Cómo la división de la derecha reconfigura las “alianzas” en la Convención

Tras la atomización de Vamos por Chile, han surgido voces desde Independientes RN-Evópoli hasta el Frente Amplio, quienes creen que hay disposición para buscar acuerdos transversales, los que se verían reflejados en las votaciones.

Luego de que los convencionales de Vamos por Chile se dividieran en cuatro colectivos (Chile Libre, Un Chile Unido, Unidos por Chile e Independientes RN-Evópoli), las alianzas y acuerdos entre los distintos sectores en la Convención Constitucional se empiezan a reconfigurar. 

Un grupo de convencionales de Independentes RN-Evópoli -quienes vienen trabajando de manera conjunta hace dos meses, según sus integrantes- ha comenzando una serie de acercamientos con miembros de distintas afinidades políticas. Su objetivo es avanzar en una serie de negociaciones y consensos que agilicen el trabajo de la redacción de la Carta Magna. 

El terreno para ese diálogo se ha ido fertilizando en los primeros meses de discusión reglamentaria. Ya son numerosos los convencionales de centroderecha, centroizquierda e izquierda que hablan abiertamente de que, a pesar de que existan diferencias en temas puntuales, es necesario dialogar con el fin de que el proceso sea fructífero y cumpla con los plazos estipulados por la reforma constitucional que estableció el capítulo XV. El esquema es acercarse lo suficiente como para ir configurando escenarios que alcancen el cuórum de 2/3. 

El constituyente Raúl Celis (RN) lo indica así: “Mi impresión es que sí se van a producir acuerdos con la centroizquierda en muchas materias, especialmente en las que tengan menos contenidos ideológicos, como las relacionadas con el sistema de gobierno”. Celis cuenta que ha sostenido conversaciones con sectores de izquierda, quienes le han transmitido que “sería interesante reunirnos para ver en qué materia tenemos posiciones similares”. 

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Manuel José Ossandón Lira (RN) coincide. “La oficialización de esta alianza entre Independientes, RN y Evópoli ha traído como consecuencia que esta semana muchos convencionales de los más diversos colectivos, de forma espontánea, se nos hayan acercado buscando instancias de diálogo”, dice a PAUTA.

Uno de esos puentes llega hasta el Colectivo del Apruebo. “Yo veo de manera positiva la formación de este nuevo colectivo de la centroderecha. Hay una posibilidad cierta de que los constituyentes de RN y Evópoli se puedan entender en una alta medida con el Colectivo del Apruebo, con el Frente Amplio y también con el Colectivo Socialista”, comenta Agustín Squella (Ind.-PL). Subraya que “ahí se puede formar una mayoría importante, articulada, que irá descubriendo con el tiempo los temas en los que que habría un mayor consenso”. 

Sin embargo, Squella piensa que, para que esta articulación resulte, “tanto RN y Evópoli como los sectores de izquierda no pueden acomplejarse ante la visión de las posiciones más extremas”. En la Convención, opina, “los extremistas” son minoría. 

El debate en comisiones 

El nuevo colectivo de Independientes RN-Evópoli lo integran Bárbara Rebolledo (Ind-Evópoli), Cristián Monckeberg (RN), María Angélica Tepper (Ind-RN), Luis Mayol (RN) Geoconda Navarrete (Evópoli), Manuel José Ossandón (Ind-RN), Paulina Veloso (RN), Luciano Silva (RN), Patricia Labra (RN), Hernán Larraín (Evópoli), Bernardo Fontaine (Ind-RN), Bernardo de la Maza (Ind-Evópoli), Roberto Vega (RN), Álvaro Jofré (RN), Ruggero Cozzi (RN) y Raúl Celis (RN).

No son los únicos donde se observan actores para un diálogo.

Aunque el Pleno de la Convención es la instancia donde están puestas las miradas, las verdaderas negociaciones y búsqueda de consensos ocurren al interior de las comisiones, donde se requiere el voto afirmativo de la mayoría de los presentes para aprobar las normas e iniciativas. 

Para el constituyente de la Lista del Apruebo por el Distrito 17 Christian Viera, “las comisiones son las que marcarán la pauta”, y enfatiza en que en esta instancia se desarrollará el “verdadero diálogo político”. Viera ingresó a la Convención como independiente en cupo DC, pero se alejó de ese sector y entró al Colectivo del Frente Amplio. Respecto a la división de la derecha, el abogado revela que hay convencionales de aquel sector que “siempre se han mostrado abiertos al diálogos, como Hernán Larraín, Bernardo Fontaine y Rodrigo Álvarez (UDI), entre otros y otras”.

El aludido Hernán Larraín Matte (Evópoli) también considera que “ya pasamos por la etapa del reglamento, por lo que aprendimos a conversar y a negociar. Espero que a nivel de comisión, que es muy diferente a lo que pasa en el Pleno, se empiece a dar un trabajo más transversal”. En esa línea, reconoce que él es parte de un grupo de la centroderecha que está abriendo nuevos puentes, mientras “otros quieren que esto fracase”. 

Un bloque “movible”

Además de que no se creará un nuevo colectivo ni conglomerado, el convencional Patricio Fernández (Colectivo Socialista) explica que “la construcción de los 2/3 no es sinómino a la construcción de un puro bloque, es movible. El único destino de esto es que haya un eje más de centro que articule hacia los dos lados, el que debe llegar a entendimientos”.

Similiar es la postura de Hernán Larraín, quien señala a PAUTA que “e distintas votaciones habrá una geometría variable. Como Independientes RN-Evópoli queremos ser parte de esos 103 convencionales que conforman los dos tercios requeridos, pero queremos ser parte del acuerdo, del diálogo. Eso lo vamos a iniciar desde las comisiones para poder aportar, no nos vamos a atrincherar”.

El consituyente Raúl Celis (RN) comparte esta visión de la movilidad, y dice que “en la medida que el Frente Amplio con el Colectivo Socialista se muevan un poco hacia el centro, van a tener los votos necesarios para lograr los 2/3. Justamente con ese sector yo he tenido algunas conversaciones”.

Luis Barceló, convencional del Colectivo del Apruebo, cree que “es positivo para la construcción de una Constitución que se dividan las aguas en la derecha, entre los sectores dialogantes y lo más intolerantes”. Sostiene que “esto mismo también pasa en la izquierda: hay algunos sectores más radicales, mientras otros son más proclives al diálogo”. En este sentido, Barceló afirma que “nosotros como La Lista del Apruebo somos una bisagra. Estamos disponibles para hacer puentes con la izquierda y la derecha. Esta separación en la derecha nos permitará dialogar aún más, desde Renovación Nacional hasta el Frente Amplio, aunque no excluyendo a los otros sectores”.