Ex-GOPE detalla cómo se tramó la versión falsa del crimen de Catrillanca
Carlos Alarcón, acusado de disparar al comunero mapuche por la espalda, declaró que sus superiores lo obligaron a decir que hubo fuego cruzado y que se planeó eliminar las cámaras.
“Haz lo que te están diciendo ¿o querís (sic) ir a la cárcel?”.
Esa es la frase que el exsargento y ex-GOPE de Carabineros Carlos Alarcón, acusado del homicidio de Camilo Catrillanca, ocurrido el 14 de noviembre de 2018 en Temocuicui, dijo que le fue señalada por quien era su superior en esa fecha, el ahora mayor en retiro Manuel Valdivieso, también imputado en la causa.
Alarcón, para sorpresa de los intervinientes -y de la defensa de Valdivieso, quien incluso pidió la nulidad de su testimonio- decidió la mañana del miércoles 2 de diciembre usar su derecho a declarar durante la audiencia del juicio oral por la muerte del comunero mapuche, quien recibió un balazo por la espalda cuando estaba sobre un tractor.
El ex-GOPE reconstruyó los momentos posteriores al deceso de Catrillanca y señaló ante Tribunal de Juicio Oral de Angol que “desde el principio dije que me hacía responsable”.
Agregó que, además de Valdivieso, en una reunión en el cuartel de Pailahueque, el abogado de Carabineros Cristián Inostroza le indicó a él y a los otros integrantes del GOPE que participaron en el operativo que cuando declararan ante el Ministerio Público, testificaran lo siguiente: “Nos dice: ‘ya muchachos, van a ir a prestar declaración a la Fiscalía y tienen que decir que ustedes fueron atacados desde los lados del camino, que hubo fuego cruzado, que el tractor se cruzó en la línea de fuego'”.
Al agregar detalles sobre esa escena, Alarcón contó que le señaló a Inostroza que “yo estoy asumiendo mi responsabilidad y eso no está bien. Salió (el abogado) y entró mi mayor Valdivieso y me manifiesta: ‘hagan lo que se les está diciendo'”.
Incluso, Alarcón dijo que desde el comienzo contó los hechos tanto a Valdivieso como al exgeneral Mauro Victoriano, en el sentido de que no hubo disparos desde personas ocultas en la vegetación, que era la situación que fue descrita en el parte policial y en el documento titulado “Resumen ejecutivo”.
Una versión que -insistió- también entregó desde el principio al coronel Jorge Contreras y al mayor Christian Fernández respecto de que “nunca hubo fuego cruzado. Nunca el tractor se cruzó en la línea de fuego, porque el que inició el fuego fui yo”.
Aparecen las cámaras
Luego de la muerte de Catrillanca, las primeras versiones institucionales fueron de que los integrantes de la patrulla no portaban cámaras. Un hecho que se desmoronó cuatro días después del crimen, cuando el domingo 18 de noviembre, a las 8.30 de la mañana, el entonces ministro del Interior, Andrés Chadwick, y el exgeneral director de Carabineros, Hermes Soto, informaron en una conferencia de prensa que sí había grabaciones.
¿Cómo fueron los hechos? En la versión de Alarcón al tribunal, la noche del suceso, Valdivieso se dirigió a los miembros de GOPE. “Pregunta quién andaba con cámara. De inmediato mi mayor Valdivieso dice que hay que eliminar esa ‘huevada‘ (sic). Yo me tomaba la cabeza su señoría y decía que esto no está bien, que esto se va a saber y va a ser peor. Me manifiesta: ‘haz lo que te están diciendo ¿o querís (sic) ir a la cárcel?'”.
También dijo que Inostroza, al saber que un policía, Raúl Ávila, sí portaba cámara, les dijo que “hay que eliminar esa ‘huevá‘ (sic)”.
Respecto del ex general director de Carabineros Hermes Soto, quien renunció tras el caso Catrillanca, Alarcón señaló que nunca habló con él al respecto.
Pero relató que el sábado 17 de noviembre, el escolta de Soto, a quien identificó como capitán Arias y también miembro del GOPE, se le acercó y le dijo: “‘Los dos somos GOPE, ¿le disparaste al tractor?’. Le dije que sí (…). Lo que pasó después no lo sé. Desde esa fecha pasó el 18 de noviembre, nos citan al GOPE un día domingo para firmar la baja de la institución. Lo que más me duele es que me hayan dado de baja por mala conducta”.
Ese mismo día, el Gobierno y Carabineros rectificaron la versión anterior y admitieron que sí había cámaras.
Una versión que Andrés Chadwick también formuló ante el tribunal en su declaración como testigo el pasado 26 de noviembre, donde contó que Hermes Soto fue quien la tarde del 17 de noviembre le señaló que tenía información de que un integrante de la patrulla portaba una cámara.