Actualidad

El “armador”: el método Jackson para su nueva relación con el Congreso

Imagen principal
Ilustración: Fernanda Monasterio
POR Maria Cecilia |

El ministro de la Secretaría General de la Presidencia tiene una estrategia para mejorar los contactos con los parlamentarios.

“Bloqueo con pelota fuera y punto nulo”, describe el ministro de la Secretaría General de la Presidencia (Segpres), Giorgio Jackson lo que pasó en el Congreso con los proyectos de retiro de fondos de pensiones. 

La analogía es del vóleibol, deporte que le apasiona desde niño y que hoy no tiene tiempo de practicar, lo que lamenta profundamente.

Siempre jugó de “armador”. En esa disciplina, esa es la posición desde la cual se articula la estrategia de juego.

De la cancha de vóleibol a las jugadas en el Congreso

“Perder para él es muy duro”, comenta a PAUTA un excolaborador del ministro Jackson, a quien describe como altamente competitivo, estratégico y táctico. Agrega que “siempre tiene un plan A, B y C”, a propósito de lo que pasó con los retiros.

Estilo que forjó durante su época de seleccionado menor y juvenil de vóleibol, según contó el propio titular de la Segpres a TV Bío Bío en 2019. En esa entrevista asegura: “si me hubiera picado más el bichito del vólley, en el sentido de ir a un sudamericano, yo creo que no me hubiera dedicado a la política”.

Hoy es ministro de Estado, de una de las carteras más políticas del gabinete y es parte del círculo de hierro del Presidente Gabriel Boric.

Un diputado que trabajó con Jackson en el Congreso, mientras fue diputado, comenta que es rupturista, porfiado y profundamente mateo. “Piensa fuera de la caja, estudia los temas y los prepara muy bien. Es muy difícil convencerlo de que está equivocado”. Explica también que su percepción de una buena idea tiene que ver con que se le haya ocurrido a él, por eso “los parlamentarios de derecha, por ejemplo, se van a encontrar con un muro conversando con él en el Congreso”.

Otro parlamentario que ha compartido con el exdirigente estudiantil en el Congreso ahora que es ministro, comentó que “Jackson está en proceso de aprendizaje, que está viendo que no todo es ingeniería en la vida y que no solamente hay que centrarse en el resultado, ya que el proceso para llegar al objetivo también es importante, porque sino quedan muchos heridos por el camino”, explicó. 

Quienes conocen al ministro cuentan que no es de “lotes” (grupos de intereses afines al interior de los partidos políticos), pero que sabe trabajar en equipo. Destacan que tiene condiciones de líder: “Empuja y viabiliza los proyectos, siempre intenta imponer sus ideas con argumentos, es leal y buena persona”. 

Giorgio Jackson está jugando en el Gobierno en una posición que le acomoda. Es una estrategia muy similar a la del “armador” de vóleibol que tiene que facilitar el ataque, optimizar el trabajo del atacante, evitar los bloqueos y estar atento al movimiento de sus compañeros para distribuir las jugadas y así anotar la mayor cantidad de puntos.

La jugada que pide el Presidente Boric

Si bien el Gobierno logró el rechazo del retiro universal, lo hizo con el respaldo de la oposición, porque varios parlamentarios oficialistas jamás se alinearon y terminaron votando a favor o se abstuvieron.

Tampoco se ordenaron para votar el retiro alternativo del gobierno, pese a las intensas conversaciones del Ejecutivo con sus dos coaliciones.

Las críticas no tardaron en llegar y apuntaron al titular de la Segpres, que es el ministerio encargado de llevar la relación con el Congreso. 

Sin embargo, el Presidente Boric respaldó a los ministros que participaron del proceso y aseguró que “el Comité Político no tiene fisuras”.  Aunque destacó que la mayoría de parlamentarios oficialistas respaldó el proyecto del gobierno, tomó nota de lo que faltó en el proceso: “nos deja una lección en la cual vamos a tener que mejorar el trabajo sin lugar a dudas, que es que el diálogo con otras fuerzas es necesario para poder impulsar el proceso de reformas”.

Finalmente Boric aseguró que lo que pasó con los retiros en ningún caso condiciona las reformas estructurales del Gobierno.

Parlamentarios piden saber dónde está la pelota

A la misma hora que hablaba el Presidente, en el Congreso  las recriminaciones posrechazo a los restiros abundaban. La jefa de bancada de los senadores DC, Ximena Rincón, comentó que “el trabajo prelegislativo tiene sentido. Si este se realiza de manera transversal y amplia, explicándoles a los legisladores y a la ciudadanía cuáles son los objetivos de parte del Gobierno se puede avanzar”.

Más temprano, en Radio PAUTA, Rincón había dicho que el error de La Moneda fue no conversar primero con sus filas. Con sus partidos de gobierno, los del anillo cercano y no tan cercano. Y obviamente con el resto de las fuerzas legislativas en la Cámara de Diputados”.

Sobre los siguientes pasos, el diputado PS Jaime Naranjo describió así su malestar: “Si usted me dice dónde está la pelota, en este momento la pelota la tiene el Gobierno. Él es el que tiene la palabra y él es el que tiene que tomar decisiones y las acciones concretas”. El parlamentario agregó que el Ejecutivo debe tener claro que no tiene mayoría en la Cámara de Diputados y que tendrá que trabajar en ese escenario.

En medio del revuelo oficialista, el ministro Jackson decidió almorzar con la mesa de la Cámara de Diputados para recoger impresiones. El presidente de la corporación, el PPD Raúl Soto, explicó que le manifestaron al secretario de Estado su preocupación por “los errores que se cometieron en la tramitación de estos proyectos, por la falta de diálogo previo” y agregó que esperan que en el futuro los errores cometidos se puedan corregir y “que exista una comunicación, una coordinación más permanente con la Cámara de Diputados”.

Presidente del Senado, Álvaro Elizalde, y ministro Giorgio Jackson
Presidente del Senado, Álvaro Elizalde, y ministro Giorgio Jackson. Créditos: Agencia Uno

Más tarde Jackson se reunió con los senadores oficialistas.

Ahí recogió inquietudes también sobre la agenda legislativa, con énfasis en las negociaciones sobre el salario mínimo y la reforma a los impuestos. “También se nos ha puesto mucho énfasis en cómo podemos mostrar avances concretos en materia previsional”, apuntó.

La tarea del “armador” Jackson será, a partir de ahora, poner en juego una estrategia para avanzar en las iniciativas que vienen, entre ellas la de salario mínimo y la reducción de la jornada laboral a 40 horas.

El método del ministro será que el equipo completo del Gobierno entre a la cancha y participe del juego: habrá un vínculo permanente con los parlamentarios, a través de enlaces del ministerio con las distintas bancadas. Con los diputados y senadores habrá más instancias de diálogo mediantes los delegados presidenciales y los secretarios regionales ministeriales. Además, “muchos proyectos a partir de ahora serán vistos en las distintas comisiones por los ministros sectoriales y no solo por la Segpres”, comentaron a PAUTA desde esa secretaría de Estado.