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Sistemas de retención infantil: pieza clave para evitar la muerte de menores en accidentes vehiculares

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POR María Alejandra Gallardo Contreras |

Sergio Rendich, presidente del Comité de Seguridad Niño Pasajero de la Sociedad Chilena de Pediatría indicó que “no es necesario una silla de las más caras. Hay de todos los precios”, y agregó que “lo importante es que un SRI bien utilizado puede salvar la vida de un niño y evitar la discapacidad en caso de accidente”.

Más de la mitad de los menores que han muerto en accidentes de tránsito en lo que va del 2024,  no iban en silla de seguridad como lo establece la ley.

Los expertos en esta materia han levantado las alertas ya que el uso de sistemas de retención infantil ha retrocedido, y pareciera ser que los padres desconocen que los dispositivos tienen fecha de vencimiento y por lo tanto, hay que cambiarlos cada cierto tiempo.

Sistemas de retención infantil: pieza clave para evitar la muerte de menores en accidentes vehiculares

En Ciudad Pauta, conversamos con el médico Sergio Rendich, presidente del Comité de Seguridad Niño Pasajero de la Sociedad Chilena de Pediatría para abordar esta problemática y las medidas que urge implementar para proteger a los menores.

Rendich explicó que la ley es clara al respecto. “En Chile obliga a los automóviles particulares a usar sistemas de retención infantil (SRI) con niños menores de 9 años o que midan hasta un metro 35 y pesen 33 kilos; es obligación del conductor cumplir esta ley y si no lo hace, es una falta gravísima que implica suspensión de licencia y una multa económica”.

“Pero más allá de no cumplir la ley, lo que debemos transmitir es que esto es para proteger a nuestros niños; no es solamente una ley, es una forma de proteger la vida de los niños”, indicó.

El especialista agregó que “tenemos una ley que obliga a que todos nuestros sistemas de retención infantil estén bajo normativa de Naciones Unidas o normativa de Estados Unidos y es una garantía porque sabemos que los sistemas de retención infantil que se comercian en Chile y se distribuyen, están probados por dos robustas normativas”.

Respecto de los tipos de SRI, Rendich explicó que “hay sistemas son para recién nacidos y bebés que siempre miran hacia atrás, que se caracterizan por tener un asa donde la mamá los puede agarrar; a continuación siguen los SRI convertibles, que siguen siendo integrales y tienen arnés y se pueden usar mirando hacia atrás y posteriormente al llegar al límite de peso y talla del niño pueden seguir usándolos mirando hacia adelante”.

“Luego vienen las butacas o alzadores con respaldo que se usan sobre los cinco años hasta los siete u ocho años y a continuación vienen los alzadores sin respaldo que por ley  deben usar los niños hasta los nueve años, pero por mejores prácticas y para protegerlos es hasta que midan 1.40 o 1.50 cm y se puedan sentar en el asiento de su auto y le quede bien posicionado el cinturón de seguridad”, señaló.

Lo grave, en palabras de Rendich, es que a la fecha “llevamos 18 niños menores de nueve años, fallecidos, y de esos 18, 16 viajaban sin sistema de retención infantil”.

El médico explicó que “el problema es es que los padres no tienen percepción de riesgo frente a la brusca desaceleración, y no tenemos porque culturalmente  no somos un país que tenga mucha historia en este punto a diferencia de los países escandinavos que tienen más de 50 años de historia en seguridad de niños pasajeros”.

Agregó que “la percepción de riesgo se forma en el primer viaje en auto, pero no sabemos cuántos niños que se van de hospitales públicos en auto se van en brazos o en un sistema de retención infantil. Hace 5 o 6 años hicimos una medición e un hospital y de 5000 altas, la mitad se fue en auto”.

Por eso, relevó la necesidad  que se genere percepción de riesgo en ese primer viaje. “Y en los hospitales no se ha gestionado esto con la fuerza y transversalidad que uno quisiera, porque la responsabilidad termina siendo de los padres y finalmente del piloto”.

Revisa la entrevista completa acá: