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Dueño de la ex Fuente Alemana: “El Estado se comporta como delincuente”

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POR María Alejandra Gallardo Contreras |

Carlos Siri, dueño de la Antigua Fuente, ex Fuente Alemana, presentó una querella contra el Estado por los daños sufridos durante el estallido. Afirmó que “el Estado trata de ganar tiempo, cansar al adversario y que no pase nada”.

Una de las consecuencias del estallido social fue el deterioro del sector de Plaza Italia, lo que afectó directamente al comercio aledaño al lugar que aún no logra reponerse del todo, pagar las deudas y reconquistar al público habitual al que estaban acostumbrados.

Dueño de la ex Fuente Alemana: “El Estado se comporta como delincuente”

En Ciudad Pauta, Carlos Siri dueño de la Antigua Fuente, ex Fuente Alemana, mítica fuente de soda ubicada en la Alameda a pasos de la Plaza Italia, conversó sobre lo que significó para los emprendedores del sector la ola de violencia aparejada con el estallido y los nuevos proyectos que tiene en carpeta.

Sobre la nueva sucursal  de la Antigua Fuente que abrirá en MUT explicó que “va bastante bien. Tenemos como meta abrir esta semana porque ya estamos en los últimos retoques. Para nosotros ha sido un desafío importante, porque este proyecto nace de nuestra necesidad de tener otro lugar para trabajar a raíz de todo lo que pasó en Plaza Italia”.

En relación al ambiente que actualmente existe en Plaza Italia, indicó que “está bien, ha estado muy tranquilo, y eso se agradece, porque eso ha favorecido que la gente empiece a volver. El barrio no está como era antes, en términos comerciales, porque mucho local no volvió a abrir”.

“Hay mucho local que cerró y nunca más volvió a abrir, otros que no aguantaron y quebraron, pero lo importante es que ya la gente puede ir porque el lugar está tranquilo,  más limpio y eso se le agradece a la Gobernación, sobre todo el tema de los rayados por Alameda, ahí se hizo un proyecto importante el año pasado, con mucha actividad, y todo eso ha ido revitalizando la zona aunque falta porque en términos reales de venta, estamos en un 70% de lo que hacíamos, y en general eso le pasa a todos“, afirmó.

Acerca de algunos incidentes que aún se producen en el sector, Siri dijo que “de repente hay algún grupo que va un día viernes y trata de hacer algo, pero son muy poquitos, así que  Carabineros actúa rápidamente y lo saca”, pero sí alertó sobre algunos incidentes que ocurren los viernes por la noche, a la altura del GAM, porque además esa zona es oscura, no hay iluminación pública”.

Respecto de la columna de opinión que publicó en el diario La Tercera,  junto a Juan Pablo Swett, presidente de la Multigremial Nacional, explicó que “fue una respuesta a los comentarios de los diputados Winter, Ibañez y Orsini que afirmaron que los daños que sufrieron los emprendedores fueron daños colaterales y marginales”.

“A mi esto me huele a blanqueo. A blanquear toda esta violencia que se dio. He visto gente enojada, pero nunca he visto gente enojada destruyendo”, además afirmó que “estamos hablando de prácticamente un año entre que no vendíamos nada o estabamos cerrado. No fue fácil ni para nosotros ni para nuestro equipo. Nosotros perdimos todos los ahorros que teníamos y también acuérdate que había que echar a andar las cosas y después igual no se vendía”, dijo.

En relación a la cortina de acero que aún recubre la Antigua Fuente, su dueño explicó que “aun no me atrevo a sacarlo y no lo voy a hacer hasta que alguien me diga que lo haga, porque quizás no me atreva nunca, porque aquí la máxima de todo esto es que al final uno está solo. El Estado no estuvo como debiera haber estado, por lo tanto aquí al final terminamos defendiéndonos solos“.

Asimismo se refirió a la querella que como dueños de la Antigua Fuente ingresaron acusando al estado de una falta de servicio, solicitando reparación del perjuicio patrimonial y moral a propósito de toda esa violencia que recibieron”.

“Esto va a ser lento. Quizás de aquí a seis años más podemos saber algo.Y es impresentable, porque resulta que el Estado debería ser el mayor interesado en salir de esto rápido, pero se comporta como un delincuente también. Trata de sacar tiempo, cansar al adversario y que aquí no pase nada. Cuando el estado se supone que es el que nos tiene que proteger, aunque él sea acusado, pero él debería actuar con la mayor celeridad y con toda la moral que corresponde a casos así”, acotó el empresario gastronómico.

 

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