¿Una quina con tres mujeres? El escenario para la nueva nominación a la Corte Suprema
En la actual quina había dos ministras. Si el Pleno suma a Adelita Ravanales, por primera vez habrá una lista en competencia con mayoría de juezas.
Luego del rechazo del Senado para que el ministro Raúl Mera ascendiera a la Corte Suprema, ahora el Pleno del máximo tribunal deberá reemplazar su nombre en la misma quina en la que el titular de la Corte de Apelaciones de Valparaíso fue incluido para su postulación.
En esa lista, además de Mera, postulaban otros cuatro jueces: María Soledad Melo, Jéssica González y Mario Carroza, todos integrantes de la Corte de Apelaciones de Santiago, junto con Sergio Mora, quien es incluido por derecho propio al ser el más antiguo de la categoría en el Poder Judicial.
El quinto nombre, que el Pleno podría escoger la próxima semana, probable sea escogido entre los jueces que quedaron fuera del listado inicial y que empataron en cinco votos: Adelita Ravanales y Roberto Contreras, de las cortes de Santiago y San Miguel, respectivamente.
El rechazo de Mera, decisión que ha sido cuestionada por muchos jueces y ministros, entre ellos el expresidente de la Corte Suprema Milton Juica, reforzó el escenario para que sea una mujer la próxima candidata a ocupar la vacante que dejó el ministro Hugo Dolmestch, quien jubiló en noviembre de 2019.
La Corte Suprema, que está integrada por 21 ministros, cuenta con siete mujeres. En la misma línea, en las cortes de Apelaciones la presencia femenina equivale al 33% de los jueces.
Hay tres razones que sustentan la opción de una mujer.
La primera es que los 14 senadores que votaron en contra de Mera -solo le faltó el voto del senador Manuel José Ossandón (RN) para ser ascendido- lo cuestionaron sobre la base de un fallo: haber absuelto a cuatro carabineros por la muerte de los exfrentistas Cecilia Magni y Raúl Pellegrin y no haber indagado en las torturas que fueron halladas en sus cadáveres en Los Queñes en 1988.
Por ello, el factor “derechos humanos” podría pesar, tanto para el oficialismo como para la oposición, en la próxima nominación. De los candidatos actuales, solo uno está vinculado a estas causas: el ministro Mario Carroza, quien indaga los crímenes cometidos por agentes del Estado durante el régimen de Augusto Pinochet. Pero también es quien pidió la extradición a Chile desde Brasil del exfrentista Mauricio Hernández Norambuena, uno de los autores del asesinato del senador de la UDI, Jaime Guzmán, ocurrido en 1991.
La segunda es que la quina actual ya tiene a dos mujeres en carrera: María Soledad Melo y Jéssica González. En el caso de sumarse Adelita Ravanales, por primera vez una lista elaborada por el Pleno tendría una mayor cantidad de ministras.
Un tercer factor es que mientras los senadores votaban la elección de Mera, hubo señales de que la Corte Suprema debiera estar integrada por más mujeres. Una de ellas provino del ministro de Justicia, Hernán Larraín, quien previo a la sesión recordó que el Gobierno ha impulsado la equidad de género en los tribunales. De hecho, su última candidata fue María Angélica Repetto.
Larraín: avanzar en la equidad de género
Poco antes del rechazo de Mera en el Senado, mientras defendía en la Sala la postulación del ministro de la Corte de Valparaíso, Larraín dijo a los parlamentarios que a los requisitos tradicionales para llegar a la Corte Suprema (“elevada preparación”, “trayectoria” y “pluralismo”) el Gobierno quería añadir otros dos: “una adecuada representatividad territorial y equidad de género”.
Larraín recordó entonces que de los cuatro supremos que han nombrado, dos son mujeres. Anterior a Repetto, escogió a Ángela Vivanco, quien integra la Tercera Sala Constitucional. Mientras que la magistrada Repetto reemplazó a Dobra Lusic, a quien el Gobierno escogió el año pasado, pero que tras recibir cuestionamientos tanto del oficialismo como de la oposición, se retiró de la carrera.
Larraín dijo también que de los 25 ministros nombrados en las cortes de Apelaciones del país -proceso en que no participa el Senado-, 14 han sido mujeres. “Por lo tanto, vamos avanzando en la equidad de género, por lo que esperamos que al término de este Gobierno, eso también se refleje en las nominaciones que debemos hacer en la Corte Suprema”.