Las lecturas estadística y epidemiológica en la curva de contagios
Susana Eyheramendy, especialista en matemática genética, y el epidemiólogo Manuel Nájera proyectan el número de infecciones y cómo detenerlas.
En su informe del miércoles 1 de abril, el Ministerio de Salud informó oficialmente de 3.031 contagiados y 16 víctimas fatales por Covid-19 en Chile, una cifra que todos buscan interpretar adecuadamente para reaccionar ante la pandemia.
La lectura de tales números es un desafío para las autoridades, pero a ese desafío se dedican los especialistas del área.
En Primera Pauta, de Radio PAUTA, conversamos con dos expertos sobre estas materias y a continuación presentamos sus conclusiones.
La lectura estadística
Para Susana Eyheramendy, doctora en estadísticas y académica de la Universidad Adolfo Ibañez, una medida radical como una cuarentena completa en el país podría permitir una erradicación drástica en las tasas de contagio.
“Si hacemos un lockdown total de la población podríamos erradicar la enfermedad en tres a cuatro semanas. Pero eso no va a ser posible; por lo tanto, el número debemos bajarlo e ir estimándolo […:] no tenemos los test para saber cuántos son los contagiados día a día y no podemos dar la información con mucha confiabilidad”, reconoce.
Al dar por descartado que se pueda hacer la cuarentena total en todo el país debido a lo difícil de implementarlo y que se respete por períodos prolongados, la especialista, quien forma parte de los investigadores que participan en la Mesa de Datos del Coronavirus del Ministerio de Ciencias, ve en la detección rápida una buena fórmula para hacer proyecciones.
“Para poder sacar conclusiones y que los datos tengan validez, necesitamos que estos datos representen fidedignamente lo que está ocurriendo […] no tenemos una idea clara de cuántos contagiados tenemos, sobre todo porque se presenta asintomática en muchos individuos“, insistió.
Eyhermendy cree que en teoría podría determinarse un número aproximado de contagios al multiplicar el numero de fallecidos por 100, hace 15 días. Por ejemplo, al martes 31 de marzo 12 víctimas significarían 1.200 infectados al 15 de marzo, 2.400 al 20 de marzo, 4.800 al 25 del mismo y cerca de 9.600 hasta el martes 31. Lo anterior podría verse reducido, por las medidas preventivas que ya adoptó la autoridad sanitaria, según advirtió la especialista.
Escuche la conversación con Susana Eyhermendy
La lectura epidemiológica
El epidemiólogo de la Universidad del Desarrollo Manuel Nájera dijo que no hay certezas sobre cuándo el virus deja de estar activo en una persona contagiada. “Una persona con respiración viral puede estar expulsando virus hacia el ambiente y eso puede contagiar a otros. Es como una curva: parte con poquitos virus, y mientras más virus tenga en la zona respiratoria o en la garganta, transmite más por toser, por gritar, por hablar, etcétera”, explicó. Y según algunos estudios, agregó, hay pacientes que luego de recibir el alta médica tras 14 días podrían aún portar virus. “Lo que no está claro es si ese virus que portan […] puede contagiar o no”, apuntó.
“Una vez que se terminen los síntomas, lo ideal es hacerse un examen de control”, pero dada la situación actual, lo que se recomienda en otros países es que luego del alta “se da una extensión de la licencia por reposa de 10 a 14 días”.
Por otra parte, determinar los enfermos críticos con ventilación mecánica es un buen parámetro para determinar si se está llegando o no a tiempo a la detección.
“Lo esencial para analizar bien el brote es la cantidad de enfermos críticos y graves. Eso es lo que pasa con la enfermedad, que está sobrepasando los sistemas de salud. Un buen indicador es saber los enfermos críticos que terminan hosítalizados con ventilación mecánica, y también los fallecimientos”, precisó.
Para Chile, dice este especialista, el aumento de casos no ha marcado una tendencia tan ascendente como en países europeos.
Sobre el confinamiento, dijo que se debe evaluar por cada región por separado. Las medidas de cuarentena sirven para aislar y evitar los contagios, que son las razones por las cuales se aplicó en el sector oriente de la Región Metropolitana, pero planteó que tal vez debería evaluarse lo mismo con el sector poniente, donde hay una mayor densidad de población.
Dado que viene un aumento de los casos, es prioritaria la reconversión de camas a unidades críticas, entre otras medidas. “Van a ayudar a aliviar este golpe que se le viene al sistema de salud. Pero decirte que esto va a ser ‘crítico y hecatómbico’ no lo podría decir; se han tomado medidas y las medidas impactan de una u otra forma”, precisó. Ahora, con el invierno, con sistemas estresados por la mayor afluencia de niños y adultos mayores con complicaciones por el virus sincicial y la influenza estacional, “sumar este golpe de casos por el coronavirus puede ser complicado para el sistema de salud”.
Escuche la conversación con Manuel Nájera