Las ciclosendas: la solución de emergencia para abordar la falta de ciclovías
Ariel López, ingeniero en transportes y presidente de la ONG MAP8, detalló la iniciativa, que buscar saltarse la burocracia estatal y desarrollar proyectos incrementales.
Actualmente en Santiago existen cerca de 490 kilómetros de ciclovías y se realizan en ellas del orden de un millón de viajes al día. “Un millón de viajes en bicicleta es lo mismo que se hacía en Metro en 2004”, cuenta el ingeniero en transportes y presidente de la ONG MAP8, Ariel López.
El punto de preocupación es que para que Metro llegara a esas cifras en 2004, se necesitaron años de preparación. “Empezaron en los 60 a crear la dirección de Metro, la empresa y toda la inversión, pero para llegar al millón de usuarios de bicicletas no hemos puesto un peso. No tenemos ninguna institución del Estado, ni municipal ni nacional que se encargue de la movilidad o de los desplazamientos en bicicleta”, señala López en la sección Pauta Sustentable, en Plaza Pauta de Radio PAUTA.
La falta de institucionalidad
Aunque este tema lleva tiempo en el tintero, con el estallido social -y debido a que muchos buses no podían circular por las calles- las bicicletas tomaron más fuerza y su uso se incrementó considerablemente. Esto llevó a que, desde organizaciones de ciclistas, ONGs e incluso la academia, se empezara a solicitar al Ministerio de Transportes y al Ministerio de Vivienda y Urbanismo que se construyeran más ciclovías.
“El Ministerio de Trasportes desde el principio se negó, básicamente porque ellos tienen competencias de gestión, pero no de infraestructura, y el Minvu, que es quien tienen potestad de construcción, se toma demasiado tiempo”, comenta el presidente de MAP8.
“Ese es el gran problema, porque tenemos un bloqueo institucional. Los alcaldes dicen que quieren hacerlo y que los vecinos lo piden, pero no tenemos los recursos. El MTT dice que no es su competencia y el Minvu dice que hay que estudiarlo, pero eso demora mucho”, agrega.
Buscando hacer frente a esta situación es que nace el proyecto “Ciclo sendas de emergencia: infraestructuras ciudadanas por una movilidad sustentable”, el cual es liderado por Ariel López y que fue reconocido por la Sociedad Chilena de Ingeniería de Transporte (Sochitran).
Una solución necesaria
Como la movilidad en pandemia es un tema que amerita rapidez para ser resuelto, las ciclosendas de emergencia nacen con la lógica de resolver el problema con lo que se tiene sobre la mesa. Los expertos realizan levantamientos aerofotográficos rápidos, se disponen los planos, se trazan líneas, se visita el terreno, revisan y lo más importante: se reúnen con las personas que circulan por ahí y que conocen el lugar.
“Entonces, en algo que se puede demorar normalmente mucho, años incluso, nosotros tardamos hasta una semana de dedicación exclusiva”, comenta López.
“La gracia y mayor virtud que vio Sochitran en esto es que es un proyecto incremental. O sea, partimos de un proyecto prototipo, un experimento en las mejores condiciones posibles, y lo observamos, demarcamos con la aprobación de la municipalidad y vemos cómo funciona. El objetivo de esto es que podemos resolver de manera rápida la necesidad, pero además todo lo que hacemos sirva para avanzar hacia el proyecto definitivo de la ciclovía que se emplace sobre ese proyecto, así esa ciclovía final y definitiva estará basada en la experiencia y el conocimiento que obtuvimos de este experimento piloto”, explica.
Revise a continuación la entrevista completa con Ariel López en Plaza Pauta