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Sanitarias y crisis hídrica: “No hay conciencia en la población que tenemos un problema”

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Agencia Uno
POR Alejandra Becerra |

Jessica López, presidenta de la asociación del sector, afirma que está garantizado el suministro para el verano, pero que se debe avanzar en mejor institucionalidad y reúso de aguas tratadas.

Chile vive la peor sequía de su historia debido a una escasez hídrica que se ya se extiende por más de 12 años. El ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno, señaló en Radio PAUTA que “hay que tomar medidas porque las fuentes de agua que teníamos tradicionalmente no van a volver. Tenemos que cuidar más el agua, almacenarla, reúsarla”.

En medio del actual escenario de escasez del recurso, en entrevista con Pauta Final, de Radio PAUTA, la presidenta ejecutiva de la Asociación Nacional de Empresas de Servicios Sanitarios (Andess), Jessica López, explicó que en una escala de 1 a 10, (donde 10 es lo más grave), la situación del suministro de agua es 7, toda vez que falta mucho avanzar en áreas que tienen que ver con la institucionalidad, así como ver formas de cómo se reúsan las aguas tratadas. Esto, porque a diferencia de los sectores rurales, en las ciudades todo el riego se hace con agua potable.

“Lo que pasa es que yo le pongo 7 porque tenemos mucho que hacer, tenemos que mejorar mucho la institucionalidad nacional y territorial; tenemos que avanzar mucho por ejemplo en el tema de cómo reúsamos las aguas que hoy día tratamos en la industria sanitaria. La industria sanitaria trata las aguas y las dispone en cauces en ciertos ríos, y eso significa que se usan, como se usan los caudales de los ríos, agricultores y otros usos. Sin embargo en las ciudades estamos regando parques, jardines, campos de golf, canchas de fútbol con agua potable”, aseguró.

López afirmó que al menos en la Región Metropolitana hay suministro suficiente para cubrir la temporada primavera-verano.

La ejecutiva explicó que todas las aguas servidas son tratadas por la industria, lo que ha significado una gran inversión que no ha llevado a un aumento sustantivo en las cuentas del agua.

También aseveró que en Chile el litro de agua, en promedio, cuesta un peso. “Entonces cuando tú vayas a comprar, cuando vayas la próxima vez  al supermercado a comprar tu botella de agua mineral, tienes que decir cuánto me cuesta llenar esta botella en la llave de la casa. Un peso. Entonces se hicieron inversiones muy cuantiosas y las tarifas son súper razonables”, explicó.

López indicó que “las Naciones Unidas dicen que cuando la cuenta del agua supera el 3% de los ingresos familiares, ahí entonces tenemos un problema de derecho humano del agua, hay que ponerle subsidio o algo. Bueno, en Chile en promedio es del 1,6% el cargo de la cuenta del agua potable en los ingresos. Entonces digo para el futuro, tenemos que hacer inversiones, muchas, nosotros estimamos unos 10 mil millones de dólares de aquí al 2040”. Asimismo, considera que puede haber un ajuste de las tarifas. “Probablemente van a subir, tenemos que ir viendo en qué gradualidad, cómo queremos hacer las inversiones, pero así funciona el sistema”, dijo.

 

La presidenta de Andess, que agrupa a 22 empresas sanitarias en todo Chile, cree que no existe conciencia en la población de la crisis hídrica por la que atraviesa el país, porque no ha habido una restricción de este elemento vital.

“Como los servicios sanitarios se han mantenido inalterados entonces no hay conciencia en la población que tenemos un problema”, sostuvo.

Consultada por el proyecto que impide el corte del suministro de los servicios básicos en medio de la pandemia, López sostuvo que hay que analizar formas de ponerle solución a esto, toda vez que actualmente las deudas por concepto de no pago del suministro ascienden a los 200 millones de dólares.

“Esta es una ley que cuando se hizo, se hizo porque pensábamos que la pandemia iba a durar como tres meses, o seis meses, pero el mecanismo ya quedó out porque hay mucha gente, a nosotros nos preocupan alrededor de 420 mil clientes, que tiene más de cuatro cuotas impagas porque hay mucha gente que paga una, dos, se atrasa, o se pone al día, pero la gente con más de cuatro cuotas impagas nosotros encontramos que eso es una deuda dura y ahí tenemos a 420 mil familias. Esa es una deuda que en el caso de las sanitarias alcanza alrededor de 200 millones de dólares y el punto es que esto no termina, entonces en algún minuto esto va a tener que terminar y vamos a decir, ya, ahora qué hacemos con la deuda”, finalizó.