El “rebrote” que ocupa al Gobierno: la semana en que volvieron las manifestaciones
El estallido social parecía haber bajado su intensidad en medio de la pandemia, pero solo el lunes se registraron más de 20 eventos de desórdenes públicos en el país.
Barricadas, ataques a cuarteles policiales y lanzamiento de bombas molotov. Las imágenes se vieron justo el día del aniversario de Carabineros, institución que cumplió 93 años a pocos meses del estallido social que partió el 18 de octubre y que ahora, con la pandemia, había bajado su intensidad. O eso se había entendido hasta ahora, con los manifestantes alejados de las calles en medio de las restricciones sanitarias que incluyen cuarentenas, prohibición de eventos de más de 50 personas e incluso toques de queda en todo el territorio nacional.
Fue así hasta el lunes de la semana pasada, cuando menos de 100 personas llegaron hasta Plaza Italia cerca de las 18 horas y terminaron en un enfrentamiento con Fuerzas Especiales. El domingo 26, día en que debió realizarse el Plebiscito, otro grupo de manifestantes llegó durante la mañana al mismo sector. Y este lunes, en el marco del aniversario de la policía uniformada, al menos 20 “eventos” relacionados con desórdenes públicos se registraron en todo el país.
Las nuevas manifestaciones y la serie de situaciones violentas encendió la alarma en las autoridades y generó cuestionamientos dentro del mismo oficialismo. La posibilidad de una segunda ola del estallido social había sido deslizada antes, tanto por la oposición como por los personeros de Chile Vamos, y este martes llegó a los oídos del Presidente Sebastián Piñera.
La “nueva mano”
En medio del debate por el aplazamiento del Plebiscito, el Mandatario convocó a los presidentes de partido y jefes de bancada de Chile Vamos a una reunión en La Moneda, para este martes a la mañana. En breves 45 minutos Piñera pasó por varios temas, ninguno en profundidad; uno de ellos fue la posibilidad del rebrote de las manifestaciones en respuesta a una pregunta de la senadora y presidenta de la UDI, Jacqueline Van Rysselberghe.
De acuerdo con quienes estuvieron en la reunión, Piñera afirmó que en caso de un rebrote el Gobierno está “mejor preparado” que antes. Que los manifestantes verían una “nueva mano”, cuando en octubre “ni siquiera existía una mano”. Y que habían reforzado la estrategia tanto policial como judicial.
Según el Mandatario, cuentan quienes supieron de sus comentarios, con las nuevas tecnologías, equipamientos y capacitaciones, Carabineros y la PDI podrían afrontar mejor las situaciones violentas. Asimismo, habría mayor esfuerzo por parte del Ministerio de Interior en iniciar acciones judiciales contra los detenidos por desórdenes graves y en realizar seguimiento de principio a fin de dichos trámites.
De hecho, este mismo martes Interior presentó ocho querellas contra 11 imputados por los incidentes del Día de Carabinero. “Además de delictuales, son [actos] absolutamente irresponsables, que ponen en riesgo la salud de las personas”, comentó el ministro del Interior, Gonzalo Blumel.
“Ayer [lunes] ocurrieron más de 20 eventos asociados a desórdenes públicos, por los cuales resultaron más de 70 personas detenidas. Son hechos gravísimos que involucraron barricadas, ataques a cuarteles policiales e incluso el porte y lanzamiento de bombas molotov. Por lo mismo, el Gobierno ha decidido iniciar acciones judiciales”, explicaba en la mañana el subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli.
La llamada a no aglomerarse de la Mesa Social Covid
Retomar las manifestaciones “es irresponsable, ya que no solo genera inestabilidades adicionales a las que ya existen, sino que además produce un daño a todas las medidas de distanciamiento social que nos han permitido aplanar la curva de contagios de la pandemia”, dice la senadora Van Rysselberghe a este medio.
Mientras, se acerca el Día del Trabajador, conmemoración que tradicionalmente reúne a miles de personas en las calles en todo el país. Con este antecedente, la duodécima versión de la Mesa Social Covid concluyó su cita con una declaración en conjunto: no relajar las medidas de distancia física y respetar las recomendaciones relativas a reuniones públicas y autocuidado.
“Solicitamos encarecidamente evitar toda aglomeración durante este periodo, tanto en los espacios públicos como privados, ya que ello puede exponer a riesgos sanitarios a la población”, se lee en el documento del que participaron los alcaldes de las distintas asociaciones de municipios del país, rectores de universidades, médicos y el mismo ministro del Interior.
En esa lógica, los distintos actores sociales han adaptado las formas de conmemorar el 1 de mayo. Por ejemplo, la Central Unitaria de Trabajadores convocó a una serie de actividades vía remota para este feriado.