La estrategia puertas adentro: cómo se arma el aterrizaje comunicacional del nuevo gobierno
Vocerías acotadas, un despliegue en medios no tradicionales y un cambio de mando ciudadano son algunos de los aspectos centrales.
En las dependencias de la Universidad de Santiago (Usach), la futura ministra del Interior, Izkia Siches, realizó este viernes 25 la primera jornada de trabajo con todos los subsecretarios entrantes y sus respectivos jefes de gabinete. Siches fue la encargada de dar la bienvenida y de delinear el trabajo que se iniciará el próximo 11 de marzo. De hecho, esta fue la primera instancia para que “los números dos” de las distintas carteras se conocieran.
A mitad del encuentro, Siches dio un punto de prensa acotado en compañía del futura subsecretaría de la Segegob, Valeska Naranjo. Estuvo cinco minutos frente a las cámaras, confirmó que el Presidente electo “ha definido no renovar el estado de excepción en Wallmapu” y luego se retiró para reunirse virtualmente con Gabriel Boric, quien por estos días termina sus vacaciones en Juan Fernández.
Entre los asistentes al encuentro estuvo también el jefe de gabinete de Boric, el abogado Matías Meza-Lopehandía. En la reunión, Meza-Lopehandía dio una breve mensaje de camaradería y les entregó a los presentes dos consejos. El primero fue que WhatsApp era “un mal mecanismo para contestar rápido”, porque entre todos los mensajes que llegan hay muchos que se pasan. Por lo mismo, si era algo importante, mejor que lo llamaran directo. El segundo fue que al retirarse de la actividad no hablaran con la prensa que esperaba a un par de metros de ellos, porque la bajada comunicacional ya la había hecho Siches y Naranjo. Las nuevas autoridades hicieron caso y se retiraron sin dar declaraciones.
Este último consejo no es casual. Tiene que ver directamente con el diseño comunicacional que se está trabajando en el equipo del gobierno entrante. Por ejemplo, la futura vocera ya adelantó que quieren tener un despliegue más allá de los medios “tradicionales”. Esto contempla más espacios en la prensa regional, extranjera, medios comunales y una fuerte presencia en redes sociales. Y si bien aún están en ajuste “los tonos y las señales” que se quieren dar a partir de la instalación, hoy los principales asesores de Boric se mueven en una propuesta de dos etapas: “un silencio más selectivo” de aquí al cambio de mando y una toma de posesión que buscará tener un sello más ciudadano.
En estas dos semanas que quedan de transición se quiere reducir lo más posible las vocerías, explica una fuente del entorno del Presidente electo. Y así se lo transmitieron a las nuevas autoridades para que limitaran sus comentarios públicos y entrevistas. “La definición es no hacer declaraciones ni emitir opiniones hasta que no asumamos”, explica un miembro del nuevo gabinete.
Esto para evitar polémicas con el gobierno saliente, pero también para resguardarse y dar una señal de orden. “La idea es hablar lo justo y necesario, porque no somos gobierno aún”, explica otro miembro del equipo de Boric.
De hecho, esa fue la tónica en las primeras bilaterales que se realizaron en la última semana. La mayoría de los nuevos ministros se limitaron a responder sobre cómo había sido la reunión más que a hablar de contingencia.
En los incipientes equipos ministeriales -los que están en plena formación-, hay una postura compartida: las respuestas a los distintos conflictos las deben dar desde la administración de Sebastián Piñera hasta el último día de su mandato. Por lo mismo, parte de la apuesta de estos días será salir a “contestar” en situaciones puntuales, como, por ejemplo, el impasse que se vivió con el anuncio que dio Piñera de extender el IFE laboral y el subsidio Protege hasta junio.
En esa polémica no solo estuvo la molestia directa del nuevo ministro de Hacienda, Mario Marcel, quien se la manifestó al actual titular de esa cartera, Rodrigo Cerda, sino también la de la futura vocera de Gobierno, Camila Vallejo, que reaccionó y aseguró que Piñera “tiene mandato hasta el 11 de marzo, pero no puede seguir pretendiendo gobernar posterior al 11 de marzo”.
El chat de consulta
Mientras se confirman los equipos comunicacionales de cada cartera, también se está delineando el rol de tres espacios clave: la Dirección de Comunicaciones y la jefatura de prensa de la Presidencia; la Segegob (vocería) y la Secretaría de Comunicaciones (Secom) que desde el 11 de marzo encabezarán la dupla compuesta por el RD Pablo Paredes (director) y por la periodista PC Javiera Olivares (subdirectora).
El primer ítem de esta triada estará cubierto por los periodistas Felipe Valenzuela y Tatiana Klima respectivamente. Valenzuela, quien lleva años trabajando con Boric y son amigos desde el colegio, estará a cargo de la dirección de comunicaciones de Boric y Klima, quien trabajó en los gobiernos de Ricardo Lagos y Michelle Bachelet, será la que encabezará la relación con la prensa a diario.
De hecho, ambos encabezan el “chat” donde hoy se toman las decisiones comunicacionales y en el que participan la ministra Vallejo y parte de su equipo, entre ellos, el futuro director de la Secom. En esta instancia también participa la jefa del “segundo piso”, Lucía Dammert, el sociólogo Carlos Durán y el jefe de gabinete de Boric.
Cuando hay una duda se comenta en este grupo. Es ese el espacio donde a diario se someten a discusión las distintas decisiones comunicacionales, donde se evalúan las bajadas de los principales temas. Cuántas señales dar y cuánto contenerse. De hecho, este es uno de los espacios donde se está trabajando la puesta en escena del 11 de marzo.
Los mensajes de la posesión
Cerca de 520 personas deberían ser parte del cambio de cambio. En el Congreso, eso sí, se prepara una instancia acotada para el Pleno y una carpa al costado para los invitados que no podrán entrar a la ceremonia. Hasta ahora, dicen el equipo de Boric, la idea es dar una señal republicana, pero también cercana y ciudadana. De hecho, ese es el sello que quieren incluir en buena parte de las actividades que tendrá ese fin de semana.
Todo partirá el jueves 10. Ese día el Mandatario electo dormirá en la residencia presidencial de Cerro Castillo en Viña del Mar. El viernes 11 su día partiría con la fotografía oficial con su gabinete y luego seguiría con una actividad pública que será la previa al traspaso de la banda tricolor. Una de las ideas que se barajan es un desayuno con organizaciones sociales.
De ahí, partirá al Congreso para la ceremonia oficial que comienza al mediodía. Ya en su calidad de Presidente en ejercicio, Boric volverá a Cerro Castillo para almorzar con los jefes de Estado invitados. A media tarde se subirá a un helicóptero que lo llevará de regreso a Santiago. Entrará a La Moneda aún con sol y se preparará para el “balconazo”, su primer discurso desde el Palacio de Gobierno. Este debería darse en horario prime, pasadas las 20:00 horas, con la Alameda de telón de fondo.