Hotel O’Higgins: El proyecto que busca recuperar este icónico lugar de Viña del Mar
Según el jefe del proyecto, “se contrató una firma de arquitectura y construcción, que hace todos los estudios técnicos para ver la factibilidad de este proyecto, y a final de este año o mediados del próximo, tener el proyecto definitivo para luego partir el proceso de licitación, en el que se va a invitar a los distintos hoteleros a participar”.
Imposible pensar en los Ochenta y en el máximo apogeo del Festival de Viña del Mar y no pensar en el mítico Hotel O’Higgins, muestra de un Chile sobrio en el que escaseaba la ostentación.
En 1931, la municipalidad de Viña del Mar instruyó su construcción a los arquitectos, Vicente Collovich, Fernando Silva y Arnaldo Barisonse y en 1936 finalmente se inauguró el icónico hotel.
Por décadas fue el espacio donde alojaron los artistas más famosos que pisaron el suelo de la Quinta Vergara, y después de que en el 2020 se terminara la concesión que tenía, el hotel pasó a ser parte de las dependencias municipales.
En Ciudad Pauta, Francesco Pontarelli, consultor en marketing y especialista en mercados a cargo de realizar el estudio con el objetivo de definir el modelo negocio para el hotel, abordó cuáles son los planes futuros para este mítico lugar.
Al respecto, explicó que “aún no se ha licitado porque cuando se termina la concesión, después del estallido, y al mismo tiempo en pandemia, no es un buen momento para buscar directamente qué hacer con este hotel, que además venía en caída no solamente desde 2019-2020, sino que desde hace varios años, al ser un edificio antiguo, es un negocio en sí poco atractivo para poder hacerlo tal cual como hotel, habría que remodelar”.
En relación al estado actual de las instalaciones del hotel, Pontarelli explicó que “el estado de salud oficial está ahora en proceso, porque luego que definimos en qué queremos convertirlo comercialmente, pasa una segunda etapa que está en ejecución hoy, que es una revisión técnica de lo que se puede hacer y lo que no se puede hacer en un hotel”.
“De todas formas, a ojo de consumidor, puedes ver un hotel que está bien en mal estado, tiene un subsuelo, que son unas bodegas que están en muy mala condición, y la última concesionaria hizo algunas modificaciones, hay unas habitaciones que están en mejor estado, pero cuando tú ves el estado general de habitaciones, no cumple con ningún estándar hotelero actual”, acotó.
Además dijo que hoy “no da para un hotel de tres estrellas para arriba, pensando que el hotel icono de Viña debería pensar en una categoría bastante superior”.
Asimismo explicó que el hotel no es un edificio abandonado, la municipalidad desde que se termina la concesión, se utiliza el hotel como residencia sanitaria durante los años de pandemia, y luego ya empieza a ser un recinto municipal, con varias oficinas municipales, ya que Viña tiene un edificio consistorial bastante pequeño y antiguo”.
Además, afirmó que “otras partes son utilizadas como bodega, con los incendios que hubo este año y el año pasado, el municipio estuvo trabajando en recolección, entonces es una gran bodega de bidones de agua, de ropa, de colchones y todas las cosas que se estuvieron consiguiendo en esos momentos”.
La propuesta que pretende renovar el hotel
A un año de la entrega de este proyecto, el jefe de la consultoría explicó que el proyecto, en cada uno de sus pisos, se divide en zona 1, zona 2, zona 3 y zona 4.
La propuesta proyecta el primer piso como un espacio muy atractivo que tendría bar, espacios de visitas y el museo Festival. La zona 2 es es el espacio escogido para el Boulevard gastronómico. En la zona 3 se ubicaría el Centro de Convenciones, y finalmente la zona 4 sería el lugar para la sala de espectáculos y teatro.
En el segundo piso, la zona 1 contempla dos salas de ensayo y grabación, música, danza y artes escénicas. La zona 2 pretende ser un espacio de co-work creativo; la zona 3 incorpora 12 oficinas de espacio de co-work creativo y finalmente la zona 4 albergaría las oficinas de administración,
El tercer piso albergaría una primera zona de residencia con habitaciones pensadas para creativos e investigadores, además de cafetería, biblioteca y un estar grande.
En el cuarto y quinto piso, se concentran mayoritariamente las 80 habitaciones que ofrece el hotel, que si bien no son tantas, ubican al Hotel O´higgins en el cuarto lugar de la región en términos de capacidad hotelera.
Tal como ha sido pensado, desde este estudio, “el hotel tiene un entorno que se mezcla con otras cosas que son muy interesantes, como el teatro municipal que está a media cuadra, y hay un proyecto que tiene que ver con la reconstrucción del Mercado Municipal, ponerlo en valor en pleno centro de Viña y 200 metros de la Quinta Vergara”.
Francesco Pontarelli afirmó que el hotel “tiene que entrar dentro de un circuito de reactivación del centro de la ciudad, y dentro de estas lógicas de circuito hicimos una investigación de mercado, de qué cosas eran factibles y trabajamos con quienes pudieran estar interesados, como hoteleros y empresarios”.
En palabras del ingeniero comercial, “el primer piso del hotel tiene que tener un atractivo como polo turístico, y por lo tanto tiene una gran parte que es la parte que mira hacia la piscina, que recordamos es la piscina clásica del festival”.
Además, está la idea de utilizar “ese sector como polo gastronómico en un concepto de multirestaurantes, en el que existen distintas ofertas gastronómicas de un estándar nuevo y más moderno a lo que se acostumbra en Viña”.
Agregó que “este boulevard da directo al estero, que también contempla proyectos de remodelación, entonces todo queda conectado”, zona gastronómica, estero y piscina.
Dentro de las innovaciones, también esperan hacer el museo del Festival, y que incorpore aquellas prendas y objetos que han pasado a ser parte de la historia del Festival.
Lo que viene ahora según Pontarelli es “encontrar un concesionario que se haga cargo de todo esto, porque independiente que después el proyecto se subdivida para optimizar la administración, “tiene que haber una cabeza técnica, y eso se hace hoy día en el mundo esto de trabajo por placa, y cada placa finalmente tiene su lógica y tiene su inspiración”.
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