México y Brasil tienen respuestas económicas opuestas a la pandemia. Ninguna funciona
Los rendimientos de los bonos de los mayores países de América Latina están por detrás de Chile, Colombia y Perú.
Brasil y México adoptaron estrategias opuestas ante la pandemia de coronavirus, ya que el primero aumentó el gasto y el segundo se mantuvo firme en cuanto al estímulo. Los inversionistas están evitando ambos enfoques.
Los bonos en dólares vendidos por las dos naciones más grandes de América Latina han tenido un rendimiento inferior al de sus pares desde que la pandemia comenzó a arrasar la región hace seis meses. Los bonos de Brasil perdieron 2,4% y la deuda de México cayó 5,9%, mientras que Perú, Chile y Colombia arrojaron rendimientos positivos, según índices de JPMorgan.
“México sigue apostando por la responsabilidad fiscal y está dispuesto a renunciar al crecimiento económico, mientras que Brasil avanza en la dirección opuesta”, dijo William Snead, analista de BBVA en Nueva York. “En el mejor de los casos, los inversionistas podrían tener una ponderación de mercado para esos créditos”.
Los enfoques de Brasil y México
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, está gastando mucho dinero para combatir el impacto económico de los más de 3,6 millones de casos reportados de Covid-19, la segunda mayor cifra en el mundo, incluido un nuevo programa social y un plan de ayuda a los trabajadores por US$ 50.000 millones. Mientras tanto, el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, no solo se ha resistido firmemente a los llamados a desplegar estímulo fiscal, sino que ahora promete recortar los salarios de los empleados del Gobierno en hasta 25%.
Como resultado, se prevé que la economía de México se contraiga 9,5% este año, mientras que Brasil caerá solo 6%, según encuestas de Bloomberg. En la otra cara de la moneda, el déficit presupuestario de Brasil se multiplicó por 10 en el primer semestre, mientras que la brecha de México solo se duplicó.
Para Edwin Gutiérrez, director de deuda soberana de mercados emergentes de Aberdeen Asset Management, en Londres, el débil crecimiento de México puede perjudicar su calificación crediticia de grado de inversión. Brasil ha tenido una calificación basura desde 2015.
Las agencias de crédito están “más preocupadas por la absoluta falta de existencia de un modelo de crecimiento” en México, dijo Gutiérrez. No obstante, un débil crecimiento significa que hay una oportunidad en los bonos en moneda local, ya que Banxico se verá obligado a recortar las tasas a 3,5%, indicó.
Y si bien las mejores perspectivas de crecimiento de Brasil pueden ayudar a compensar algunas de las preocupaciones del mercado en torno a las perspectivas fiscales, los bonos en dólares de México aún pueden ofrecer un mejor valor, según Anders Faergemann, administrador de carteras de PineBridge Investments, con sede en Londres, que gestiona unos US$ 96.000 millones.
“La economía de Estados Unidos se recuperará más rápido hacia el cuarto trimestre, elevando a México y Colombia en paralelo”, dijo, y agregó que Brasil está más vinculado al crecimiento de China. “Se justificaría una prima adicional sobre los bonos en dólares brasileños en medio del riesgo fiscal durante un período de tiempo más prolongado”.