Acusan un sistema colpsado, problemas de gestión y nula respuesta: ¿Qué está pasando en el organismo Mejor Niñez?

En la crónica de Gabriela Valenzuela profundiza en la actual situación de la institución que reemplazó al Sename.

Fue a mediados del año pasado cuando Gabriela Muñoz, directora del Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia, anunció que buscarían para fines de diciembre 2023, 40 nuevas residencias en todo el país, a través de concurso público. Ello, para enfrentar el grave problema de sobrecupo que enfrentan las fundaciones dependientes de este organismo, ex Sename. Sin embargo, a enero de este año la cifra solo alcanza a 13.

En algunas regiones del país la sobredemanda alcanza el 50%. La propia encargada del servicio reconoce a Radio Pauta que “hay una complejidad en administrar una residencia, de acoger a niños con dificultades de salud mental o consumo problemático, no teniendo dispositivos desde Salud o Senda, y eso dificulta que puedan trabajar bien”. Agrega que “esperamos de acá a marzo tener algún nuevo concurso, si no, sacamos nuevas licitaciones directas”.

Mejor Niñez: ¿Qué dicen las Fundaciones?

El exceso de solicitudes o la nula respuesta por parte de las autoridades, llevó a que hogares como Pequeño Cottolengo, que trata a personas con discapacidad severa, planteara terminar su vínculo con Mejor Niñez, ya que la ley los obliga a recibir a adolescentes con otros perfiles (problemas de drogadicción o con la justicia), de las personas que atiende, como explica a Radio Pauta, Cristián Glenz, director de la institución.

El organismo trató de revertir la situación, “pero lamentablemente han pasado 3, 4 meses y no hemos visto ningún avance, y para nosotros es bastante triste ver que llevamos casi un año con este tema y no logramos avanzar”, explica. Desde Mejor Niñez aseguran que “se hicieron todas las gestiones comprometidas”.

Por su parte, Ignacio Concha, director Ejecutivo de María Ayuda, la tercera fundación más grande en cuanto a residencias, dice que “hoy hay una crisis importante en el sistema, con el Estado ausente, que no da abasto, lo mismo Salud o Educación que no lo ven como prioritario, y por eso hemos cerrado 5 residencias en los últimos 3 años”. Destaca que “el Servicio haya subido los estándares, pero eso, dice, no va acompañado de mayor financiamiento, con la subvención no alcanza”.

Benjamín Rodríguez, Director Ejecutivo de la Fundación Padre Semería, coincide en que “el sistema está colapsado, y por eso muchas instituciones están más en la línea de cerrar. A nivel de estructura, de funcionamiento, teníamos esperanza de cambio, pero no ha sido así”.

Rodríguez explica a Radio Pauta que por parte de Mejor Niñez, ahora encargado de la asignación de cupos, “hay una presión constante por generar nuevos ingresos, lo que termina siendo una improvisación para los NNA y las residencias, ya que se toman decisiones que no siempre apuntan a la necesidad de cada niño, y eso los perjudica”.

Muñoz responde que “estamos frente a una situación histórica y estructural, estamos reorganizando los modelos”. Explica que “hemos estado trabajando con las fundaciones, tenemos una mesa de trabajo, y también el poder tener un reglamento de pago con mayores posibilidades de recursos, lo que es importante”. Recién en junio se podrá aplicar una nueva inyección de recursos.

Mejor Niñez: el pedido al Presidente Boric

Sin embargo, Lisette Allende, Gerente General de la fundación María de la Luz, dice que “pese a las promesas, todo sigue igual. Los cupos y nuevas residencias no se cumplieron, y quedaron muchos concursos desiertos en las licitaciones, con todos estos problemas es difícil que nuevos oferentes quieran entrar”.

Por ello, explica a este medio que “como mesa de coordinación le enviamos en octubre una carta al Presidente Boric para que supiera de esta grave situación, pero nos respondió en noviembre a través Adolfo Ramírez, Jefe (s) del departamento de Gestión Ciudadana, diciendo que no era posible concretar una reunión, fue un portazo”.

Mejor Niñez: la situación en el norte de Chile

Uno de los problemas más complejos de sobredemanda se vive en el norte del país, especialmente por la llegada de migrantes en situación irregular. Julia Reuque, Directora de la residencia Berit Najam de Antofagasta, la única que trabaja con adolescentes de 14 a 18 años en toda la región, confirma a Radio Pauta que “la situación es bastante crítica respecto la oferta programática”.

“Tenemos 12 plazas, pero a 27 ingresadas (algunos con familias o etapa de regreso), y por lo menos a 16 presentes, y esta falta de cupos se repite en toda la zona”, señala. Desde María Ayuda detallan que en la residencia con 18 plazas atienden a 34 adolescentes.

Desde Mejor Niñez aseguran que “estamos dando respuesta para esas zonas, con la implementación en los próximos meses de residencias nuestras, de designación directa, en Antofagasta, Tarapacá y en Arica, mientras generamos licitaciones con un nuevo reglamento de pago para organismos colaboradores”.

Para María Ayuda, “se posterga una vez más a los niños que no hacen ruido, que no salen a protestar, que no cortan una calle, y dejan de ser visibles para las prioridades del gobierno. Por eso nos toca a nosotros levantar la voz”.