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Blumel: “Pretenden que hagamos en dos o tres meses lo que no se hizo en 93 años de Carabineros”

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POR Alejandra Becerra |

En entrevista con Cristián Warnken, el ministro del Interior dice que la próxima semana se anunciará una reforma a Carabineros.

Un domingo de marchas multitudinarias en conmemoración del Día Internacional de la Mujer, desórdenes habituales en el centro de Santiago, denuncias contra integrantes violentos en una manifestación por el “Rechazo”, revelaciones el lunes de una golpiza policial a un jubilado, y la reactivación el martes de una corriente de la oposición que busca la salida del general director de Carabineros, Mario Rozas, e incluso de una acusación constitucional en contra del ministro del Interior, Gonzalo Blumel.

Todo eso en 72 horas frenéticas para La Moneda. Ya antes, el viernes 6 de marzo, fue una rueda de alertas por cierres masivos de estaciones de Metro.

“Desde que soy ministro del Interior, y sobre todo desde el 18 de octubre, la tensión es un momento más bien permanente”, cuenta Blumel a Cristián Warnken, el anfitrión diario en Desde el Jardín, de Radio PAUTA. “Hay rutinas que para mí son fundamentales: obviamente compartir con la familia, con los amigos”, dice la autoridad, “pero sobre todo la música y la lectura son dos fuentes inagotables de energía cuando las pilas parece que se van a agotar”.

“¿Duerme bien usted, ministro?”, consulta Warnken.

“Duermo bien, en general, sí. Son jornadas muy largas. Son jornadas muy agotadoras. Son jornadas muy intensas. Lo que sí reconozco es que desde que soy ministro del Interior me despierto algo más temprano”.

Tiene sentido: la violencia aparece siempre recargada al amanecer.

No hacer en tres meses lo que no se ha hecho en 93 años

“Hemos visto casos, denuncias gravísimas en materia de derechos humanos“, resume el ministro en relación con Carabineros.

Warnken vuelve sobre la policía. Más allá de que el adulto mayor Patricio Bao, protagonista del video conocido el lunes 9 de marzo, agredió con una patada a un funcionario de Carabineros. “La forma como este carabinero golpeó a esta persona… había algo ahí, como un ensañamiento, casi un momento de alienación del carabinero que a mí me dejó bastante perplejo”, comenta Warnken. 

“Sin duda son hechos relevantes, son importantes para el debate público”, contesta el ministro. Describe que el hecho ocurrió en la zona de calle Ramón Corvalán, un sector residencial que tiene a los vecinos asustados por los constantes episodios de violencia, en especial de los viernes. “Cuando Carabineros estaba cumpliendo con su deber, como tiene que ser, un funcionario es agredido por esta persona [Bao], y en el procedimiento policial desarrollado por el funcionario […], en la reacción posterior a la agresión, cuando [Bao] cae al piso y ya está reducido, hay un uso excesivo de la fuerza”.

Blumel subraya que Carabineros requiere modernizarse para, por ejemplo, recuperar su legitimidad. Pero alega que ni la Reforma Procesal Penal ni los cambios en la PDI se efectuaron en poco tiempo. Y entonces reclama: “Algunos pretenden que nosotros hagamos en dos o tres meses lo que no se hizo en los 93 años anteriores de Carabineros de Chile”.

“Tenemos todo el sentido de urgencia, pero pretender en dos, tres meses resolver todas las dificultades revela voluntarismo o derechamente ignorancia sobre cómo se hacen los procesos de reforma institucional”, insiste.

Asume que hay violencia. Pero distingue entre el uso legítimo de la fuerza del Estado y aquella violencia ejercida por los particulares. Se detiene en el papel del Estado. Tiene que haber un “justo equilibrio”, indica: “Vamos a usar toda la fuerza legítima de la ley que sea necesaria para resguardar y recuperar el orden público, pero con toda la prudencia necesaria para hacerlo bien”.

Desde octubre hasta ahora, el Gobierno contabiliza más de 2.800 eventos “graves”. Y Carabineros no estaba preparado, comenta Blumel. “Las capacidades institucionales para enfrentar esa violencia tan aguda no eran las suficientes. No teníamos un sistema de inteligencia apropiado. No teníamos algunas normas penales para enfrentar ciertos delitos asociados al orden público que no eran temas centrales pero hoy son muy importantes”, señala.

Mucho se pensó en el crecimiento y desigualdad; poco en instituciones

Blumel reflexiona sobre las causas que derivaron en esta crisis social. Sostiene que en el país hubo un debilitamiento de la “promesa meritocrática” y, segundo, un decaimiento de las instituciones y los liderazgos políticos. “Nos dedicamos mucho a pensar en el crecimiento, mucho sobre la desigualdad, que está bien, son dos cosas importantes, y pensamos muy poco en las instituciones”.

Cristián Warnken inquiere sobre una crítica que Blumel se haga. “Nos faltó velocidad, profundidad en las reformas”, responde el ministro. Añade que, más que convicción les faltó “más fuerza, más sentido de urgencia aun para la construcción de acuerdos”.

En las últimas horas y frente a los últimos hechos de violencia y las críticas al actuar de Carabineros, la oposición se abrió a la posibilidad de acusar constitucionalmente al ministro Blumel. El invitado responde de memoria: aquello es parte de las atribuciones que tiene el Congreso. Pero cuestiona de vuelta: “Esto tiene que ver con otros intereses o razones. Creo que la ciudadanía espera otra cosa de nosotros, que les demos respuesta a los problemas que enfrenta Chile”.

Desde esa misma perspectiva, además, espera que la conmemoración de los 30 años desde la recuperación de la democracia el 11 de marzo de 1990, sirva como punto de reencuentro.

Vea la conversación completa del ministro Gonzalo Blumel con Cristián Warnken en Desde el Jardín: