Lavín, Evópoli y el 10%: el laberinto de La Moneda

El Gobierno ya no intenta recuperar a los descolgados de Chile Vamos en el retiro desde las AFP y se concentrará en robustecer el proyecto de clase media. Mientras, los partidos oficialistas viven su propio invierno.

La reunión del Comité Político de este lunes partió un poco más tarde de lo habitual. Minutos antes de las 10:00 horas el Presidente Sebastián Piñera y sus ministros más cercanos analizaron en el panorama que se enfrentarán esta semana en el Senado, cuando se vote el proyecto que permitiría retirar hasta el 10% desde los fondos previsionales. 

De hecho, en la conversación, según comentan en La Moneda, estuvieron varios de los factores de la crisis oficialista agudizada en la última semana: el voto de los descolgados, el camino que seguirá el Gobierno en la discusión, pero también cómo pega en este escenario el factor Joaquín Lavín -sus dichos y acciones- y la crispación interna de los partidos, donde la renuncia de Hernán Larraín Matte a la dirección de Evópoli solo se convierte en la guinda de torta. 

No buscar dar vuelta a nadie

El último en sumarse a la cita de este lunes fue el titular de Hacienda, Ignacio Briones. Precisamente, es él quien ha estado analizando la viabilidad de algunas peticiones hechas por parlamentarios de Chile Vamos en las últimas 48 horas para mejorar el plan de fortalecimiento de clase media que la semana pasada fue presentado. 

Ese es precisamente el camino que elegirá el Ejecutivo, dicen en La Moneda, escuchar y “dar mejores herramientas” a los parlamentarios que están alineados, más que tratar de convencer a los que ya han dicho que votarán a favor del proyecto del “10%” y que el propio Briones trató de rebautizar como la iniciativa del “44%”.

“Nada de lo que se haga en el proyecto de clase media busca hacer cambiar de opinión a nadie. No buscamos dar vuelta a nadie”, dice un alto personero de Gobierno.   

La última semana ha sido dura para el Comité Político, Chile Vamos y el propio Mandatario, quien se la jugó personalmente por ordenar las filas, luego del revés sufrido en la Cámara de Diputados con votos oficialistas. Por eso, este inicio de semana sobre la mesa presidencial estuvo el análisis de los cinco parlamentarios de Chile Vamos que ya comprometieron su voto en la Cámara Alta. El último de ellos, el anunciado por el senador UDI José Miguel Durana, quien este lunes a primera hora despejó su decisión en entrevista con Primera Pauta, de Radio PAUTA.

“Si la votación fuese en una hora más, habría cinco parlamentarios de Chile Vamos que votarían a favor del retiro del 10%”, resumió Durana en referencia a sus colegas David Sandoval (UDI), Iván Moreira (UDI), Juan Castro (RN) y Manuel José Ossandón (RN), consolidando la rebelión oficialista. 

En La Moneda saben que el proyecto continuará su tramitación -con su alta popularidad- y que el miércoles en la Cámara Alta los votos estarán de sobra. Incluso, si sube el cuórum de 26 a 29 votos, es decir de 3/5 a 2/3 como piden algunos sectores oficialistas.

De hecho, las mismas fuentes comentan que cuando Moreira y Castro despejaron sus intenciones el viernes, la estrategia interna cambió. Más que contener la fuga, los esfuerzos se concentrarán en dejar claro por qué no les gusta el proyecto y mejorar la cobertura de la propuesta de clase media con los parlamentarios que se mantuvieron con el Gobierno. En esta línea, el Presidente Piñera ya se reunió con  RN y este martes recibirá a la timonel de la UDI, Jacqueline Van Rysselberghe, quien llegará flanqueada por las jefas de bancada, la diputada María José Hoffmann y la senadora Luz Ebensperger, quien debuta en el cargo tras la renuncia de Moreira a ser coordinador del comité. 

Eso sí, lo que no está definido en el Ejecutivo es si a la hora del trámite final se podría vetar o acudir al Tribunal Constitucional. Este segundo camino parece más viable, si algunos parlamentarios, como el RN Andrés Allamand, reclaman sobre los cuórums requeridos. No sobre 3/5 que hoy tendría, sino sobre 2/3 por la materia que trata: impuestos y seguridad social, según recalcan los detractores del proyecto, dos temas que son de exclusividad legislativa del Presidente.

Lavín: pragmático e incómodo

En la conversación de la mañana de este lunes entre Piñera y su círculo de hierro también se analizó el escenario “líquido” de los partidos oficialistas, en pleno proceso de construir un nuevo trato entre el La Moneda y Chile Vamos. Si bien hay en camino un documento, que tiene “buen lejos”, no verá la luz hasta que pase parte del “chaparrón” del 10%, dicen las mismas fuentes. De hecho, varios de esos factores estuvieron en la cita liderada por Piñera: por un lado Lavín y cómo presiona a la UDI en este debate; la interna de RN y el roce tradicional entre el diputado Mario Desbordes y Allamand, y también el gesto de Larraín Matte que, por más que trató de convencer a sus pares de dejar las dirigencias, no encontró eco en el resto de los timoneles oficialistas.

Y si bien todo es un cóctel tóxico en el oficialismo, en el caso de Lavín, la situación es un poco distinta. Simplemente, las últimas apuestas del alcalde de Las Condes incomodan en la UDI y en el Gobierno.

Desde el miércoles pasado, cuando el jefe comunal dijo que la propuesta de fortalecer clase media con un bono de $500 mil -como apuesta clave- era “mala” a pocas horas de la votación en la Cámara, que la relación con La Moneda quedó resentida. Incluso, algunos dicen que, el también exministro de Educación y de Desarrollo Social no ha sopesado la “desafección” que ha provocado en varios de los inquilinos de Palacio.

De hecho, este lunes se confirmó, comentan las mismas fuentes, lo que notificó la semana pasada: que el excandidato presidencial de la UDI apoyaba el proyecto del 10%. 

“Hemos llegado a un momento en que hay que tomar una definición, una decisión, estamos en una situación excepcional. Estamos enfrentando una pandemia que no tiene precedentes, pero en situaciones excepcionales hay que tomar medidas que uno jamás haría en circunstancias normales, pero en situaciones excepcionales lo haría”, dijo el alcalde en el matinal de Chilevisión, “Contigo en La Mañana”.

El jefe comunal de Las Condes propuso que en el Senado se debe avanzar simultáneamente “en los dos proyectos; o sea, debe avanzar en el plan clase media del Gobierno, que a su vez hay que mejorarlo, y en el retiro del 10% de las AFP que también hay que mejorarlo”. Esto, además, de avanzar en la reforma previsional. 

Lavín, además, calificó como una “exageración” la decisión de la UDI de pasar a su Tribunal Supremo a los cinco parlamentarios que se descolgaron en la votación de la Cámara de Diputados y que provocó la renuncia de tres de ellos: Sandra Amar, Álvaro Carter y Virginia Troncoso. 

Sus dichos no solo ponen en presión a La Moneda -donde comentan que Lavín habla desde su rol de “candidato”-, pues en menos de cinco días el personero mejor posicionado en las encuestas aparece nuevamente pauteando al Ejecutivo, cuando Briones ya ha dicho que no se harán parte de un acuerdo por el “10%”; además, provoca en la UDI y su directiva una contradicción con su discurso público: han acusado una y otra vez que la oposición usó resquicios constitucionales para avanzar en el retiro desde las AFP y que apoyar la propuesta es una ofensiva institucional. 

De hecho, otros históricos de la UDI como Pablo Longueira han deslizado que los que no voten alineados deberían renunciar a la tienda que lidera Jacqueline Van Rysselberghe. Algo absolutamente distinto a lo planteado por Lavín.

“No hay desalineamiento. Hay una visión más pragmática a Joaquín Lavín. No es parlamentario y no le toca votar este proyecto”, dice a PAUTA el diputado y extimonel de la UDI, Patricio Melero. 

Melero asegura que Lavín no renuncia a nada: “Más bien propone un camino más fortalecido y distinto en una visión, que probablemente si mañana es candidato presidencial, él querría generar ese ambiente político. No veo ningún quiebre, de ningún elemento disociador. Él tiene un camino pragmático, menos comprometido políticamente desde el momento en que no está en el Parlamento”.

¿El boomerang de Evópoli?

En el caso de renuncia de Hernán Larraín Matte a la presidencia de Evópoli, el tema fue tratado en el Comité Político aunque con menos profundidad, explican las mismas fuentes. Si bien varios valoraron el mensaje y el gesto, lo cierto es que pocos creen que logrará un efecto dominó en el oficialismo. Más bien, son más los apuestan por el efecto contrario. 

“La crisis de gobernabilidad de Chile Vamos es muy profunda, por lo mismo, es necesario oxigenar sus dirigencias”, dijo el ahora extimonel de Evópoli, agregando que con estos hechos esperaba generar un contexto “para que los otros presidentes de partidos se abran a la reflexión”. 

Pero tanto en la UDI como RN y el PRI desecharon la opción. En especial, en las tiendas que lideran Van Rysselberghe y Mario Desbordes, donde están en pleno proceso de definiciones para sus elecciones internas. “No hay mucho que añadir. Es un tema interno de Evópoli”, señaló la presidenta de la UDI. Mientras que el timonel de RN calificó como “rara” la decisión de Larraín Matte, aunque el jueves pasado él mismo se las había planteado como una señal para “ser parte de la solución” de la crisis oficialista. 

“La responsabilidad de los presidentes de partidos cuando se producen las crisis, en mi opinión, no es renunciar, es enfrentar la crisis y sacar adelante el buque que tenemos a cargo”, agregó Desbordes. 

Pero algunos fueron más duros con la apuesta de Evópoli y señalaron que era una jugada para “blindar” a sus militantes del Comité Político, tras la derrota por el 10%: los ministros del Interior, Gonzalo Blumel –cuestionado por su liderazgo interno-, y de Hacienda, Ignacio Briones. 

“La renuncia de los presidentes no corresponde. Lo de Hernán Larraín responde más a una estrategia para liberar de responsabilidad política a los ministros de Evópoli y traspasar esa responsabilid a los partidos, más que un intento real de oxigenar la política. Es más una movida estratégica de Larraín que un objetivo verbalizado y es endosar más responsabilidad política a los partidos y liberar de ella al Comité Político”, acusó el diputado Melero.

Ahora es el diputado Andrés Molina quien quedará de manera interina a cargo de la tienda más joven de Chile Vamos hasta las próximas elecciones, programadas para el 15 de agosto. De hecho, lo más probable es que Molina sea el sucesor permanente de Larraín Matte, pues inscribiría su lista para competir formalmente por la presidencia de Evópoli. 

Por lo pronto y en medio de la crisis oficialista, los secretarios generales de Chile Vamos intentarán hacer lo suyo y este martes a las 11:00 horas se reunirán por Zoom con otro de los temas pendientes para el bloque: las conversaciones con miras a las próximas elecciones.