Las varas con que se medirá el Frente Amplio en la megaelección

El resultado en 10 comunas estratégicas, la votación de su candidata metropolitana y el avance de las firmas para Gabriel Boric serán sus principales pruebas.

Flanqueada por diputados del Frente Amplio y el Partido Comunista estuvo la candidata a gobernadora metropolitana, Karina Oliva (Comunes), este martes 11 de mayo en las cercanías del metro Tobalaba. En los 100 metros finales para la megaelección de este sábado 15 y domingo 16, todo el apoyo vale. Por eso, los protagonistas de la jornada fueron las fotografías, los videos para redes sociales y una frase repetida por todos los asistentes: “Doy la cara por Karina Oliva”, en alusión al slogan utilizado por la aspirante a gobernadora regional.

“Yo era la menos conocida y el crecimiento que hemos tenido es abismante y eso nos tiene muy tranquilos. Esperamos tener buenos resultados en una elección que en sí tiene mucha incertidumbre. No hay ninguna encuesta que pueda resolver hoy o predecir el escenario completo”, dice a este medio Oliva.

Estos gestos con los rostros más conocidos del Frente Amplio y también el PC se repetirán en las pocas horas que quedan de terreno y, en especial, en el cierre de campaña, porque, aunque en el equipo de Oliva y en el propio FA aseguran que la meta ideal es pasar a segunda vuelta con el que hasta ahora parece ser el candidato más fuerte -la carta de Unidad Constituyente, Claudio Orrego (DC)-, hay una preocupación que no se oculta: el efecto (y daño electoral) que podría provocar el candidato del Partido Humanista y pareja de Pamela Jiles, Pablo Maltés.

De hecho, consultada por las diferencias con Maltés, Oliva respondió -acompañada por el excorreligionario de Jiles y exlíder del PH, Tomás Hirsh-, que no solo sus orígenes eran muy distintos. “También construimos colectivamente, no solo por un proyecto individual, sino un proyecto colectivo”, dijo. Esto último que suele ser un punto de crítica constante del FA a Jiles.  

Si bien hay cuatro regiones donde el Frente Amplio compite con carta propia para las gobernaciones regionales, el desempeño en la Región Metropolitana es clave para el bloque. Una derrota muy profunda, como salir, por ejemplo, detrás de Maltés en un cuarto lugar sería fatal, confiesan algunos de los dirigentes en privado. Y la razón, comentan las mismas fuentes, es que según los números internos que manejan, Oliva, Maltés y la candidata de Chile Vamos, Catalina Parot, estarían bastante parejos, por lo que el resultado dependerá del número de votantes que cada pacto pueda movilizar el fin de semana. “Si saliéramos cuartos en la RM quedaríamos en una muy mala posición”, resume otro dirigente frenteamplista.

Las fichas puestas en la municipal 

“En esta pasada nos jugamos la territorialización del bloque, que se expresará en decenas de concejalías y nuevas alcaldías en varias comunas de Chile”, señala a este medio el secretario general de RD, Leonardo Rissetti. 

Y es que otro de los factores que estará a la vista en la discusión del día después de la megaelección es el desempeño municipal del bloque. “Vamos a pasar de una presencia muy marginal a una más importante. Y eso es muy importante para nosotros, porque es un punto de inflexión en la implementación y presencia territorial”, señala el diputado y precandidato presidencial del Movimiento Unir, Marcelo Díaz. 

El Frente Amplio tiene una representación de concejales y alcaldes casi inexistentes, por lo que aseguran que todo resultado “será ganancia”. Aunque, claro, hay algunas comunas que por el número de habitantes o por ser “emblemática” se convierten en bastiones electorales apetecidos. 

“Vamos a tener una representación importante en el territorio. A diferencia del 2017 con las candidaturas a diputados, donde no hubo una representación que sostuviera los territorios como los concejales. Esto va a cambiar de manera muy importante y es lo que estamos apostando en 10 municipios donde creemos que podemos dar sorpresas”, comenta a PAUTA el diputado de RD, Giorgio Jackson.

De esas decena de comunas, RD tienen los recursos y las fichas puestas en la mitad: Tomás Vodanovic en Maipú: Emilia Ríos en Ñuñoa; Macarena Ripamonti en Viña del Mar; Carla Amtmann en Valdivia, y Miguel Concha en Peñalolén. Y aunque en el partido que dirige Catalina Pérez aseguran que aquí no está en juego la “hegemonía” de RD en el bloque después de varias polémicas internas, lograr buenos resultados (incluso si se pierde por poco) en al menos la mitad de estos sillones municipales son esenciales para la configuración de poder interna. Un balance que quedó desfigurado tras los últimos quiebres internos, las renuncias y las primarias de gobernadores.

“Lo importante es que, más allá de estar muy de moda o no en un determinado momento, el FA necesita echar raíces y asentarse en la política chilena. Desde ese punto de vista la política municipal es sumamente importante. Para que deje de ser testimonial, deje de ser una idea y pase a ser un conglomerado que tiene raíces y patas”, asegura el diputado de CS, Gonzalo Winter. 

Las firmas de Boric y la espera del PC

“Creemos que vamos a llegar”. Es la frase que repiten los distintos dirigentes al consultarles cómo van las firmas para inscribir al diputado CS, Gabriel Boric, en las primarias presidenciales. El diputado por Magallanes cuenta con el respaldo de CS, RD y Fuerza Común. Mientas el partido Comunes postergó su decisión precisamente para el día después de los comicios. 

Los resultados del 15 y 16 y el ánimo del lunes 17 estarán cruzados por este desafío electoral, que si bien el último fin de semana tuvo un apoyo mucho más masivo que en los primeros días, aún sigue cuesta arriba. Queda una semana para que se cumpla el plazo y hasta este martes 11 aún faltaban un poco más de 15 mil rúbricas. “Estamos trabajando a todo pulmón para juntar las firmas que nos faltan, no tenemos espacio para equivocarnos”, agrega Rissetti. Para hacerse una idea: para lograr la meta antes del 19 de mayo a las 23:59 horas necesita reunir más de mil firmas diarias. 

“La elección municipal es fundamental, pero al mismo tiempo tenemos que estar en la papeleta presidencial, sino sería un retroceso inaceptable”, señala el diputado Winter, quien asegura que sí podrán participar de la primaria legal, “porque las firmas van a estar”.

Ahora la duda es en qué primaria. “El FA tendrá su candidatura presidencial sí o sí y esto está completamente resuelto. Aspiramos a una primaria amplia de la oposición, pero vimos al PPD en complicidad con la DC, que están por sepultar esa opción”, añade Díaz. 

Hasta el momento medirse con el abanderado del PC, Daniel Jadue y con Marcelo Díaz parece la opción más viable. Además, Jadue necesita al Frente Amplio para validarse en un proceso ciudadano amplio, pero también para abrir su base de apoyo. Y en las filas comunistas lo reconocen. “A nosotros nos conviene que Boric junte las firmas”, señala un importante personero del PC.

De hecho, en caso de no cumplir la meta, la duda es si hay espacio para una salida administrativa o apostar por una consulta ciudadana convencional antes del 18 de agosto. En el PC no cierran la puerta, pero en el FA miran con más distancia esta opción. “No creo que haya espacio para eso, porque el camino es la primaria legal. Sería extraño tener una primaria convencional, pero finalmente es el FA, como coalición, la que debe resolver su itinerario presidencial”, agrega Díaz. 

Además, esta decisión va de la mano de otro efecto: las conversaciones parlamentarias. Antes de medirse Jadue y el FA, el resultado de la alianza electoral “Apruebo Dignidad” para la Convención Constituyente marcará el termómetro de esta relación. 

“Creemos que vamos a tener un muy buen resultado con Apruebo Dignidad, porque buscamos cambios profundos tal como la ciudadanía está demandando. Vamos a ser una fuerza importante en la Convención, con posibilidades de proyección como alianza parlamentaria”, detalla el secretario general de RD.