El reemplazo de Brahm: Romero y Fernández surgen como candidatos a presidir el TC

El lunes 9 de agosto, el Tribunal Constitucional elegirá al nuevo presidente del organismo y ya se barajan los primeros dos nombres.

El Tribunal Constitucional (TC) fijó para el próximo 9 de agosto la elección para reemplazar en la presidencia a María Luisa Brahm tras dos años de una controvertida gestión que derivó en una crisis institucional. Y entre los ministros ya se iniciaron las conversaciones sobre los posibles candidatos que podrían suceder a la abogada, dos corren con ventaja: Miguel Ángel Fernández y Juan José Romero.

Uno de los factores que cruza esta elección es que, quien suceda a Brahm, tendrá la potestad de tener el voto dirimente. Y en medio de la tensión interna que se vive en la institución, no es un dato menor. Además, esta facultad está en la mira de la Convención Constitucional (CC) como uno de los cambios que se pretenden hacer a TC.

Si bien Romero y Fernández son parte los ministros de centroderecha del TC, durante 2020 y 2021 han tenido posturas diferentes frente a la crisis que vivió el organismo: mientras Fernández siempre apoyó la gestión de Brahm, quien fue jefa de asesores en el primer gobierno del Presidente Sebastián Piñera, Romero no lo hizo.

A su vez, el nombre de Fernández ya había sonado como posible candidato en la elección pasada, sin embargo, para entonces llevaba muy poco tiempo como ministro del TC: poco más de un año. Romero, en tanto, fue el candidato que se enfrentó a Brahm, pero obtuvo tres votos: de Iván Aróstica, José Ignacio Vásquez y el suyo.

María Luisa Brahm, en cambio, en agosto de 2019 obtuvo seis votos, incluido el de ella misma. Mientras que Gonzalo García sacó una preferencia: a su favor votó el ahora exjuez Domingo Hernández.

¿Pesará la antigüedad?

Tal como en la Corte Suprema, en el TC suele primar la antigüedad en la elección de la presidencia. Sin embargo, esta tradición se ha saltado en dos ocasiones: cuando fue electa la ministra Marisol Peña y luego con María Luisa Brahm.

Así, si en esta próxima elección del 9 de agosto prima la antigüedad, es Romero quien lleva más años en el TC. Pero, de ser electo, sería la primera vez que un presidente ejerza solo por siete meses, pues el 18 de marzo de 2022 debe retirarse del Tribunal Constitucional por cumplir los nueve años, el periodo de un juez en el TC.

En los cálculos internos, Romero cuenta con tres votos seguros, los mismos que obtuvo en 2019: el suyo, el de Aróstica y de Vásquez.

En el caso de Fernández, en cambio, tiene por delante seis años como ministro del TC. Y podría contar con algunos de los votos que apoyaron a Brahm. Entre ellos el de la actual presidenta y el de Cristián Letelier.

Actualmente, el orden de antigüedad en el TC es Letelier, Nelson Pozo y Vásquez, quienes dejan sus cargos en 2024; mientras María Pía Silva y Fernández terminan en 2027.

El último ministro nombrado en el TC fue Rodrigo Pica, en un cupo de elección de la Corte Suprema por concurso público, el pasado 29 de junio. En su caso se renovó en el cargo, pues llevaba un año y medio como juez luego de que reemplazara a Domingo Hernández, quien se retiró anticipadamente. El nombre de Pica también se barajó hace algunas semanas entre los presidenciables para reemplazar a Brahm, pero hoy corre con menos fuerza. 

El complejo contexto de la elección

Esta elección de la presidencia tiene un contexto diferente a las anteriores. Primero, se da tras dos años en que el TC vivió un crisis que derivó, incluso, en un sumario por acoso y maltrato laboral a Brahm que indagó el ministro Pica Y, segundo, quien sea electo lo hará en momentos en que gran parte de la Convención Constitucional (CC) está a favor de realizar, al menos, un par de cambios profundos al Tribunal Constitucional. 

Entre las modificaciones que han adelantado los convencionales está el eliminar el voto dirimente con que cuentan los presidentes del TC y modificar el sistema de nombramiento de sus diez miembros: hoy tres cupos son designados por la Presidencia de la República; dos por el Senado, dos por la Cámara de Diputados y tres por la Corte Suprema.

Romero, por ejemplo, fue designado por el Senado a propuesta de la Cámara de Diputados. Esto, mientras Brahm y Fernández, por el Presidente Piñera en su primer y segundo período, respectivamente.

Pero hay un tercer factor que cruza esta elección: en marzo de 2022 no solo Romero dejará en el TC. También cumplen sus nueve años en el cargo Brahm, Aróstica y Gonzalo García. 

Se trata de cuatro cupos que deberán ser nombrados por el próximo Presidente o Presidenta de la República -los reemplazos de Brahm y Aróstica- y por el nuevo Congreso, en el caso de Romero y García.