Una ley que no rige, 1.600 inmigrantes y autoridades de vacaciones: las claves de la crisis en Colchane
El alcalde de la comuna en la Región de Tarapacá denuncia la peor crisis humanitaria de todo los tiempos.
La población regular de Colchane, en Tarapacá, es de 1.600 personas. Solo el lunes, la comuna tenía al doble transitando en las calles. Ese día, cerca de 1.600 inmigrantes ingresaron clandestinamente por el costado del paso fronterizo con Bolivia, que hoy está cerrado. Dos de ellos, de nacionalidades venezolana y colombiana, fallecieron este martes por causas que aún se investigan.
Ahora el alcalde de esa localidad, Javier García, denuncia que lo que está ocurriendo allí es la peor crisis humanitaria que han vivido. Y junto con él, parlamentarios de la zona critican la falta de coordinación entre Cancillería, el Ministerio del Interior y el gobierno regional, al mismo tiempo que exigen una respuesta concreta para enfrentar la situación en la región. Las autoridades que podrían hacerse responsables no estaban presentes. Y la ley que podría regularizar el escenario aún no ha sido promulgada.
Lo que pasa en Colchane
“Esto está produciendo un colapso en cuanto a la atención médica, también a los servicios básicos, dado que Colchane no cuenta con los servicios como alcantarillado, luz eléctrica las 24 horas, no contamos con supermercado. Cada día vemos el aumento considerable de inmigrantes que ingresan a Chile sin control alguno”, denuncia García.
La situación se ha generalizado en algunos puntos de la extrema frontera norte del país. Quienes llegan muchas veces vienen acompañados de “coyotes”, que los dejan a la deriva, y por lo tanto arriban a territorio nacional sin ninguna conexión ni asistencia posible, ahora en medio del invierno altiplánico.
Los parlamentarios de la Región de Tarapacá hablan de plazas llenas en Iquique con familias deambulando sin ningún resguardo, y residencias sanitarias y otros recintos que, según cuentan las autoridades locales, están colapsados. El alcalde de Colchane habla incluso de que hay inmigrantes que han llegado a tomarse casas de los locales. Este miércoles se conoció, además, el fallecimiento de dos personas de nacionalidad extranjera -un colombiano y otra venezolana- en condiciones que se investigan aún. La primera versión indica que habrían muerto por hipotermia cerca de Colchane, en una zona con condiciones climáticas muy adversas.
El año pasado, el Congreso despachó una nueva ley migratoria que precisamente apunta a generar un mejor control de los arribos ilegales. Ya pasaron dos meses desde aquello. Todavía no se promulga.
La normativa que no funciona
Según la legislación actual, una persona que ingresa clandestinamente y desea regularizar su situación tiene que partir por hacer una autodenuncia. De esa forma, se abre un proceso que podría terminar en la expulsión. Pero quienes se someten al procedimiento pueden permanecer en Chile.
La nueva Ley de Migraciones cambia uno de esos puntos y busca evitar el procedimiento judicial. Además, entrega una nueva facultad a las policías, que permite la reconducción inmediata a sus países de origen a quienes sean detectados y registrados como inmigrantes ilegales.
La tramitación se dilató porque un grupo de diputados de oposición llevó al Tribunal Constitucional una serie de artículos de la nueva ley y de hecho el TC declaró inconstitucionales seis de ellos. El Congreso no llegó a recibir la notificación del TC antes de empezar el receso legislativo, que termina a fines de febrero. En marzo, la normativa debería estar vigente.
Asimismo, la primera semana de enero el Presidente Sebastián Piñera amplió el Decreto 265 que permite a las Fuerzas Armadas colaborar con las policías también en el resguardo de fronteras. Recién esta semana fue la toma de razón de Contraloría, por lo que todavía la medida no estaba operativa.
Las autoridades de vacaciones
Los locales critican, además, que no ha existido suficiente coordinación entre los ministerios y el gobierno regional, y pidieron acciones concretas para los próximos días. El ministro del Interior, Rodrigo Delgado, prometió un viaje a la zona que estaba fechado para el 10 de febrero antes de que estallara la crisis. Solo este miércoles se reunió con el intendente de Tarapacá, Miguel Ángel Quezada; el gobernador de Tamarugal, Natan Olivos Núñez -que asumió este miércoles luego de que su antecesor renunciara por un viaje a Miami-, y el jefe del Departamento de Extranjería, Álvaro Bellolio.
Quezada fue el blanco de las críticas de parte del alcalde de Colchane luego de que no asistiera a la reunión del Consejo Regional por estar de vacaciones, en medio de la crisis. Hasta pidió su renuncia. Desde su entorno comentaron que solo descansó lunes y martes.
“Estamos planificando la generación de mayor relación con el alcalde para generar trabajo conjunto; adicionalmente, estamos viendo las expulsiones que deben darse por cruzar por pasos no habilitados, y otras medidas que nos permitan fortalecer el proceso de residencias transitorias, que estamos buscando otras alternativas para poder tener mayor cantidad de albergados”, explicó Quezada en Pauta Final, de Radio PAUTA, este miércoles 3 de enero.
Las soluciones
¿El ministro Andrés Allamand? De vacaciones. Y a él se dirigen varios de los dardos de los parlamentarios, que hablan de nula coordinación entre los países de América Latina para contener la ola migratoria.
“Me preocupa la lentitud con la que reaccionan algunas autoridades. Estamos viviendo etapas de una ola migratoria tremenda en el sector norte, principalmente con personas que llegan desde Venezuela por las condiciones en las que se encuentra ese país. Pero esas personas han debido cruzar varias fronteras y no existe, que uno vea, coordinación de las cancillerías para poder trabajar coordinadamente en este tema”, comenta Marcela Hernando (PR), diputada por Antofagasta.
Pero además de esa coordinación, un grupo de diputados de Chile Vamos pidió al Gobierno que habilitaran más albergues -“en las afueras de las ciudades”, dice a PAUTA el UDI Renzo Trisotti– y que pusieran a disposición aviones de la Fach para expulsar a quienes hayan ingresado ilegalmente a Tarapacá.
“Lo único que lamento es que la situación de esta migración clandestina haya tenido que ser noticia nacional para que el Gobierno de Chile haya reaccionado. Se ha anunciado visita del ministro del Interior, dicen que vendrá con el canciller y el ministro de Defensa. Se ha anunciado que van a comenzar las expulsiones. Esperamos mayor resguardo de las fronteras y que ninguno de estos ingresos clandestinos sean regularizados, sino todos expulsados. No puede haber ninguna persona que ingrese clandestinamente al país que sea regularizada”, declara a este medio la senadora y exintendenta de Tarapacá, Luz Ebensperger (UDI).
El ministro Delgado anunciaría “medidas concretas”, dicen desde su cartera, que tendrían relación con aquello. La razón por la que aún no ha viajado, de acuerdo con lo que explican en el Gobierno, es que está personalmente supervisando la campaña de vacunación, en contacto con los alcaldes y levantando las alertas de los problemas que puedan existir por comuna.