero creo que desde la administración del Senado -y trabajaré junto a la Comisión de Régimen Interno y con el secretario- por cierto buscaremos hacer un proceso de modernización con mucho respeto a nuestros funcionarios”.