Consejo económico asesor recomienda a Boric respetar el presupuesto 2022 y la senda fiscal
El grupo de expertos planteó medidas para crecimiento y empleo. Además, el equipo económico evalúa sumar una de las propuestas estrella de Parisi.
El consejo asesor económico de la candidatura de Gabriel Boric entregó este martes sus recomendaciones al equipo del abanderado de Apruebo Dignidad. Luego de una semana de reflexión y en medio de los ajustes del programa, los expertos recomendaron a Boric comprometerse con respetar el Presupuesto 2022, que elimina el gasto extra de la pandemia, para “acompañar al Banco Central en la tarea de estabilizar la inflación”. Asimismo, el grupo le sugirió mantener una trayectoria de consolidación fiscal en línea con las recomendaciones del Consejo Fiscal Autónomo (CFA) y aportar a la contener la deuda pública.
“El 2022 será un año complejo económicamente. La acumulación de desequilibrios macroeconómicos y la incerteza propia del escenario externo en contexto de una pandemia que no ha terminado, son límites que deben ser reconocidos por las autoridades del próximo gobierno. El llamado es a la responsabilidad fiscal desde el inicio”, dice el documento entregado por los académicos.
El consejo, en que participan economistas del mundo de la ex-Concertación como Andrea Repetto, Roberto Zahler, Eduardo Engel y Ricardo Ffrench-Davis, entre otros, está terminando de revisar las principales propuestas del equipo económico ampliado de Boric. Desde el 26 de noviembre este grupo, en el que hay economistas del comando y expertos que adhirieron a la candidatura de Nuevo Pacto Social, viene trabajando ininterrumpidamente en viabilizar las medidas. Con todo, hay algunas áreas, como pensiones, en que aún no hay un texto final.
El consejo asesor generó un conjunto de recomendaciones. Además de los temas fiscales, se pronunció sobre el rol del Estado en la economía: coincidiendo con Boric en la necesidad de “superar el estancamiento productivo y retomar el dinamismo económico”, se enfocan en un Estado “innovador, emprendedor y orientador”, que coordina los esfuerzos públicos y privados con miras a la transformación productiva.
Aunque no aborda la creación de diversas empresas públicas incluidas en el programa original, implícitamente las limita. Y propone aumentar la escala de Corfo y ampliar sus instrumentos (incluyendo créditos directos y ampliación de apoyo al capital de riesgo), “como una forma de avanzar en la creación de un Banco de Desarrollo”.
También proponen potenciar el rol de la Fiscalía Nacional Económica, “consultando su opinión previa en el diseño de proyectos de ley o normativas con incidencia en la competencia de un mercado” y que puede requerir a organismos del Estado realizar licitaciones públicasen caso de bienes y servicios de alto valor o para asignar “bienes nacionales de uso público que sean monopolios o insumos esenciales”.
Sugieren fortalecer al Sernac, con una nueva gobernanza que le permita tener facultades sancionatorias directas para aplicar multas y publicar sanciones.
“Han sido años complejos. El gobierno de Gabriel Boric aspira a ser un gobierno de transición que siente las bases para un crecimiento más inclusivo, sustentable y sostenible, en el marco del proceso constitucional”, agregan el documento al que accedió PAUTA.
Hay versiones distintas sobre el impacto de estas recomendaciones. Mientras algunos en el comando las presentan como elementos adicionales que, por lo mismo, modifican la propuesta original, otros aseguran que el relato apunta a que “no hay” un nuevo programa.
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El dilema de los combustibles: el guiño a Parisi
Además de buscar coincidencias con los votantes de centroizquierda, los ajustes al programa de Boric también aspiran a hacer un guiño a los electores de Franco Parisi: recogen uno de los temas que propuso en su campaña.
“Franco Parisi planteaba no solamente el terminar con los abusos en materia del sueldos del Estado, que es lo que nosotros hemos defendido desde el primer momento, sino también un tema que me parece muy interesante que tiene que ver con la devolución del impuesto específico de los combustibles a la gente, que lo paguen las empresas y que una vez pagado se devuelva a la gente y que pueda implicar mejores recursos para ellos”, afirmó Boric el 23 de noviembre.
Y eso se transformó en una propuesta que será sumada a su programa. Como un candidato “verde” que busca desincentivar los combustibles fósiles contaminantes, Boric busca equiparar el impuesto específico a 7 UTM por m3 para gasolinas y diésel sin exenciones ni devoluciones. Esto le trajo críticas desde el transporte de carga, que lo acusó de querer encarecer los productos que transportan, ya que hoy el diésel paga una tasa de 1,5 UTM por m3. Además, los camioneros y grandes empresas que usan diesel en sus procesos (como ocurre en la minería y la generación eléctrica) pueden recuperar todo o parte del impuesto específico a los combustibles que han pagado.
De hecho, en diversas entrevistas Parisi criticó que los taxistas tengan que pagar este impuesto, pero no las mineras que recuperan ese monto. “Si todos en Chile pagaran el impuesto específico a los combustibles, manteniendo la recaudación podemos bajar en $100 el costo del combustible“, afirmó el exabanderado del Partido de la Gente.
En el comando de Apruebo Dignidad barajan fórmulas para que las familias, excluyendo a las más acomodadas, puedan beneficiarse también de este reintegro del pago de impuestos. La idea es focalizar esta medida para que no sea regresiva, considerando que quienes poseen vehículos en su mayoría forman parte de los grupos más acomodados de la población.
Hay tres diseños sobre la mesa, que en todo caso solo permitirían el reintegro del impuesto específico de un vehículo por familia. Y siempre buscando abaratar el costo del combustible para quienes tienen menos ingresos y emplean el vehículo como fuente de trabajo. Es el caso de taxistas, feriantes y transportistas escolares, entre otros.
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