Cómo sería la Cámara si la paridad hubiese existido en 2017
La Convención Constitucional tendrá regla paritaria. Si esta hubiera regido para los actuales diputados, no se habrían elegido Hugo Gutiérrez, Renato Garín ni Mario Desbordes, según un estudio de Unholster.
¿Qué hubiese pasado en las elecciones de diputados de 2017 si se hubiese aplicado la misma regla de paridad que habrá para los comicios de los integrantes de la Convención Constituyente? ¿Qué partidos hubiesen tenido de incorporar proporcionalmente más diputadas? ¿Y quiénes?
Esa serie de ejercicios de simulación tienen respuesta en un estudio elaborado por Cristóbal Huneeus, director de Data Science de Unholster, como parte de una serie de documentos de esta firma orientada al análisis de datos sobre el próximo proceso de elecciones de constituyentes y ante la conmemoración del Día Internacional de la Mujer.
Este año por primera vez habrá un proceso de elección paritaria en la historia de Chile tanto en la oferta de postulantes como en aquellos que ocupen los escaños definitivos. En la etapa de candidatos (regla de entrada), el 51,8% de las cartas aceptadas será mujeres, recuerda Huneeus. Y el 11 de abril, en la regla de salida, deberá haber igual cantidad de convencionales hombres y mujeres en distritos pares, “mientras que en los lugares donde la cantidad sea impar puede haber una diferencia de 1 entre hombres y mujeres ganadores”.
Como sintetiza el investigador, “esta regla de salida implica que el candidato menos votado del género sobrerrepresentado es reemplazado por el más votado del subrepresentado, primero por partido y después por lista, en caso de que el partido no tenga más candidatos de ese sexo”.
La simulación por listas
En este ejercicio hipotético hay al menos tres consideraciones. La primera y más relevante es que como la misma regla no existía en 2017, las decisiones de partidos y candidaturas pudo haber sido distinta. Segundo, el contexto social propicia lecturas distintas de hace cuatro años. Y tercero, se trató de comicios de otra naturaleza (legislativos).
En 2017 hubo 397 candidaturas femeninas y 563 masculinas. Es decir, por cada mujer hubo 1,4 hombres postulándose al Congreso. En este ejercicio hipotético de Unholster aquel factor es relevante, pues dada la inexistencia de la regla de paridad de entrada (oferta de candidaturas) “es posible que existan distritos donde esta regla no se pueda aplicar o solo parcialmente; por ejemplo, porque todos los candidatos de una lista fueron del mismo género. De hecho, esto sucedió en dos distritos en 2017: 15 y 21. En el primero (Rancagua y varias comunas más) se eligieron cinco diputados y el menos votado fue Raúl Soto [entonces DC, hoy independiente en la bancada PPD], pero en su lista partidaria no hubo candidata mujer. Este mismo problema sucedió con el distrito 21 (Los Ángeles y otras comunas)”, dice Huneeus.
“Teniendo este contexto, en 40 casos un candidato hombre habría sido reemplazado por una mujer, pasando de 35 representantes del género femenino a 75 en un congreso de 155 diputados”, agrega.
El resultado de estas simulaciones indica que la composición actual no cambiaría de la misma manera entre todas las fuerzas políticas presentes en la Cámara. De partida, el Frente Amplio hubiese sido el bloque más intervenido por la regla de la paridad, pues el 45% de sus diputados declarados hubiesen sido reemplazados por mujeres. En ese entonces, el Frente Amplio estaba integrado por partidos como Revolución Democrática, Humanista, Igualdad, Ecologista Verde, Poder y Liberal.
Después del Frente Amplio, la lista Convergencia Democrática (DC, MAS e Izquierda Ciudadana) hubiese tenido una corrección paritaria aplicada al 35% de sus diputados elegidos.
Esa regla se hubiese concretado en menor medida tanto al entonces bloque Fuerza de la Mayoría (PS, PPD, PR y PC) como a Chile Vamos (UDI, RN, Evópoli y PRI). En la primera, la regla se hubiese ejecutado en uno de cada cinco casos, y en el actual oficialismo en uno de cada cuatro.
En dos listas -que terminaron eligiendo menos diputados- no hubiese sido necesario un cambio, pues fueron paritarias en forma natural: Por Todo Chile (PRO y PAIS) y la Coalición Regionalista Verde (Federación Regionalista Verde Social -FRVS- y Democracia Regional Patagónica).
Los cambios hipotéticos en los partidos
En cuanto a partidos específicos, pudo haber habido modificaciones drásticas.
El único diputado por el Partido Ecologista Verde, Félix González, hubiese tenido que ser reemplazado por una mujer (Elizabeth Mujica, también del PEV). En el Partido Humanista no hubiesen asumido tres de los cinco diputados que eligió, en el Partido Liberal uno de sus dos representantes debiese haber sido mujer, y en RD la corrección debió haberse realizado con el 40% de sus representantes a la Cámara.
En este ejercicio hipotético, Cristóbal Huneeus aplicó la regla del modo más ajustado posible a cómo se hará para la Convención Constitucional.
“Dado que no hubo paridad en la entrada, la aplicación a la salida habría generado más cambios, porque al no contar con mujeres en sus partidos se suplanta por la candidata más votada en la lista. De los 40 casos donde se podría haber hecho hipotéticamente este cambio, en 13 casos se habría producido un cambio de partido. Este hecho es menos probable que suceda en la constituyente del próximo 11 de abril, porque hubo paridad a la entrada y en muchos casos a nivel de partido“, explica el especialista.
En general, las candidatas que habrían entrado a la Cámara por efecto de la paridad hubiesen sido 4,4 años menores que los diputados que sí llegaron. En la lista de la Fuerza de la Mayoría hubiesen sido 6,4 años menores; en el Frente Amplio, tres años.
¿Quiénes hubiesen quedado fuera?
En los siguientes distritos la regla paritaria no habría alterado el resultado de la elección: 3 (Antofagasta y otras), 4 (Copiapó y otras), 9 (Conchalí y otras), 12 (La Florida y otras), 16 (San Fernando y otras), 27 (Coyhaique y otras) y 28 (Punta Arenas y otras).
En todo el resto sí pudo haber cambios.
En este estudio, Cristóbal Huneeus detecta algunos de los nombres (siempre hombres) que hubiesen quedado fuera del Congreso y quiénes (siempre mujeres) sí hubiesen entrado en su lugar, debido al efecto de la paridad de salida.
“Por ejemplo, en el 14 [San Bernardo y otras], donde se eligieron seis diputados, Renato Garín, que fue por Revolución Democrática, habría sido reemplazado por Alena Gutiérrez, del Partido Humanista; y Leonardo Soto, socialista, por Yovanna Fuentes, del mismo partido”, cuenta Huneeus.
En el distrito 8 (Maipú y otras), el actual candidato presidencial de RN y el PRI Mario Desbordes (RN) “habría sido reemplazado por Andrea Ojeda, de su misma coalición, y Patricio Melero de la UDI, por Pía Bahamondes“.
Si se hubiese aplicado la regla de la paridad, dos diputados que ingresaron como parte del Partido Humanista como Tomás Hirsch y Florcita Alarcón hubiesen sido reemplazados por Soledad Álamos y Nataly Rojas -ambas presentadas por RD-, respectivamente.
En vez del comunista Hugo Gutiérrez, hubiese ingresado la socialista Danisa Astudillo; en lugar del RD Gonzalo Winter, Rosario Olivares (PEV); y en vez de Diego Schalper (RN), Pamela Medina (RN), por citar otros ejemplos.
El financiamiento
El estudio detecta que el financiamiento electoral para quienes sí fueron elegidos fue, en promedio, $27,4 millones superior a las candidatas que hubiesen sido electas en caso de una regla paritaria en las elecciones de 2017.
La mayor diferencia entre diputado electo y diputada que-pudo-ser estuvo en Convergencia Democrática, con $38,4 millones, y la menor se reflejó en el Frente Amplio, con $16,2 millones.
Aunque todo este conjunto de datos y revisiones hipotéticas son interesantes, Cristóbal Huneeus advierte que el escenario este año “será bien diferente, porque ahora existe esta exigencia a la entrada. Es decir, hay una menor proporción de candidatos de género masculino en la próxima elección de 2021 que en la de 2017, por lo tanto es más probable que una mujer sea elegida sin recurrir a la paridad a la salida”.
En el ejercicio para 2017, además, en ningún caso la regla determinó que un hombre ocupara el puesto de una mujer. ¿Podría sí suceder aquello en los comicios constituyentes? “Es posible que suceda sobre todo en distritos donde hay candidatas con posibilidades de sacar muchos votos, como es por ejemplo, el caso del distrito 12 (La Florida, La Pintana, Pirque, Puente Alto y San José de Maipo)”, opina Huneeus.
Revise además una conversación entre Unholster y PAUTA sobre la paridad en la elección de constituyentes en abril