Playa Serena: Un edificio preparado para resistir a los Tsunamis
El edificio Playa Serena contempla 12 pisos más una terraza en el piso 13, y es la primera construcción del borde costero en La Serena cuyo diseño está pensado para mitigar riesgos asociados a eventos naturales.
Chile tiene una costa de 6435 kilómetros, y en ese borde costero se ubica un tercio de las comunas de nuestro país, es decir, aproximadamente 5,5 millones de personas viven cerca del mar.
En el contexto del cambio climático y el aumento del nivel del mar, las ciudades chilenas que están en el borde costero debiesen estar revisando su forma de desarrollarse.
Playa Serena: Un edificio preparado para resistir a los Tsunamis
En Ciudad Pauta, el arquitecto y director ejecutivo de la Inmobiliaria Norte Verde, Francisco Bascuñán explicó el proyecto que están desarrollando en La Serena y se refirió a las medidas en construcción que han aplicado para resistir en buenas condiciones a los tsunamis.
Bascuñán explicó que “del tsunami en Coquimbo en el 2018, sacamos alguna experiencia, por lo que de acuerdo al diseño de cálculo del edificio que nosotros planteamos, tiene que prever una marejada o tsunami, y para eso lo que se hace es dejar que el agua pase, es decir, no ponerle oposición al agua”.
Agregó que este diseño “requiere algunas cosas adicionales. La parte frontal de este edificio lleva una viga grande y profunda que evita que el agua se meta por debajo del edificio”.
“Recuerda que en la Avenida del Mar, los edificios no tienen subterráneos y los estacionamientos están a nivel de suelo porque la napa es bajita. Por eso la viga anti-tsunami evita que el agua se pueda meter por debajo y generar algún volcamiento”, sostuvo.
Francisco Bascuñán se refirió a las medidas que se pueden tomar para mitigar los tsunamis. “Muchas tienen que ver con las instalaciones; por ejemplo nosotros descubrimos que los generadores de emergencia tenemos que llevarlos a la parte de arriba, porque en caso de emergencia, están a salvo del agua”.
Además destacó la evacuación vertical, y explicó que “en La Serena para llegar a una zona de seguridad tienes que caminar casi 3 kilómetros, y la gente que está en la playa tiene pocas posibilidades de llegar a una zona caminando o corriendo; por eso la evacuación vertical es una buena solución porque permite que las personas suban a los edificios y se proteja ahí”.
“La idea es que los edificios cuenten con un botón rojo de emergencia a todo evento, que permita abrir las puertas principales del edificio y que todo el mundo sepa que existe”, dijo.
Asimismo explicó que en general los edificios de La Serena “están hechos con la antigua norma de cálculo, son edificios bien pensados y calculados. Ninguno de ellos se ha venido abajo ni con un terremoto ni con un tsunami”.
En la misma línea explicó que La Serena tiene solo tres calles de acometida; Francisco de Aguirre, la calle Cuatro Esquinas y la calle Peñuelas, entonces toda la gente de la playa en un caso de emergencia, pueden evacuar solo por tres calles. De ahí la importancia de un plan de evacuación vertical”.
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