Actualidad

La lucha por la gobernación de la RM que fragmenta a la derecha

Imagen principal
Agencia Uno/PAUTA
POR Cecilia Andrea |

Para las candidaturas de gobernadores no hubo ningún pacto y hoy dos candidatos se disputan ese terreno: Catalina Parot y Rojo Edwards.

“Nosotros no vamos a construir muros, vamos a derribar muros. No queremos una región en la que sospechemos unos de otros”, dijo en su primer día de campaña la carta de Chile Vamos para la gobernación metropolitana, Catalina Parot (Evópoli). Ni lo mencionó, pero el dardo iba dirigido hacia José Manuel Rojo Edwards, o solo “Rojo” Edwards -como él prefiere que le digan-, hoy ungido por el Partido Republicano para disputar el mismo sillón.

¿La razón? Toda la última semana fue de intenso despliegue en medios de comunicación para los republicanos. El “Plan Frontera” en Vitacura, revelado en PAUTA por el aspirante a alcalde de esa comuna Cristián Araya, abrió el debate, y a eso se unió la idea de “las zanjas” en los límites con Bolivia, explicadas en televisión y diarios por José Antonio Kast y el mismo Edwards.

En los terrenos de la derecha es donde el exdiputado de RN y ahora director del instituto Ideas Republicanas podría disputarle a Parot. Sí, enfrente se alzan cuatro competidores más: Karina Oliva (Comunes), Claudio Orrego (DC), Nathalie Joignant (Ecologista Verde) y Pablo Maltés (Partido Humanista). Pero antes de dar esa lucha en las urnas, Parot y Edwards tienen que conquistar a su propio bastión.

La candidata de Chile Vamos

Dicen que son candidaturas distintas y ambos aclaran que van por el triunfo, pero en realidad hay algunas similitudes entre los dos. De partida, ninguno estaba destinado originalmente a esas candidaturas. A la militante de Evópoli se la sondeó incluso para competir por Las Condes, donde Joaquín Lavín no repostulará; y el adherente de Republicanos inicialmente buscaba gobernar la Región de La Araucanía, a la que representó como diputado durante dos periodos.

A ella la llamaron la noche anterior a la inscripción de candidaturas, y a él el partido le solicitó ser el “paraguas” de las candidaturas a concejales, alcaldes y constituyentes de la Región Metropolitana, en noviembre del año pasado.

Los dos ponen como primer eje el problema de la seguridad. E incluso uno de ellos ya asegura que apoyaría al otro si solo un representante de la derecha pasara a segunda vuelta. Después de ese punto, son todas diferencias. 

Lo principal: los respaldos. “Mi candidatura es la de Chile Vamos, la candidatura de la centroderecha es esta. Esa es la primera diferencia”, aclara Parot en conversación con PAUTA

De hecho, al lanzamiento de su candidatura en el cerro San Cristóbal estaban invitados candidatos de todas las elecciones y los preabanderados presidenciales, en una especie de cumbre presidencial que al final no fue: de cinco, llegaron dos. Adicionalmente, las directivas de los partidos de Chile Vamos escogieron a representantes que la acompañarán en su campaña. Por la UDI irá el excore Cristián Labbé, quien sonaba como candidato a la gobernación de la RM durante el año pasado; y Hugo Bugueño, presidente metropolitano de RN.

Rojo Edwards no tiene detrás una estructura similar. Pero advierte: la militancia del Partido Republicano está “muy motivada” con su candidatura.

En la cancha programática

“El nivel de entusiasmo que hay en los militantes republicanos es notable, a diferencia de lo que puede pasarle a la candidata de Chile Vamos, que no llegan, que no van a defender los votos, que los militantes no participan. Los republicanos tenemos una mística que ningún otro partido de Chile tiene”, asegura a este medio el aspirante a gobernador del partido que lidera Kast.

Dice también que esa motivación propició el trabajo de 250 profesionales del instituto Ideas Republicanas, que él dirige hoy, para elaborar un programa de gobierno para la región. Entre esas propuestas están los tres ejes que sustentan su campaña. El más relevante: la seguridad, para lo que plantea que hay que “devolverle las atribuciones a Carabineros que le han sido quitadas” y crear una nueva policía regional, “Santiago P.D.”, una mezcla entre el OS7 de Carabineros, con componentes del SII, Gendarmería, Aduana y algunas áreas de las Fuerzas Armadas, que combata principalmente el narcotráfico y el crimen organizado. 

En el equipo de Parot recuerdan que los gobernadores tienen atribuciones bien definidas y que no tienen injerencia en el control del orden público o el manejo de las policías, pues esa función corresponde al delegado presidencial. Y lo que sí puede hacer es más bien trabajar en labores de coordinación con los municipios y en la distribución equitativa de los recursos. Por eso, a juicio de su jefe de campaña, la fortaleza estará en la estructura de alcaldes y concejales que la coalición tiene en la región.

Todo el que prometa cosas como policías metropolitanas, muros, zanjas, alambrados eléctricos, debe recordar que este trabajo debe hacerse sobre la base de los planes de seguridad que existen hoy en los distintos barrios.  Tanto esta campaña como las acciones que pueda emprender la futura gobernadora tendrán que ver con la capacidad que tenga de coordinarse con los alcaldes. Y para eso… hay que tener alcaldes”, dice Luciano Cruz-Coke a PAUTA.

La respuesta de Edwards ante el inconveniente de las atribuciones: exigir mayor transferencia de competencias. Sus otros dos ejes incluyen abordar el problema del desempleo en la región -propone eliminar las cuarentenas de la Fase 1 para evitar la pérdida de trabajos- y crear una autoridad metropolitana que ordene el transporte público, áreas verdes, entre otros. Parot, en tanto, se focaliza en trabajar para disminuir las diferencias entre las comunas, “sacar al narcotráfico de los barrios”, y apoyar en la gestión de vacunación que marcará este año. 

En la búsqueda del 40%

Para evitar la segunda vuelta entre los dos más votados, cualquiera de los candidatos debe obtener al menos el 40% de las preferencias totales. En la izquierda conviven cuatro competidores, por lo que el escenario para lograrlo es mucho más complejo. Por eso Parot apuesta a ganar incluso en primera vuelta, a pesar de que desde su entorno reconocen que no es tan conocida, pero que la campaña de estos dos meses puede ayudarla. Su equipo ya encargó sondeos para medirla, cuyos resultados deberían estar la próxima semana. La exministra de Bienes Nacionales ha advertido, además, que la elección del 11 de abril será un predictor de lo que ocurra en las presidenciales de fin de año.

Rojo Edwards, en tanto, asegura que su campaña es “a ganar”, pero que respaldaría a Parot si ella pasara a segunda vuelta. Y que esperaría que ella hiciera lo mismo si fuera él quien se ganara el cupo de la derecha, de lo que prácticamente está convencido. ¿Cómo? Afirma que que el Partido Republicano sea “extremista” es una “caricatura”. 

“Queremos convencer en lo particular al centro de que nuestras ideas son las mejores y no simplemente tomar banderas de la izquierda, como lo ha hecho gran parte de la centroderecha. La diferencia es esa: estamos orgullosos de nuestras ideas y queremos demostrarle a toda la población que esas son las que sacan adelante los países, como creo que la historia lo ha demostrado en los últimos 200 años”, comenta Edwards a este medio.