A desempolvar las palomas: los partidos retoman la discusión sobre el Plebiscito

Falta solo un mes para iniciar la campaña y las colectividades se aprontan a reanudar el debate donde lo habían dejado.

El momento de desempolvar las poleras, los afiches y los spots ha llegado. La conversación suspendida sobre el Plebiscito, las campañas, la unión de los comandos, el Apruebo y el Rechazo de a poco se empezó a retomar y lentamente los partidos van moviendo sus maquinarias internas, a cuatro semanas de que parta el periodo oficial de campaña, el 26 de agosto.

En marzo, las colectividades coincidían en que era necesario primero superar la pandemia para reiniciar la discusión sobre la Constitución. Cuatro meses después, la pandemia aún no pasa,  pero el tiempo apremia y hoy, más que pensar en volver a aplazar, el tema está en cómo se asegura una votación con alta participación y en la que se respete el derecho a sufragio de la ciudadanía. 

En eso han estado los esfuerzos del Servel, de los partidos y del mismo Gobierno. Lo que sí es claro es que, tanto para el Apruebo como para el Rechazo, la pandemia de Covid-19 ha reforzado argumentos para apoyar una u otra alternativa. Y de ambos lados están convencidos de que lo ocurrido en estos meses servirá para dar ese último envión a la opción preferida.

Votar en medio de la pandemia

La pregunta ahora es cómo se retoma la discusión sobre el Apruebo o el Rechazo cuando aún, en ciertas regiones del país, las cifras son malas y las prioridades, otras. En ese contexto, los primeros acercamientos al asunto han girado en torno a cómo realizar un Plebiscito seguro.

Ya hay propuestas sobre la mesa, como extender el horario de votación, aumentar la cantidad de locales y disponer de alcohol en gel en las instalaciones. Si será suficiente o no, todavía no es claro. En el Gobierno insisten en que todos los esfuerzos están en que el Plebiscito se realice.

Por eso también surgió la necesidad de avanzar lentamente en el desconfinamiento progresivo de la Región Metropolitana. Sin saltos abruptos, sin que levantar cuarentenas signifique el regreso simultáneo de toda la población a la calle.

La piedra en el zapato de la oposición 

Una vez superado el cómo, los comandos tienen varios desafíos. La oposición vuelve a enfrentarse a la necesidad de sumar fuerzas y más después de la batalla ganada al Gobierno en el Congreso. 

El video de Carmen Frei (DC), Maya Fernández (PS), Carmen Hertz (PC)y Beatriz Sánchez (FA) “Unidas por el Apruebo” refleja la incipiente intención de los comandos opositores de unirse para la campaña. Otra vez. El año pasado lo intentaron, sin éxitos, e incluso algunas coordinaciones menores durante el verano tampoco llegaron a puerto. 

Tienen la esperanza de que esta vez resulte y la sensación de que, si esto no los junta, “seríamos terribles”, según dicen desde un comando. Las conversaciones ya partieron entre los secretarios generales de las colectividades y en los próximos días se sumarían los coordinadores.

“Estamos trabajando en ello. El llamado muy claro que hemos hecho es a que todas las fuerzas políticas y sociales que estamos por el Apruebo y la Convención Constituyente podamos trabajar por dar garantías de un Plebiscito seguro y democrático. El momento político y social que atraviesa nustro país exige más que nunca que enfrentemos estos procesos con unidad”, dice a PAUTA la presidenta de Revolución Democrática, Catalina Pérez.

En Apruebo Chile Digno, el comando encabezado por el Partido Comunista, el propósito de converger no es tan claro. “No hemos tomado la decisión de disolver nuestro comando para establecer uno conjunto de la oposición, significaría no reconocer que tenemos miradas distintas del país. Nuestra diversidad aportará mucho más”, explica a este medio Camilo Sánchez, presidente de la Juventud Comunista y coordinador del bloque.

Los nuevos (y los viejos) argumentos

El pase del “Apruebo” al “Rechazo” de varios parlamentarios de Chile Vamos abre una puerta para el oficialismo. Ahora son algunos más y, de acuerdo con el coordinador del “No” a la Nueva Constitución en RN, Luis Pardo, “es previsible que Chile Vamos en conjunto se incline mayoritariamente por esa opción. Por lo tanto, hemos iniciado también las reuniones de coordinación para el Plebiscito”.

Por ahora, solo algunos Zoom y nada concreto. Mientras tanto, Libertad y Desarrollo en estos días iniciará a un ciclo de charlas llamado “Qué está en juego”, al que varios personeros le están prestando atención.

Pero además, el cambio de opinión de varios políticos oficialistas refleja una hipótesis ya escuchada en abril: que el Rechazo aumentaría en popularidad debido a los estragos de la pandemia. “Es evidente que es posible hacer cambios profundos al sistema de pensiones, de salud, sin tocar la Constitución. Lo decíamos antes y ha quedado demostrado ahora”, comenta a PAUTA el diputado y representante del Rechazo en el partido, Juan Antonio Coloma Álamos. 

El parlamentario describe como ejemplos de estos cambios la intervención del Ministerio de Salud en la disposición de las camas críticas a lo largo del país o la reforma al sistema de pensiones. Lo secunda su par de RN, Karin Luck, quien también está por la misma opción.

“Se está comprobando que no necesitamos una nueva Constitución para cambiarla. Se vio con el retiro de los fondos, que se pudo hacer. Hay una serie de temas que se pueden hacer y poder modificar la Constitución dentro del Congreso, que es lo que siempre hemos dicho desde el Rechazo”, suma Luck.

Desde Chile Vamos aseguran que la opción ha ido “de menos a más”, aunque las últimas encuestas no lo reflejen así. “Los partidarios del Rechazo que están dando a conocer ese argumento parece que no han tenido a la vista ningún antecedente concreto ni ningún estudio de opinión que corrobore dicha afirmación”, responde a PAUTA el presidente del PS, Álvaro Elizalde.

La otra discusión: el financiamiento

Otro de los temas que cobrará protagonismo en las próximas semanas en cuanto al Plesbiscito es cómo se financiarán las campañas. Este lunes se conoció la propuesta del Servel para regular esta materia pues, según consignó El Mercurio, desde el organismo apuntan a que no hay tope de gasto electoral y existen vacíos legales que permitirían que empresas y fuentes del extranjero aporten a los partidarios del Apruebo y del Rechazo.

“En esta ley quedó un vacío que tiene que ver con el financiamiento y su regulación. Esa no fue una discusión que hubiese estado sobre la mesa durante la tramitación de la ley y por eso terminó saliendo sin haber normado y regulado esta situación”, comentó durante la jornada la ministra vocera de Gobierno, Karla Rubilar.

Desde el Gobierno explicaron que están evaluando qué camino seguir para subsanar el error y que el esfuerzo estará en hacer “un Plebiscito y una elección ejemplar”.