Los nombramientos de Gabriel Boric que probarán el nuevo cuórum en el Congreso
En las designaciones de la Corte Suprema, la Fiscalía Nacional y la Contraloría, el Presidente electo requerirá un alto respaldo del Senado. En marzo tendrá que nombrar a dos ministros del Tribunal Constitucional.
En marzo próximo, apenas asuma Gabriel Boric como Presidente de la República, casi simultáneamente una ministra la Corte Suprema, Rosa Egnem, dejará su cargo. Esta designación no solo será la primera de las seis que Boric hará de jueces del máximo tribunal en su período presidencial, también será el debut de cómo funcionarán los cuórum en el nuevo Congreso.
En el caso de los nombramientos en la Suprema, el sistema funciona así: el Pleno elabora una quina, luego el Mandatario elige un nombre y lo envía al Senado. Para que sea ratificado, necesita los votos de dos tercios de los parlamentarios.
Además de Egnem, en noviembre de 2022 también deja el Poder Judicial Guillermo Silva, al cumplir los 75 años. Mientras que en 2023 se van Haroldo Brito y Jorge Dahm, quien además es integrante del Tribunal Calificador de Elecciones (Tricel).
En 2024, en tanto, jubila Juan Eduardo Fuentes, el presidente electo de la Corte Suprema, que asume en marzo. Y, un año después lo hará María Teresa Letelier, quien es parte del grupo de once magistrados que han sido nombrados en el máximo tribunal durante las dos administraciones del Presidente Sebastián Piñera.
Asimismo, en 2023 deja el cargo la fiscal de la Corte Suprema Lya Cabello. Su designación es con el mismo sistema de los nombramientos del máximo tribunal, pues intervienen los tres poderes del Estado. En el Senado necesita los dos tercios.
Cupos de Abbott y Bermúdez
En total serán 72 los cargos en los que Boric intervendrá, señala un análisis que realizó el estudio especializado en derecho administrativo Osorio Vargas & Abogados, del que forma parte el panelista de PAUTA Gabriel Osorio.
De ellos, más de un docena corresponde a designaciones en áreas clave de los tribunales, de organismos auxiliares de la justicia y de la Contraloría.
Por ejemplo, en octubre de 2022 dejará el cargo el fiscal nacional, Jorge Abbott. Y este puesto se nombra tal cual los ministros del máximo tribunal: tras un concurso público, el Pleno de la Suprema elabora una quina, el Mandatario elige un nombre que lleva al Senado y allí, nuevamente, se requieren los dos tercios de los miembros en ejercicio.
En diciembre de 2023, en tanto, se renueva el cargo de contralor general de la República, pues Jorge Bermúdez cumple ocho años, por lo que ejercerá en casi dos de los cuatro años del gobierno de Gabriel Boric.
De acuerdo con la Constitución, el contralor es designado por el Presidente con acuerdo de los tres quintos del Senado.
Esa misma votación -tres quintos de los senadores- requerirá la renovación de dos de los cupos que se generarán en el Tribunal Ambiental cuando se abran las vacantes, en 2022 y 2023, de los ministros Alejandro Ruiz y Mauricio Oviedo, respectivamente.
Previamente, la Corte Suprema envía una quina al Presidente de la República. Y luego que elija un nombre, se envía al Senado.
TC y CDE: designaciones unilaterales
En marzo próximo, además, se producirán las vacantes de dos ministros del Tribunal Constitucional (TC) y cuyos nombramientos son directos del Presidente Gabriel Boric. Se trata de los sucesores de María Luisa Brahm e Iván Aróstica.
En paralelo, hay otros dos cupos en el TC que también se producirán en marzo y que corresponden al actual presidente Juan José Romero y el ministro Gonzalo García. Sin embargo, se trata de nombres que propone la Cámara de Diputados y ratifica el Senado por los dos tercios de los votos.
Asimismo, Boric realizará otros dos nombramientos en el Consejo de Defensa del Estado (CDE).
El primero será en abril de 2023, cuando deje la presidencia del organismo el abogado Juan Antonio Peribonio, a quien nombró Piñera y seguirá en el CDE. El segundo ocurrirá en 2025, pues con la salida de Jaime Varela, Boric deberá designar a su reemplazo en el Consejo.