La Moneda explicita su visión sobre el fin del Senado y tensiona la relación con la Cámara Alta
La ministra Camila Vallejo dijo que el Gobierno no incidirá en las decisiones de la Convención. Los senadores reaccionaron molestos y adelantan que la decisión tendrá consecuencias.
“Lo que no queremos es que haya defensas corporativas”. Con esa frase la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, cerró filas con la decisión de la Convención Constitucional de eliminar el Senado y crear una Cámara de las Regiones.
Con esa frase, de paso, sepultó también cualquier posibilidad de que La Moneda incida de alguna forma en las definiciones del órgano constituyente, tal como lo venían pidiendo desde el oficialismo.
Vallejo agregó que la Convención adoptó un acuerdo de mayoría para crear un nuevo sistema político, que es un bicameralismo asimétrico “con el cuórum más alto posible dado las reglas del juego democrático, que son los dos tercios” y pidió responsabilidad. “Nosotros entendemos cuáles son nuestras responsabilidades y esperamos que todos los poderes del Estado entiendan también cuáles son las suyas”, manifestó.
Tal como lo planteó PAUTA, el Ejecutivo no es partidario de intervenir ni de que los representantes de la Cámara Alta lo hagan y pidió centrar los esfuerzos en el debate que viene sobre las atribuciones que tendrá la Cámara de las Regiones y los artículos transitorios que fijan plazos de entrada en vigencia.
Senadores niegan defensa corporativa
Como era de esperar, la defensa del Gobierno a la decisión de eliminar el Senado no cayó bien entre los senadores y vino a confirmar las sospechas que hace rato circulaban en el Congreso, sobre todo entre los parlamentarios de la ex Concertación (PS–PPD-PRSD y DC), respecto de que La Moneda no intervino porque está de acuerdo con las definiciones de la Convención.
Así lo explicitó el senador DC Iván Flores. “Más allá de los dichos de la vocera de Gobierno, donde deja entrever que el Gobierno ha tomado partido por alguna de las alternativas que se han estado debatiendo en la Convención, lo que a mí me preocupa es el rumbo que está tomando la Convención”, sostuvo. Agregó que si el Gobierno va a intervenir, debe hacerlo recogiendo los temas de interés ciudadano, como salud, seguridad, pensiones. “Esos son los (temas) que necesitan respuesta, no necesariamente los institucionales”, planteó.
La expresidenta del Senado Ximena Rincón (DC) adicionó que “la ministra vocera de Gobierno no tiene que olvidar nunca que esto no se trata de defensas corporativas, se trata de qué es lo que va a decidir la ciudadanía, porque esto es un proceso”. Rincón dijo que los dos tercios no bastan, ya que para el plebiscito de salida se requiere de la mayoría de los electores para aprobar o rechazar la nueva Constitución.
Asimismo, la senadora aseguró que la ciudadanía no está viendo certezas ni de lo que se pedía el 18 de octubre de 2019 ni de la institucionalidad que tendrá el país. “Nadie puede sostener, si lo ha estudiado bien, que lo que ha aprobado la Convención hasta el día de hoy, primero, sea un bicameralismo asimétrico, y segundo, se dé respuesta a los derechos sociales que la ciudadanía necesita garantizar”, expresó la también exministra.
¿Defensa corporativa? Aquí la decisión final no la tiene el Gob ni un sector específico. La tiene la CIUDADANÍA para elegir si aprueban o rechazan lo propuesto por la Convención. Requieren certezas de que avanzamos al desarrollo o nos estancamos. https://t.co/wvLMnmNfHL
— Ximena Rincón (@ximerincon) April 18, 2022
“Se equivoca rotundamente la vocera de Gobierno. No estamos defendiendo corporativamente nada. Queremos, eso sí, que la nueva Constitución represente a una amplia mayoría de nuestros compatriotas”, comentó a PAUTA el senador socialista Fidel Espinoza. Agregó que este es un proceso del que todos pueden participar y que “los senadores y senadoras, por ejemplo, que somos representantes ciudadanos y somos la voz de millones de nuestros compatriotas en cada una de las regiones que representamos no podemos estar exentos de esa discusión”, sentenció.
Distintas voces han comentado a este medio que la posición adoptada por el Ejecutivo complicará su relación con el Senado. “Tendrá un pésimo trajinar”, afirmó un parlamentario del Socialismo Democrático.
Mientras no haya nueva Constitución, la Cámara Alta sigue siendo clave en la tramitación legislativa, los senadores lo saben y lo harán valer. De hecho, uno del bloque PS-PPD advierte, justo cuando se debate en la Cámara de Diputados el destino del quinto retiro de los fondos de pensiones y del retiro alternativo del Gobierno: “cuando lleguen a hablar con nosotros vamos a poner condiciones, condiciones políticas”.