El colateral del cambio de Gabinete: el surgimiento de un nuevo Chile Vamos

Los ajustes ministeriales pretenden rearticular al Comité Político. Pero con ello también se inaugura el buscado “nuevo trato” con los partidos.

Ajustar el Gabinete, ajustar la Coalición. La búsqueda del “nuevo trato” entre el Ejecutivo y los partidos del oficialismo estaba suspendida por la contingencia, pero con este cambio múltiple, según dicen en La Moneda, se buscó reflejar en específico esa intención.

Sumar voces y buscar que todos los partidos estén bien representados fueron parte de las ideas al realizar el cambio. Precisamente durante las últimas semanas, y desde el ajuste de principios de junio en el que Sebastián Sichel dejó Desarrollo Social, el argumento de parte del oficialismo era que existía un desequilibrio que favorecía a Evópoli y que el exministro del Interior, Gonzalo Blumel, no había estado a la altura de las circunstancias.

Desde allí, y sumando la derrota del Gobierno en el Congreso, la relación con los partidos de Chile Vamos, sobre todo la UDI y RN, iba en descenso. Con este cambio, que desde la oposición señalaron como “un guiño a los partidos del oficialismo”, la esperanza en La Moneda es que el panorama mejore.

Una “nueva etapa”, de acuerdo con las palabras del Presidente Sebastián Piñera, para la que no hará falta la renovación de las directivas que estaban en juego en las elecciones internas de los partidos, a partir desde agosto y hasta fin de año.

“Convoco a este nuevo Gabinete y a todo Chile Vamos, a emprender esta nueva etapa de Chile y de nuestro Gobierno con un verdadero espíritu constructivo con unidad, convicción y responsabilidad”, pidió el Mandatario en su discurso.

¿Se termina la interna de RN?

Con el cambio de este martes, Piñera podría haber resuelto dos problemas. Primero, suma a su gabinete a quien desde el oficialismo señalaban como el responsable de “abrir la puerta” al retiro del 10% de pensiones y que se había enfrentado con el ministro de Hacienda, Ignacio Briones, por la idea de condonar el CAE: Mario Desbordes.

Pero además, el ajuste se hace cargo de una compleja interna en ese partido. Andrés Allamand y Desbordes fueron los protagonistas de un largo enfrentamiento que partió al menos desde el estallido social y que se acrecentó a partir de la idea de una nueva Constitución. El primero como genuino representante del Rechazo, y el segundo abierto al Apruebo. Los dos, además, presidieron Renovación Nacional en algún minuto. De hecho, Desbordes ocupaba el cargo hasta este martes 28 de julio.

La llegada al Gobierno de Desbordes y Allamand, representantes de las dos almas de RN, disuelve al menos temporalmente la interna que los enfrentaba y que podría haber alcanzado su máximo potencial en las elecciones del partido, previstas para fin de año. 

Desbordes iba por la reelección y Allamand, aunque había descartado encabezar una lista, había afirmado varias veces que el actual líder de RN estaba conduciendo al partido de mala forma y que respaldaría al grupo de militantes que se presentara como alternativa a la continuidad del excarabinero.

En esa misma línea estaba Carlos Larraín, antiguo presidente de la colectividad y representante de aquella otra corriente más dura de RN, quien incluso apostaba por Allamand en el Ministerio del Interior. 

Finalmente, el ajuste llevó a Allamand a Relaciones Exteriores y a Desbordes a Defensa, lejos de la directiva del partido y, al menos desde la formalidad de los cargos, lejos de la tensión con Allamand. 

“Desde hace varias semanas hemos manifestado que vamos a trabajar unidos en lo que viene como coalición. Pudo haber habido diferencias, eso no está en discusión, entre el senador Allamand y el diputado Desbordes, pero no hay ninguna diferencia entre el ministro Allamand y el ministro Desbordes”, dijo Desbordes al asumir. 

Agregó que los dos iban a estar trabajando por Chile y por la coalición y que “no existe hoy día ninguna diferencia” entre ambos.

“Espero que sea un gabinete en donde se marque la diferencia con lo que hemos venido trayendo de las semanas anteriores. Se debe acabar con la política de la rencilla, deben terminar las diferencias internas y tenemos que empezar a estar unidos para, finalmente, sortear de buena forma esta pandemia”, manifestó el jefe de bancada de los diputados RN, Sebastián Torrealba.

Hasta el cierre de esta edición, aún no se definía quién iba a quedar al mando de la colectividad en lugar de Desbordes. Como primer vicepresidente, la carta más segura era el senador Rafael Prohens, pero pronto en la directiva comenzaron a evaluar que la reemplazante fuera otra de las vicepresidentas, la diputada Paulina Núñez. De lograrlo, Núñez sería la primera presidenta del partido.

Lo que sí se zanjó rápidamente en RN fueron los reemplazantes en ambas Cámaras. Por un lado, la diputada Marcela Sabat salta al Senado para ocupar el puesto que dejó Allamand. Mientras que a la Cámara de Diputados llegan Camilo Morán en el cupo de Desbordes y Tomás Fuentes en el cargo que deja Sabat. Morán era concejal de Lo Prado y mano derecha del ahora ministro de Defensa. Por otra parte, Fuentes es politólogo y uno de los expertos electorales de RN, además de ser un estrecho colaborador del nuevo canciller. 

La UDI retorna a Interior

Una de los puntos que el Mandatario buscaba resolver con el “nuevo trato” era cómo incluir en la discusión las distintas miradas dentro de los partidos, pues al Comité Político Ampliado solo asistían las directivas y los jefes de bancada del Congreso.

Con Allamand y Desbordes en el gabinete, el flanco se cerraba por el lado de RN. La llegada de los UDI Jaime Bellolio y Víctor Pérez a los dos principales ministerios del círculo de hierro político del Presidente resuelve en parte la inclusión en el Gobierno de dos corrientes muy diferentes dentro de la otra gran colectividad del oficialismo. 

Encima, satisface el pedido de mayor equilibrio en el grupo de ministros más cercano a Piñera y se hace cargo de las críticas por la sobrerrepresentación de Evópoli -hechas tanto en la UDI como en RN-, reflejada en la titularidad de Blumel e Ignacio Briones (Hacienda) de dos de los ministerios más importantes.

“La UDI ha puesto a dos de sus principales militantes a disposición del Presidente para asumir los desafíos de esta segunda etapa. Es evidente que una persona como Víctor Pérez, que ha sido miembro de directivas de la UDI y ha representado a la UDI en el Parlamento, es de aquellas personas que le va a permitir tener al Gobierno un mejor relato en lo que viene”, declaró el secretario general del partido, Felipe Salaberry.

¿Quiénes quedarían en sus cupos del Congreso? Al igual que en Renovación Nacional, desde la UDI responden que todavía no está definido. “Lo vamos definir internamente y no es algo que hayamos conversado aún”, respondió a PAUTA la senadora por el Biobío, Jacqueline Van Rysselberghe.

Según dicen desde el círculo de Bellolio, para su distrito, el N° 14 que incluye a San Bernardo, Calera de Tango, Buin y varias comunas más, es clave escuchar a las bases y recién luego de esa evaluación tomar una decisión.