El descargo de Chile Vamos luego de las semanas de furia

Los dirigentes oficialistas acordaron con el Presidente una nueva instancia de coordinación. Algunos plantean que la tensión ya pasó; en la UDI dicen que ya no serán incondicionales al Ejecutivo.

Se los vio ordenados. Ministros y personeros de Chile Vamos lado a lado, detrás del Presidente. La imagen que dejó el anuncio del conjunto de medidas para la clase media, encabezada por Sebastián Piñera y en presencia de su gabinete y los partidos, distó bastante de lo que ocurrió las últimas semanas en la coalición.

Justo antes de esa escena, el conglomerado hizo una especie de descargo de la tensión que venían acumulando con los días. El domingo, Piñera les solicitó a los partidos que asistieran 45 minutos antes de la ceremonia, fijada para pasado el mediodía.

Con los antecedentes de la semana, la sensación dentro del Ejecutivo antes de aquel encuentro era de bastante preocupación, cuenta un personero de Palacio. Pero no fue tan grave. Sin la presencia de los presidentes de partido más grandes -solo estuvieron Hernán Larraín Matte, de Evópoli, y Rodrigo Caramori, del PRI-, la conversación fluyó hacia un punto en común.

Todos coincidieron en que era necesario buscar una solución al conflicto, porque lo que estaba en juego era el próximo Gobierno.

“Es fundamental que Chile Vamos se ordene, articule mejor, reconstruya las confianzas, y podamos dejar de lado estas diferencias y asumir la resposabilidad que tenemos. Somos un proyecto que está dando gobernabilidad en un momento muy crítico, complejo y debemos ser conscientes de ello. Hay un desafio: 2021 es año electoral, tenemos el desafío de enfrentarlo de manera unida”, comenta Larraín Matte a PAUTA.

Otro comité polémico

Además del reconocimiento de las culpas compartidas, quedó en el aire la idea de una cumbre entre el Mandatario y representantes de los partidos, pero sin fecha ni mayores detalles. No obstante, el Comité Político Ampliado de este lunes tuvo otro tono.

La idea era continuar con la misma lógica del domingo, pero la cita de este lunes terminó siendo “más dura”. Así lo leyeron en La Moneda, tiempo después de finalizar el encuentro.

La disrupción vino por parte de la presidenta de la UDI, Jacqueline Van Rysselberghe, quien le quitó peso a la idea de las instancias de las nuevas reuniones de coordinación y reiteró una crítica que ha esgrimido en otras ocasiones: que los problemas de la coalición no son nuevos y que su partido ha pagado el costo político de los errores del Gobierno muchas otras veces.

El no enviar el veto a la ley que limita la reelección de autoridades y en consencuencia, no corregir el problema por el que varios alcaldes, RN y la UDI reclamaban, dejó un flanco abierto en la relación entre el gremialismo y el Gobierno. 

Así, desde su colectividad aseguran que seguirán siendo leales, pero no incondicionales. Y que eso implica que el Ejecutivo “también tendrá que considerar nuestras propuestas al momento de plantear algún proyecto, cuando veamos que no van por el camino correcto”, contestó a PAUTA el diputado y vicepresidente del partido, Juan Manuel Fuenzalida.

No fue solo eso. En la misma cita, la senadora por el Biobío también reclamó al ministro de Desarrollo Social, Cristián Monckeberg, por el hecho de que su esposa, la diputada Paulina Núñez (RN), votara en contra del Gobierno en el Congreso. Se refería al proyecto del posnatal de emergencia que tuvo apoyo también en RN.

“Hay tantas cosas que se dicen o dejan de decir. Yo me quedo con el ánimo que hoy inspira a nuestra coalición, Chile Vamos, y al Gobierno. Tenemos demasiadas urgencias, demasiadas necesidades, demasiados apremios, por lo tanto, vamos a seguir en esa lógica, de ir dándoles respuestas a las familias que tanto lo necesitan“, contestó Monckeberg más tarde.

“Y lo único que puedo decir, es que yo a mi mujer la quiero mucho”, concluyó.

En Palacio ven que la situación con la UDI es más compleja, pero también reconocen que el Presidente ha hecho “mucho esfuerzo” en mantener el diálogo y que habla a menudo con Van Rysselberghe por lo mismo. Que, como sea, les interesa recomponer la confianza y que no dejarán pasar esta situación. Lo que no está definido aún es el mecanismo a través del cual lo lograrán.

Las soluciones

Horas después de la cita, el Comité Político salió al paso de las críticas del conglomerado y reconoció la necesidad de una solución para el conflicto, basada en dialogar y escuchar. Por eso, en una primera instancia se habló de una cumbre con el Presidente y representantes de los cuatro partidos.

Eso sí, en el Gobierno ven una complicación que tiene que ver con que no siempre los presidentes de las colectividades o sus jefes de bancada son representativos de todas las facciones al interior.

Por ejemplo, hay un sector de RN, liderado por el senador Andrés Allamand y el diputado Diego Schalper, que no está en la misma línea que el presidente del partido. Entonces, la idea sería buscar un mecanismo para integrar a esos otros grupos subrepresentados. “La coalición pasa por un mal momento. Hay recriminaciones cruzadas, falta diálogo interno […] RN es el partido más grande del país y yo pienso que debe ejercer un liderazgo en términos que la coalición funcione bien, en armonía, y eso no se ve por ningún lado”, comentó Allamand este mismo lunes en Primera Pauta, de Radio PAUTA.

“A nosotros nos importan mucho nuestros partidos. El Presidente es extremadamente claro: tenemos escuchar, asumir, responder a nuestros partidos y, a la vez, solicitarles a ellos que también nos contribuyan de la mejor manera posible a que nosotros podamos finalmente gobernar bien. Eso es una relación bilateral, nosotros tenemos que escuchar y los partidos también nos tienen que aportar”, declaró durante la tarde del lunes la ministra vocera de Gobierno, Karla Rubilar.

El ministro del Interior, Gonzalo Blumel, les pidió a las colectividades que recuperaran sus propias instancias de comunicación dentro de la coalición. Y dentro de Chile Vamos reconocen que es necesario, aunque sea, una coordinación artificial para salir de la tensión constante. 

“Hoy la inmensa mayoría de los participantes del Comité Político Ampliado hicimos nuestra propia autocrítica, todos hemos participado para llegar a lo que estamos hoy en día. Vi buena voluntad, creo que eso va a seguir su camino y terminará en que sí o sí terminemos conversando, coordinando y limando las asperezas”, comentó a este medio el líder del PRI, Rodrigo Caramori.

“Hay total voluntad de todos los que estabamos ahí. Hicimos un análisis, fuimos muy directos con respecto a las críticas internas. Sabemos que hemos tenido semanas duras pero es momento de dejar atrás las diferencias internas y sobre todo velar por la unidad del sector”, explicó a PAUTA Sebastián Torrealba, jefe de bancada de RN.