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Restricción Vehicular ¿Sirve realmente?

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Agencia Uno
POR María Alejandra Gallardo Contreras |

El investigador de la Universidad Católica, Luis Cifuentes explicó que la restricción vehicular a corto plazo tiene un efecto menor, pero sí a largo plazo si se diseña correctamente y se logra discriminar efectivamente que autos están contaminando más”.

El sábado 31 de agosto termina el período en que se aplica la restricción vehicular en la región Metropolitana,  cuyo nombre técnico es Plan de Gestión de Episodios Críticos, GEC, del ministerio del Medio Ambiente, que establece la prohibición diaria de dos dígitos para vehículos catalíticos con sello verde inscritos antes del primero de septiembre del 2011.

Cada año surgen preguntas en la población sobre la efectividad de mantener esta medida y las verdaderas implicancias que tiene en la disminución de la contaminación ambiental.

Restricción Vehicular ¿Sirve realmente?

En Ciudad Pauta el académico de la escuela de Ingeniería de la Universidad Católica, e investigador del Centro de Cambio Global de la misma casa de estudios,  Luis Cifuentes explicó las consecuencias de la restricción vehicular, la realidad de la contaminación en Santiago y en el resto del país, y las medidas que hay que adoptar para avanzar hacia un  aire de mejor calidad.

Al respecto, el experto afirmó que “los combustibles fósiles son responsables de la mayoría de la contaminación local que es la contaminación que sentimos, es decir,  el monóxido de carbono, el nox y la materia particular, pero también por la contaminación global, o sea, el co2 que es la mayor preocupación hoy día en Chile”.

Sobre la calidad del aire en Santiago, Cifuentes indicó que “es mucho mejor que antes. Se ha reducido tres veces la contaminación que teníamos el año 90 y además Chile tiene uno de los registros de contaminación por partículas finas más largo del mundo, porque afortunadamente lo estamos midiendo desde el año 89″.

“Porque estas partículas finas que han resultado ser las más nocivas se midieron por un acierto cuando se hizo la primera red de monitoreo en Chile y se puso un medidor de estas partículas finas”. explicó.

Asimismo dijo que “yo he estado estudiando estas partículas finas desde el año 92 cuando estaba haciendo mi doctorado y ya se sabía que eran malas, pero hoy día sabemos infinitamente más y sabemos cuán malas son porque  primero tienen mortalidad prematura, incluso hay efectos en la placenta. Además hay efectos de alzheimer y demencia que se están investigando recién. Ya se sabe que no hay ninguna función fisiológica que no se vea afectada por la contaminación“.

“Estas partículas finas se inhalan y se distribuyen sistémicamente  hasta en la materia gris del cerebro, pero la buena noticia es que las condiciones del aire en santiago son mucho mejores que hace 20 años atrás, pero son parecidas desde hace 10 años atrás  porque cada vez las las medidas son más difíciles”, indicó.

Cifuentes explicó que “las primeras medidas fueron eliminar la leña; eliminar las micros que no tenía ningún control y hoy estamos con estándares a nivel de automóviles nuevos similares a los de Europa, vamos cuatro años aproximadamente detrás de Europa”.

En relación al origen de la restricción vehicular detalló que “partió verdaderamente el año 92  cuando se impuso sobre los automóviles no catalíticos, y se ofreció la alternativa de que los automóviles con convertidor catalítico que cumplían con la primera norma euro 1, pudieran estar exentos de restricción y eso produjo una renovación muy rápida del parque  automotriz”.

Pero al mismo tiempo de la renovación, afirmó que “parte de ese parque migró a otras ciudades  fuera de Santiago y a la periferia por términos de costo“.

Respecto de la efectividad de la medida, el académico dijo que a corto plazo no lo es, pero sí a largo plazo.

A corto plazo “produce una reducción bastante pequeña de aproximadamente un 5% o a  lo más un 9% de reducción en lugar del 20% de esos autos que deberían parar, pero no paran todos y son cada vez una una fracción mucho más baja del total del parque automotriz”, acotó.

A largo plazo explicó que “si se diseña correctamente si puede ser un gran aporte ya que por ejemplo “los vehículos diesel del 2014  contaminan lo mismo que los vehículos de gasolina del 2005, entonces hay un problema (…) y hoy día  se puede perfectamente discriminar por vehículo y lograr mayor efectividad”.

Revisa la entrevista completa acá: