Jefes siguen saliendo con empleados, pese a miedo al Me Too
Aunque las acusaciones sobre conductas inapropiadas en el trabajo han subido considerablemente, las relaciones dentro del ambiente laboral no han cesado.
El romance en la oficina está vivo y coleando, según una nueva encuesta realizada por la Society for Human Resource Management.
Pese a un mayor escrutinio sobre las relaciones en el lugar de trabajo en la era del #MeToo, una cuarta parte de los 696 trabajadores encuestados en un informe publicado el miércoles dicen que han tenido al menos una relación con un compañero de trabajo. De las personas que han tenido relaciones con compañeros, aproximadamente uno de cada cuatro dice que salieron con un jefe; uno de cada cinco dijo que salieron con un subordinado.
El comportamiento de los ejecutivos está en el punto de mira desde que las acusaciones de agresión sexual y acoso en octubre de 2017 provocaron la caída estrepitosa del productor de películas Harvey Weinstein. Más de 1.400 personas poderosas han sido acusadas de conducta inapropiada, desde comentarios groseros hasta violación, según la consultora de gestión de crisis Temin and Co. Solo unos 18 casos de esa cifra involucraban una relación consensuada.
Sin embargo, las empresas ahora están analizando todo tipo de relaciones en el trabajo. Durante el verano, BlackRock Inc. despidió a un ejecutivo de recursos humanos por una relación consensuada que violaba la política de la compañía. Meses después, el responsable de McDonald’s Corp., Steve Easterbrook, perdió su trabajo por mantener una relación con una empleada. Incluso antes del #MeToo, el 99% de las compañías tenían políticas que impedían que los jefes salieran con empleados bajo su responsabilidad directa.
Pero los procedimientos oficiales sobre los romances en la oficina deberían ser más concretos, dijo el presidente y responsable de SHRM, Johnny C. Taylor, Jr. “Los empleadores simplemente no pueden prohibir la realidad del romance en el lugar de trabajo”, dijo en un comunicado que acompaña el informe. “En cambio, deberían reflexionar sobre su cultura y asegurarse de que el enfoque sea actual, realista y equilibrado de manera que proteja a los empleados y los deje tener un romance libremente de forma responsable”.