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Tiroteo en Moscú: Rusia se niega a reconocer autoría del Estado Islámico e insiste en culpar a Ucrania

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POR Camila Acosta Cornejo |

Desde los servicios de seguridad rusos afirmaron que los sospechosos tenían vínculos con Ucrania y que planeaban huir a este país tras el ataque, a pesar del categórico rechazo de esta tesis por parte de los altos mandos ucranianos, Putin intensificó sus ataques a Kiev. 

El pasado viernes, un grupo de terroristas tirotearon a muchos de los participantes de un concierto del grupo de rock ruso Piknik, en una sala de conciertos del Crocus City Hall, en Krasnogorsk, un suburbio del noroeste de Moscú. El ataque provocó el incendio del auditorio: parte del techo se derrumbó y el fuego se trasladó a la zona delantera del Crocus, destruyendo los dos pisos superiores.

El balance de muertos subió este lunes a 182 muertos y el Ministerio de Situaciones de Emergencias informó que un centenar de personas siguen hospitalizadas. Este atetando es el más mortal desde mediados de los 2000 y que fue condenado por la comunidad internacional.

En un discurso transmitido el sábado por televisión a toda la nación rusa, el presidente Vladimir Putin confirmó que cuatro de los once hombres armados responsables del tiroteo habían sido detenidos: identificados como Dalerdzhon Mirzoyev, Saidakrami Murodali Rachabalizoda, Shamsidin Fariduni y Muhammadsobir Fayzov. Además, Putin señaló además que estos habían intentado escapar hacia Ucrania. 

Horas después del ataque armado en el Crocus City Hall, la organización Estado Islámico (EI) se atribuyó en su canal de Telegram la responsabilidad del asalto.

Kremlin se niega a reconocer autoría de yihadistas e insiste en culpar a Ucrania

El FSB (Servicio Federal de Seguridad Ruso) insiste que los sospechosos tenían “contactos” en Ucrania y planeaban huir a este país tras el ataque. Sin embargo, las autoridades rusas no ofrecieron ninguna prueba de este supuesto vínculo ni dieron detalles sobre su naturaleza.

Mijaílo Podoliak, asesor presidencial ucraniano, desmintió la acusación de Rusia y mediante la red social X escribió que “las versiones de los servicios especiales rusos sobre Ucrania son absolutamente insostenibles y absurdas“.

Mediante Telegram el Estado Islámico asumió el viernes la autoría del atentado y precisó que su comando había regresado “sano y salvo a su base”. El Kremlin ha evitado valorar  la reivindicación planteada por los yihadistas y ha optado por no comentar el estado en que los cuatro sospechosos comparecieron ante el juez: con marcas visibles de golpes e incluso semiinconscientes.

“Hay una investigación en curso, y es extremadamente erróneo por parte de la administración presidencial hacer comentarios sobre el curso de la investigación“, ha dicho el principal portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, para esquivar valoraciones sobre el ataque al Crocus Citiy Hall.

El gobierno ruso aún no ha ofrecido una versión oficial sobre quién podría estar detrás del ataque a la ciudadanía y canales rusos de propaganda aseguraron que la declaración de Estado Islámico era falsa. Por esta razón, ha intensificado el ataque hacía Ucrania con dos nuevos bombardeos ocurridos en la madrugada del domingo y uno la mañana del lunes.

En el primer ataque se han disparado 29 misiles y 28 drones bomba contra ocho provincias y en el segundo, ocurrido cuatro horas más tarde, las provincias occidentales de Lviv e Ivano Frankivsk han vuelto a recibir la llegada de misiles del invasor. El tercero, se ha registrado hace unos minutos un bombardeo relámpago lanzado por las fuerzas armadas rusas desplegadas en Crimea.

¿Por qué el Estado Islámico ve como enemigo a Rusia?

Estado Islámico tiene una violenta historia de ataques contra Rusia. En 2015, el grupo se atribuyó la responsabilidad de la explosión de un avión ruso que despegaba de Egipto en el que viajaban 224 personas. En 2022, la organización atacó la embajada rusa en Kabul y murieron dos diplomáticos rusos y cuatro afganos.

Entre los reclamos históricos de los islamistas contra el Kremlin figuran las guerras de Afganistán y Chechenia. Actualmente, la organización condena los ataques rusos contra sus fuerzas en territorio sirio y África Occidental.