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“Impuestos a los superricos” y tercer retiro del 10%: cómo se desataron dos derrotas del Gobierno

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La debatida sesión en la Comisión de Constitución de la Cámara de Diputados. Créditos: Agencia Uno
POR Gladys Pierola |

La Comisión de Constitución de la Cámara aprobó en general los polémicos proyectos. Hubo descolgados oficialistas.

Una jornada intensa tuvo el Gobierno en el Congreso. Este Jueves Santo se votó en la Comisión de Constitución de la Cámara y se aprobaron en general dos polémicos proyectos: el que propone un impuesto a los altos patrimonios, conocido como “impuesto a los superricos”, y la propuesta que busca habilitar el tercer retiro del 10% desde los fondos previsionales. 

En ambas propuestas hubo debates acalorados e incluso gritos. Y las dos terminaron su primera votación igual: aprobadas y con el Ejecutivo anunciando reserva de constitucionalidad. Es decir, si avanzan su tramitación, terminarán en el Tribunal Constitucional por infringir, a juicio de La Moneda, atribuciones que son exclusivas del Presidente.

“Hemos planteado las reservas de constitucionalidad respecto de todas y cada una de las mociones que fueron aprobadas en general. Hemos pedido que se deje constancia de las mismas para obviamente ejercer las acciones que la Constitución, y con el debido respeto por las instituciones, entrega al Poder Ejecutivo y, en particular, al Presidente de la República”, señaló el ministro de la Segpres, Juan José Ossa.

Ahora ambos proyectos deben ser votados en particular.

Superricos: Jiles versus Pavez

El proyecto busca instalar un nuevo impuesto del 2,5% al patrimonio de las grandes fortunas personales -que tengan más de 22 millones de dólares- para destinarlo al financiamiento de una renta básica de emergencia y pasó la primera prueba con 7 votos a favor, 4 en contra y 1 abstención. 

Apenas terminó la votación, el subsecretario de la Segpres, Máximo Pavez, anunció la reserva de constitucionalidad del Gobierno argumentando, entre otras cosas, que “nunca ha visto la historia constitucional de Chile que se cree un impuesto”, a través de este tipo de herramientas. Sin embargo, fue interrumpido por la diputada Pamela Jiles (PH), quien lo acusó de estar hablando “ilegalmente”, pues según el reglamento de la Cámara los subsecretarios pueden ingresar a la Sala solo si está presente el ministro del ramo respectivo. Es una norma que varios aplican también a las comisiones y, en este caso, Ossa no estaba porque a la misma hora participaba de la Comisión de Constitución del Senado. 

“Si el Gobierno se quiere ir en la dura por lo menos que venga a dar la cara el ministro Ossa, a decirle él con su cara a todo el país y no mandar a un ‘segundón’. Me opongo y pido mi derecho, que se calle Máximo Pavez y deje de hablar, porque no tiene derecho a hacerlo; yo no lo habilito”, dijo Jiles. 

Sus palabras causaron revuelo inmediato. El propio Pavez respondió. Lamentó las palabras de la diputada y las calificó como un “intento de censura”, lo que elevó aún más la molestia de Jiles que comenzó a gritar “¡reglamento, reglamento!” al presidente de la instancia, el diputado Marco Ilabaca (PS). 

“Le pido que le diga al subsecretario Pavez que está hablando ilegalmente en esta comisión, que retire sus palabras respecto de que yo estaría haciendo una censura. Eso es un insulto hacia un diputado, no lo voy a permitir. Es una insolencia de un subsecretario que está aquí mientras el ministro se esconde no sé dónde”, cerró Jiles. 

El subsecretario respondió de vuelta, repasó sus años como asesor legislativo de la UDI y sus pasos por el Congreso. Pero luego, a petición de Ilabaca, finalmente se retiró. 

Ahí, comenzó el reclamo de Chile Vamos y también de algunos parlamentarios de oposición por el trato que recibió Pavez. Incluso, desde el oficialismo en más de una oportunidad amenzaron a Ilabaca de que si no ponía orden en la comisión levantarían una petición de censura contra su presidencia.

Tercer retiro: la presión de Desbordes y los descolgados

A las 9:30 horas, el candidato presidencial de RN y PRI, Mario Desbordes, publicó en Twitter un hilo con varias peticiones para el Gobierno. Sin embargo, la que más llamó la atención es que le pidió formalmente a La Moneda apoyar el tercer retiro del 10%, buscar alguna fórmula para hacerlo viable y ver algún tipo de herramienta para que se puedan recuperar los dineros girados. Esto, además, iba con una petición especial: que no llevara la propuesta al TC. Algo que claramente no fue escuchado. 

Su mensaje no era casual, porque en la tarde estaba programada la votación del polémico proyecto en la Comisión de Constitución de la Cámara. Desbordes sabía de antemano que su emplazamiento público traería algunas críticas, pero ya había presionado por un bono más universal de $500 mil pesos, y también había abogado por otras salidas como la propuesta de Joaquín Lavín, con quien hizo una alianza táctica.

Pero Desbordes, según comentan en su comando, también quería tomar una posición de liderazgo tal cual como lo hizo en el primer retiro. La idea también era reflejar la molestia interna de un sector de Chile Vamos que aún no está conforme con las ayudas económicas del Gobierno. De hecho, en cálculos del oficialismo ya hay al menos 20 diputados de RN y la UDI que se podrían contar como “descolgados”. Y una muestra de eso se vio en la votación de este jueves, que incluso sorprendió a La Moneda.

De los 10 votos que la moción tuvo a favor, tres fueron diputados oficialistas: Eduardo Durán (RN), Camilo Morán (RN) y Juan Antonio Coloma Álamos (UDI). La decisión de Coloma Álamos fue la que más llamó la atención. En el Gobierno la leyeron como una muestra del enfado que generó la resolución del Ejecutivo de endurecer las nuevas normas sanitarias. Varias de esas restricciones, en especial las que modifican las calificaciones de actividades esenciales, afectaron, a ojos de la UDI, directamente a las pymes.

Por ejemplo, un poco antes de la votación, la directiva de Javier Macaya sacó una dura declaración calificando la serie de nuevas prohibiciones del Gobierno “como inaceptable, inentendible y contraria a toda lógica de quienes creemos firmemente en la fuerza del emprendimiento como motor de nuestra sociedad”.

Bonus: los ánimos estaban tan revueltos que el diputado Jorge Durán renunció a la bancada de RN. Aludió como razón el que no lo dejaran suceder en la Comisión de Constitución a la diputada Camila Flores, pese a que ella habría recomendado su nombre. La jefatura de bancada RN lo habría impedido. Jorge Durán reclamo, además, porque es uno de los autores de las seis mociones que apuntan al tercer retiro desde los fondos previsionales. En su reemplazo votó el otro Durán, Eduardo, que en todo caso también aprobó.

Revise el detalle de estos dos debates en la conversación en Pauta Final