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Sichel cava una zanja que lo distancie de Kast

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Agencia Uno
POR Gladys Pierola |

En medio de los descuelgues oficialistas, el candidato oficial de Chile Podemos Más marcó las líneas rojas con el abanderado del Partido Republicano y pidió a los partidos que dejen en libertad de acción a sus militantes.

Trece minutos. Eso duró el descargo público que realizó Sebastián Sichel este martes en la noche. En su comando y rodeado de sus colaboradores más estrechos, el candidato presidencial de Chile Podemos Más hizo un punto de inflexión en su campaña y en una puesta en escena que pareció una cadena nacional marcó las “líneas rojas”, según califican sus cercanos, en la relación con los partidos oficialistas y con su contendor directo en la ala derecha, la carta del Partido Republicano, José Antonio Kast. 

El contexto resultó insoportable para el exministro de Desarrollo Social: este mismo martes se profundizaron los descuelgues de parlamentarios de la UDI desde Sichel a un respaldo a Kast. El comando del postulante independiente ya había afrontado críticas diarias desde las tiendas, que cuestionaban sus errores en materias como su participación pasada como lobbista, el financiamiento de una campaña a diputado en 2009 y su silencio inicial sobre su retiro previsional. En los últimos días, distintas voces de la derecha habían pedido a Sichel que adelantara un eventual apoyo a Kast si acaso el postulante de Republicanos pasa a segunda vuelta.

Esa avalancha de críticas y exigencias tuvo respuesta en este sorpresivo punto de prensa de Sichel convocado en horario prime de la televisión.

La zanja de diferencia

“No vamos a sacrificar liderar el nuevo ciclo político para repetir los viejos fracasos de la intolerancia. No sacrificaremos el futuro por la intolerancia del pasado y la polarización que tan mal le ha hecho a Chile. No sacrificaremos el futuro por la falta de sentido de mayoría y colectivo. No construiremos zanjas donde los chilenos quieren construir puentes y acuerdos”, dijo Sichel. 

Nunca nombró por su nombre a Kast, pero la elección de sus palabras lo tenía como destinatario. Hablar de “zanjas” fue una referencia directa a una de las propuestas mencionadas por Kast para instalar en algunos puntos de la frontera norte que impidan la llegada de inmigrantes. Así, Sichel buscó marcar distancia absoluta del líder de la tienda republicana.

Su estrategia final es calificar a Kast como el representante de la antigua política y emplazar a los que lo apoyan por “no cumplir su palabra” tras participar de las primarias. Por eso, ahí se busca instalar la idea de que en esta elección Kast y él no son lo mismo, al contrario son los representantes de “una vieja derecha y nueva derecha”, respectivamente.

“Nos hemos dado cuenta que otros, saliéndose del compromiso democrático que habían tomado, quieren volver al pasado. Apoyar una antigua derecha y hacer que el país retroceda en derechos que ya había ganado para las diversidades, para las mujeres, para las minorías, para el cambio climático y el combate por la sustentabilidad. Quieren volver atrás simplemente porque no creen en un proyecto colectivo. Están parados en el pasado y no entienden el valor de liderar un proceso de cambios en Chile”, dijo el expresidente del BancoEstado. 

Al menos desde la semana pasada que en el comando de Sichel se reflexionaba respecto al escenario de segunda vuelta que mostraban las encuestas [José Antonio Kast versus Gabriel Boric]. Internamente consideran que hay materias intransables, como la visión valórica y de género (el matrimonio igualitario y la declaración expícita en el programa de Kast con el “término” del Ministerio de la Mujer). En el comando de Sichel creen que Kast sí representa a una derecha “extrema”, calificación que el exdiputado siempre ha negado.

Sichel enfatizó ese punto en su alocución. “Lo que no vamos a aceptar es el chantaje de aquellos que quieren que me transforme en algo que no soy: una persona de extrema derecha, una persona que no es tolerante, una persona que no cree en la diversidad, una persona que no es independiente, una persona que no cree en las ideas de la libertad. Eso es lo que soy y con orgullo; ese es el proyecto que queremos encabezar”, dijo. 

“Cuando nosotros creemos que somos mayoría en Chile, es un error pararnos en los extremos en Chile. Eso es un pecado mortal”, cerró.

La pelota queda en la cancha de los partidos 

El detonante del “ultimátum” que se vio en horario prime, dicen en su comando, fueron las palabras del senador UDI y exministro de la Segpres, Claudio Alvarado, quien a través de una entrevista con La Segunda reconoció su apoyo a Kast en primera vuelta. De ahí en adelante, varios más repitieron la fórmula durante la tarde, entre ellos, los diputados de la UDI Cristián Labbé, Sergio Bobadilla e Iván Norambuena.

El diputado y presidente de la UDI, Javier Macaya, salió rápidamente a decir que la decisión de Alvarado -quien no va a la reelección- es personal y no representa a la UDI. Insistió, además, en que Sichel debía entender que el adversario está hacia la izquierda y no hacia la derecha, en una clara alusión a que se bajara el tono de las críticas a Kast. Algo similar le pidieron otros parlamentarios de la tienda de calle Suecia, entre ellos, Guillermo Ramírez y Juan Antonio Coloma Álamos. De hecho, el diputado Coloma comentó en Pauta Final, de Radio PAUTA, que para él pensar que el adversario es Kast era un “error”.

En la UDI el asunto es más sensible, dado que Kast salió de esas filas. Fue diputado por esa tienda, llegó a ser su secretario general e incluso disputó dos veces la presidencia del partido (perdió ante el senador Juan Antonio Coloma). Renunció en mayo de 2016. Desde RN, en tanto, el descuelgue comenzó antes con diputados como Camila Flores, Miguel Mellado y Leonidas Romero.

La solicitud para que Sichel hiciera “gestos” a Kast lograron el efecto contrario. Desataron aún más la molestia del candidato y también de su círculo íntimo, quienes fueron los encargados de conversar con los presidentes de los partidos para adelantarles en parte la jugada que haría Sichel pasadas las 21:15 horas. “Quiero pedirles a los partidos que se sientan en la libertad de acción de tomar la decisión que ellos quieran, respecto a sus apoyos partidarios”, dijo el candidato del oficialismo para detener de algún modo la agonía pública de los descuelgues.

Agregó que no es su tarea satisfacer los intereses de militantes y por eso deja la decisión en manos del bloque: “Quiero pedirles a los partidos de Chile Podemos Más que hagan lo que esa antigua derecha quiere hacer, que le declare la libertad de acción, que vuelvan donde querían estar y donde solo estuvieron algunos por convicciones. Aquellos que estuvieron acá cuando les convenía y que se dan vuelta hoy día simplemente porque no son capaces de cumplir su palabra”.

Sichel apuntó, así, al compromiso adquirido luego de que fuese él, un independiente, quien venció a los representantes de tres partidos políticos en las primarias de Chile Vamos: Joaquín Lavín (UDI), Mario Desbordes (RN) e Ignacio Briones (Evópoli).

Desde las dirigencias del bloque se cuadraron con Sichel. Aseguraron de que, a pesar de sus descuelgues, “se cumplirán” los compromisos. “En Renovación Nacional apoyamos decididamente a Sebastián Sichel y cumplimos la palabra empeñada, pero además lo hacemos por convicción, porque creemos que es el único capaz de darle gobernabilidad a Chile; es el único capaz de capitalizar el centro político; es el único capaz de ganar en segunda vuelta a una izquierda que improvisa, a una izquierda desarticulada”, comentó el presidente de RN y senador Francisco Chahuán. Sin embargo, el senador no pudo evitar los descuelgues de al menos tres de sus diputados.

Desde Evópoli, el diputado y timonel, Andrés Molina, aseguró que en su partido “están todos convencidos de que el proyecto que lidera Sebastián Sichel es el mejor para el Chile que viene. Además, hay que honrar los compromisos y este es un proceso democrático que lo eligió a él como líder de este proyecto”.  

El presidente del PRI, Rodrigo Caramori, apuntó a que llevar adelante una candidatura presidencial no es fácil y claramente siempre se cometerán errores. “Nosotros no nos sentimos parte de ningún club de políticos”, reflexionó en referencia a una de las frases de Sichel en que criticó a los representantes de los partidos, “pero sí confiamos en el trabajo abnegado, genuino y sincero de miles de chilenos, hombres y mujeres que se unen en torno a proyectos políticos y de sociedad”.

Los descolgados: acusan abandono de la carrera presidencial 

Desde la UDI, el senador Iván Moreira reconoció que las palabras de Sichel dejan al oficialismo en una situación muy complicada. “Encuentro que es una decisión muy precipitada y que debiésemos haberla conversado con él, los partidos políticos y los parlamentarios que lo apoyamos”, señaló el parlamentario. Horas antes, el parlamentario había pedido que el sector identificara bien que su “enemigo” está en la candidatura de Apruebo Dignidad.

La apuesta de Sichel también fue vista con atención entre los descolgados. Algunos de ellos observaron en la acción de Sichel una suerte de bajada. “Las palabras de Sichel develan que abandonó la carrera presidencial”, comentó al diputada de RN Camila Flores, quien fue una de las primeras en apoyar al abanderado republicano. 

Algo similar señaló el diputado de RN Miguel Mellado: “Yo escuché un candidato derrotado que le echaba la culpa al empedrado, les echaba la culpa a los partidos políticos, les echaba la culpa a los parlamentarios, a los intermediarios, cuando los errores fueron propios”.