Una tarde de rebeliones y principios de acuerdo por el tercer retiro del 10%
El Senado aprobó la iniciativa con siete respaldos oficialistas, más que la última vez. El oficialismo comenzó a hablar de un acuerdo para enfrentar el malestar.
Un acuerdo. Esas fueron las palabras que empezaron a resonar entre los parlamentarios del oficialismo y de la oposición, ante el escenario que exhibió una vez más la votación de otro retiro de fondos desde las AFP. La de este jueves fue la peor derrota a la que el Ejecutivo se enfrentó en cuanto a esta temática: 31 votos a favor recibió la iniciativa, con el respaldo de siete senadores de Chile Vamos, dos más que en el primer retiro legislado.
Los ministros ya estaban entregados al hecho de que no se podría revertir esa votación y no estuvieron presentes durante la mayor parte de la sesión. Pero más de una hora después de terminada, el movimiento continuaba por los pasillos del Senado.
De nuevo un retiro de fondos tuvo el respaldo masivo de los parlamentarios, pero el escenario fue distinto al del primero y el segundo, pues esta vez no hay ninguna moneda de cambio y en el oficialismo apuestan a que el fallo del Tribunal Constitucional esta vez pueda ser más contundente.
Ante eso, sumando las aprensiones por el “malestar social” que mostraron varios personeros políticos y un calendario electoral cargado que en mayo tendrá sus primeras fechas, el Ejecutivo dio señales. Afirmó que “escuchamos a los parlamentarios” y que este viernes continuarían las gestiones para llegar a alguna solución.
Una tarde de reuniones y pedidos
“Esto se nos puede ir de las manos”, sentenció un parlamentario oficialista al salir de la reunión con los ministros de Hacienda y Segpres, Rodrigo Cerda y Juan Jossé Ossa, respectivamente.
Todo el escenario del tercer retiro complicó al Comité Político días previos a la votación. Hasta una carta tuvieron que enviar a La Tercera para desmentir versiones que los señalaban como conflictuados con la decisión de recurrir al TC. Incluso la diputada Pamela Jiles apareció en la película: denunció que uno de sus ministros le había confirmado el lunes pasado que no concurrirían al TC, y luego cambiaron de postura, entre amenazas de despidos y fuertes tensiones.
En medio de este ánimo en el Senado, los titulares de Hacienda y Segpres continuaron durante la tarde reuniéndose con diputados y senadores, tanto del oficialismo como de la oposición, entre ellos los RN Leopoldo Pérez y Diego Schalper. Incluso el senador PPD Guido Girardi y el presidente del PS Álvaro Elizalde se pasearon por el cuarto piso de la Corporación pasadas las 18 horas.
Antes de eso y luego de terminada la votación, la presidenta del Senado Yasna Provoste se dirigió al mismo Presidente Sebastián Piñera. “Le pido humildemente que retire su presentación al TC, que no extienda este debate jurídico sobre las competencias entre el Congreso y el Ejecutivo. Y que nos permita a partir de mañana hacer un reinicio de un camino de encuentro político, que vaya en beneficio de los chilenos y chilenas que están sufriendo”, solicitó.
Ossa, de camino a una de esas reuniones, dijo que “hemos escuchado el llamado que han hecho distintos personeros, desde luego la presidenta del Senado y esperamos durante el día de mañana conversar, juntarnos y ver si se puede avanzar”.
Este viernes el titular de la Segpres, Provoste y el vicepresidente del Senado, Jorge Pizarro, sostendrán una reunión habitual, pero donde el mismo Ossa aseguró que se tratará este mismo tema.
Los caminos al acuerdo
¿Y qué solución hay? En la palestra hay múltiples caminos. Uno es el que solicita Renovación Nacional, cuya directiva emplazó este mismo jueves al Gobierno a retirar el requerimiento y presentar un proyecto de retiro patrocinado por el Ejecutivo. Esa alternativa es bien compleja para los ministros, según lo transmiten desde la Segpres, donde descartan que aquello sea una posibilidad concreta.
Incluso, en Evópoli aseguran que la fórmula sería una derrota política muy profunda para el Gobierno y que lo que habría que hacer es ahondar en las ayudas sociales y comunicarlas de mejor forma.
Pero hay otras vías: Provoste propone una reforma tributaria para ahondar en las ayudas sociales y el senador José García Ruminot habló en CNN de transaccionar el retiro con la reforma previsional. En Chile Vamos, no obstante, hay dos preocupaciones al respecto: el cómo incorporar a la diputada Pamela Jiles, de tal forma que no existan más proyectos de retiro; y con qué interlocutor hacer las gestiones, según transmitían dos diputados del bloque.
Otra alternativa que se explora, según transmitió un parlamentario que participó en esas reuniones con Ossa y Cerda, es que el Ejecutivo modifique el requerimiento ante el TC, retirando solo una parte de la argumentación.
“Con el senador Girardi conversamos muy frecuentemente y obviamente estábamos compartiendo las distintas interpretaciones de los momentos, de cómo ir superándolos y de cómo todos juntos podemos ayudar para ayudar a Chile”, sinceró Ossa después de su encuentro con el senador del PPD.
Mientras transcurrían esas citas, los presidentes de Chile Vamos llegaban a La Moneda para encontrarse con el Mandatario.
Los movimientos de la oposición
Para evitar que el TC dé la razón nuevamente al Ejecutivo y con la preocupación sobre el “malestar social” que han puesto sobre la mesa varios personeros, la oposición ha preparado un requerimiento de inhabilidad para la presidenta del TC, María Luisa Brahm, quien falló a favor del Ejecutivo con su voto dirimente en el último requerimiento.
Lo impulsó el senador Carlos Bianchi y lo firmaron representantes de toda la oposición, como los PPD Jaime Quintana, Jorge Soria, Adriana Muñoz, Guido Girardi, Ximena Órdenes y Loreto Carvajal; los PS Isabel Allende y Álvaro Elizalde, el senador del PRO Alejandro Navarro; Alejandro Guillier (IND); y Juan Ignacio Latorre (RD).
Además, el PPD ingresó un requerimiento ante el TC para que se deje sin efecto la impugnación presidencial al tercer retiro, trabajo que encabezó el abogado José Antonio Ramírez.
El futuro de la iniciativa
José Miguel Durana, Juan Luis Castro, Manuel José Ossandón, Iván Moreira, David Sandoval y dos más: Marcela Sabat y Francisco Chahuán. Esos fueron los siete senadores del oficialismo que respaldaron el proyecto de tercer retiro del 10% en las mismas condiciones en que salió de la Comisión de Constitución, alegando que el Gobierno no había sido capaz de ofrecer algo y los había dejado de alguna forma solos.
Este texto plantea los mismos montos que el primer y segundo retiro y el plazo de 10 días hábiles para la entrega de los recursos, además de un plazo de hasta un año para efectuarlo.
Pero tiene algunas diferencias. Entre ellas, consagra que los fondos retirados no constituyan renta, o sea, no tributen; e incluye un adelanto del 10% de la reserva técnica de las rentas vitalicias para quienes estén pensionados con ese sistema, dineros que deberán pagarse hasta 30 días después de la solicitud.
Aquel es el punto que creen desde el oficialismo que podría hundir el proyecto ante el Tribunal Constitucional.