ABIF y Fogape 2.0: “Cualquier fijación de tasas significa excluir a algún segmento de deudores”
La nueva propuesta que se discute en el Senado aplica un techo a la tasa de interés que pueden aplicar los bancos. “Debiera haber una confianza en que en este caso los bancos lo único que quieren es acompañar a sus deudores”, comentó José Manuel Mena, presidente de la ABIF.
La entrega de créditos Fogape Covid mantuvo ocupada a la banca durante 2020. En total se entregaron créditos por US$ 12.741 millones con garantías establecidas por el Gobierno para enfrentar la crisis económica ocasionada por el coronavirus. En paralelo a esta línea, Hacienda anunció a mediados de diciembre nuevas garantías para los créditos a pequeños y medianos empresarios que busquen recursos para la etapa de recuperación económica. La nueva línea fue bautizada como Fogape Reactiva y la gran diferencia respecto de los préstamos Fogape Covid será que la tasa será flexible, aunque durante la discusión parlamentaria se estableció un techo de 7,2% por sobre la TPM. “Cualquier fijación de tasas significa que algún segmento de deudores va a quedar excluido. Nuestra mirada es que debiera haber una confianza en que en este caso los bancos lo único que quieren es acompañar a sus deudores. Si queda fijado como estamos viendo en las conversaciones del Congreso, nuestra mirada es que siempre va a quedar un pequeño segmento que no va a poder ser acompañado”, advirtió José Manuel Mena, presidente de la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras (ABIF).
Junto con eliminar el techo de la tasa, Mena pidió simplificar las operaciones de crédito y explicitar cuál es la garantía para efectos contables, lo cual también ampliaría las posibilidades de otorgar préstamos por parte de la banca. “Nuestra disposición es que podamos mantener el flujo de crédito en este Fogape y flexibilizar los plazos, el tema es cómo podemos aumentarlo y ampliar esa base y ahí está la discusión porque pensamos que podría hacer mucho más si tuviésemos las herramientas adecuadas”, agregó.
Balances
Según Mena, 2020 fue el año más complicado para la industria desde la crisis de deuda externa. A octubre las ganancias de la banca retrocedieron 61,6% en relación a 2019. En noviembre las utilidades se recuperaron, pero todavía reflejaron un elevado nivel de provisiones.
“Si uno plantea que hemos pasado el peor minuto de la pandemia y que las vacunas van a generar una base para poder aspirar a un piso de crecimiento y de normalización económica, podríamos decir que ha pasado lo peor. Pero yo esperaría todavía algún tiempo, al menos hasta que tengamos una vacunación de un 30% a 40% de la población para poder asentar esa afirmación”, proyectó Mena.
Portabilidad financiera
Junto con la entrega de créditos Fogape, la banca implementó en septiembre nuevas herramientas para facilitar portar préstamos de una institución a otra. La portabilidad financiera fue una iniciativa lanzada por el Gobierno en 2019, para aprovecha las tasas históricamente bajas. Sin embargo, el inicio de su implementación fue lento. “Hay que sentar las bases de expectativas razonables de la complejidad que supone la portabilidad financiera versus alguna compañía de celulares”, comentó Mena. Según cifras de la ABIF, actualmente se han registrado un total de 220 mil solicitudes, pero aquello se traduciría en máximo 110 mil personas debido a que cada individuo hace más de una solicitud a instituciones distintas para comparar las condiciones de crédito. De este total, 45% han terminado las indagaciones y podrían estar en condiciones de portar el crédito. Según Mena, entre 4 mil y 5 mil créditos ya han sido portados.
Vea la entrevista a José Manuel Mena en PAUTA Bloomberg