Subsecretario Ricardo Montero: “Estamos llevando militares a la frontera con una inversión de 13 millones de dólares”
En Radio Pauta, el subsecretario de Defensa Nacional Ricardo Montero abordó dos de los desafíos relevantes que enfrenta el Gobierno: mantener las fronteras resguardas y disminuir el poder de fuego del crimen organizado a través de una fiscalización y control de armas efectivas que de acuerdo a la nueva ley, incorpora al Ejército a esta tarea.
Dentro de las tantas preocupaciones que ha generado la presencia y el crecimiento del crimen organizado en Chile, está la cantidad armas en su poder y el poco control que existe para poder requisarlas y desarmar el poder de fuego que ostentan estas organizaciones.
Por otra parte, el control fronterizo es fundamental para evitar la inmigración ilegal, sobre todo en la zona norte, donde se han realizado grandes inversiones para poder contar con mayor resguardo.
Subsecretario Ricardo Montero: “Estamos llevando militares a la frontera con una inversión de 13 millones de dólares”
En Pauta de Análisis, el subsecretario de Defensa conversó sobre el control de armas que lleva adelante el Gobierno y el rol que tendrá el Ejército a la hora de pesquisar las más de 760.000 armas legales que hay en el país y el despliegue que mantiene en los distintos pasos fronterizos.
La autoridad explicó que el control de armas “es una tarea que históricamente a nivel de coordinación ha estado a cargo del Ejército a través de la Dirección General de Movilización Nacional, y la fiscalización a cargo de Carabineros, a lo que después se sumó la PDI”.
“Lo que nosotros hicimos fue incorporar a militares al control de armas porque hoy en Chile hay cerca de 760.000 armas inscritas que es importante tenerlas controladas y cumpliendo los requisitos que establece la ley”, afirmó.
Al respecto, explicó que “muchas de esas armas se pierden, se prestan, se arriendan y por eso creemos que ese control tiene que ser más intenso porque está demostrado que un mayor control de armas implica directamente mayor seguridad”.
Sin embargo señaló con claridad que el que se incorpore al Ejército en el control de armas no implica otorgarles funciones policiales. “Los militares hacen funciones militares y los policías funciones policiales, por redundante que parezca”.
Lo novedoso en lo relativo al control del armas, “que tampoco es algo que inventamos de la nada” porque ya había participación de militares en el control de armas en los clubes de tiro, “es aumentar el control teniendo más gente en la calle fiscalizando armas y con los militares que harán control en los domicilios particulares”.
“Es un equipo especializado, focalizado en control de armas, coordinado con Carabineros y PDI, quienes van a perfilar a las personas y los lugares donde se realizarán esos controles”, dijo.
Lo anterior tiene relación con una de las metas que estableció el propio Presidente Boric: controlar el 10% de las armas de Chile. “En todas las regiones pasamos la meta, en algunos casos llegamos a un 40%, pero en Santiago, que concentra cerca del 40% de las armas, aún falta”.
Sobre el tipo de armas, y si alguna vez han sido inscritas, Montero explicó que se han tomado una serie de medidas para justamente tener más antecedentes al respecto. “Cuando llegamos, aumentamos un 70% la fiscalización de armas”.
“Todos los años se están incluyendo en torno a 4000 nuevas armas, lo que permite seguirlas de mejor forma”, detalló.
El subsecretario destacó que la compra de sistema de huella balística. “Es como el ADN de cada una de las armas, lo que permitirá hacer esta prueba de ADN al inicio. “El arma entra a Chile, se le hace la prueba, y sólo después se va a vender. Hoy tenemos ese sistema pero de manera análoga, en un papelito literalmente”.
El problema, en palabras de la autoridad es que “el Estado de Chile venía muy tarde en materia de seguridad, el Estado, no la izquierda ni la derecha, sino que el Estado”, recalcó.
En relación a los desafíos pendientes, sobre todo en el ingreso de armas desarmadas, que muchas veces, la mitad entraba por Punta Arenas y la otra mitad por Arica, dijo que “hemos reaccionado con nuevos escáner, con más funcionarios, con un trabajo integrado entre el Ejército, los armeros y la Aduana”.
“Si comparamos la región, no estamos tan expuestos pero claramente tiene que ser una prioridad porque no puede seguir aumentando, y si bien la ley es bien estricta en materia de armas, queremos que se cumpla a cabalidad”, aseveró.
Respecto de las armas que mantiene en su poder el crimen organizado y su efecto directo en la seguridad de la ciudadanía, Montero señaló que “hemos tomado medidas concretas. Si un revisa las últimas cifras , destruimos 13 mil armas hace tres años, 17 mil hace dos y 26 mil el año pasado.
“Es parte de una serie de medidas que hemos tomado con la ley del crimen organizado, ¿estamos conformes? no, por eso vamos a seguir implementando todas las herramientas que sean necesarias, pero vamos avanzando”, advirtió.
El Ejército y la frontera
Respecto de la presencia del Ejército en puntos neurálgicos de la frontera, señaló que “lo que hemos hecho es llevar el Estado a la frontera porque el Estado tenía una falencia en ese aspecto y estamos supliendo esa deficiencia y vamos a tener control 24/7 en los pasos fronterizos con Perú y Bolivia”.
Esta nueva ley sobre el control de armas si bien no le otorga mayores atribuciones a la FF.AA, “es parte de la coordinación sistémica de los desafíos que tenemos”.
“Estamos llevando los militares a la frontera con una inversión de 13 millones de dólares. Ya compramos 13 camionetas, 14 cuatrimotos, 7 buses, y esa inversión va a seguir”, señaló.
Revisa la entrevista completa acá: