Edward Altman, el padre de la puntuación Z sobre quiebras, prende el botón de alarma
Más de 30 empresas con deudas mayores a US$ 1.000 millones se han acogido al Capítulo 11. Altman prevé el doble.
El profesor de la Universidad de Nueva York que desarrolló una de las fórmulas más conocidas para predecir quiebras corporativas tiene una advertencia para los inversores de crédito estadounidenses: la avalancha de “mega” insolvencias de este año solo ha comenzado.
Más de 30 empresas estadounidenses con pasivos superiores a US$ 1.000 millones ya se han acogido al Capítulo 11 desde principios de enero, y es probable que esa cifra supere las 60 para finales de año debido a la deuda acumulada por las empresas durante la pandemia, según Edward Altman, creador de la puntuación Z y profesor emérito de NYU. Las empresas globales han vendido un récord de US$ 2,1 billones en bonos este año, y casi la mitad provienen de emisores estadounidenses, según datos recopilados por Bloomberg.
Si bien el repunte impulsado por el estímulo en los mercados de crédito desde marzo ha ayudado a los prestatarios a mantenerse a flote durante la crisis del coronavirus, Altman y otros han advertido que muchas compañías solo están retrasando un resultado inevitable. Fitch Ratings estima que los incumplimientos de los bonos corporativos mundiales este año podrían superar los niveles alcanzados durante la recesión mundial en 2009.
“Hubo una gran acumulación de deuda corporativa para finales de 2019 y pensé que el mercado giraría un poco hacia un desapalancamiento muy necesario con la crisis de Covid-19“, dijo Altman, quien también es director de investigación de mercado de crédito y deuda en el NYU Salomon Center. “Ahora, parece que las compañías nuevamente están explotando lo que parece ser un repunte loco”.
La recesión que se profundiza
A medida que nuevas oleadas de coronavirus limitan los viajes por avión y frenan el gasto de los consumidores, las presiones sobre la economía global están aumentando. El Fondo Monetario Internacional rebajó su perspectiva para la economía mundial en junio, proyectando una recesión más profunda y una recuperación más lenta de lo que anticipaba anteriormente.
Chesapeake Energy Corp., pionera de la revolución del gas de esquisto, y el minorista Brooks Brothers Group Inc. se han declarado en quiebra en Estados Unidos en las últimas semanas. Impagos en la región de Asia-Pacífico incluyen Virgin Australia Holdings Ltd. y Hilong Holding Ltd., con sede en Shanghái, una firma de servicios y equipos petroleros.
Man Group Plc, el mayor fondo de cobertura cotizado, ha advertido del riesgo para los compradores de bonos. El Banco Mundial también anticipó que más del 90% de las economías experimentarán contracciones este año, una tasa más alta que la observada en el peor momento de la Gran Depresión.
“La velocidad y magnitud del aumento de la deuda corporativa este año plantea varios riesgos para una perspectiva económica mundial ya frágil”, dijo Ayhan Kose, director del Grupo de Perspectivas de World Bank Group. Los países donde una gran proporción de los préstamos están en moneda extranjera o por períodos más cortos son particularmente vulnerables, ya que enfrentan riesgos de fluctuaciones en los tipos de cambio y también tienen que renovar la deuda más rápidamente, apuntó.