Librería Azafrán: La nueva apuesta en el Mut que privilegia la experiencia lectora
Librería Azafrán abrió sus puertas en el MUT hace una semana y espera convertirse en un espacio de encuentro lector. La apuesta editorial incluye una galería de ilustraciones que ofrezca a los visitantes, una experiencia diferente y enriquecedora.
Los últimos días, algunas cartas al director han dejado de manifiesto el peligro en que se encuentran las librerías de barrio, pese al rol fundamental que cumplen en el espacio cultural.
Dicho debate, además, se da justo cuando la OCDE hace público el informe sobre competencia lectora y habilidades matemáticas que dice que el 44% de los chilenos poseen competencias insuficientes en estas áreas.
En Ciudad Pauta, estuvieron las socias y fundadoras de la librería Azafrán, Josefina Muñoz y Mai Canales, que acaban de abrir en el MUT y que aspira a ser un espacio que permita la experiencia lectora a través de clubes de lectura, talleres de escritura, cuenta cuentos y diálogos con los autores, entre otras actividades.
Librería Azafrán: La nueva apuesta en el Mut que privilegia la experiencia lectora
“Azafrán partió como una editorial hace seis años, con la idea de poder dejar un registro de historias y memorias familiares, historias de empresas, la historia del abuelo, y nos fuimos abriendo camino hacia literatura infantil, novelas, poesía y hoy hacemos hartos libros de ensayo y no ficción”, señalaron.
Explicaron que si bien el catálogo de la librería “está enfocado en mucha literatura infantil, también nos preocupamos de seleccionar un muy buen catálogo en narrativa chilena y latinoamericana, además de editoriales independientes, justamente para dar a conocer las voces nuevas”.
En relación a la audacia de abrir una librería en un espacio físico en tiempos donde la compra online va ganando la batalla, indicaron que “necesitábamos un espacio para los autores, para el encuentro, para los lanzamientos, y nos empezó a faltar una casa editorial donde hacer todas estas actividades, y ahí empezó el sueño“.
“Postulamos al fondo del libro, lo ganamos a principio de año para hacer una librería, y abrimos las puertas la semana pasada”, explicaron.
El espacio físico, explicaron es muy relevante para lograr los objetivos que se pusieron. “Lo que hicimos desde la arquitectura, era tener espacios donde sentarse y poder abrir los libros, hojearlos; incluso nosotros le sacamos los plásticos porque la idea es que puedan ver las ilustraciones y lo que proponemos desde la editorial”
La ventaja de abrir Azafrán en el MUT es que “este mercado urbano es un polo en torno a los oficios, al emprendimiento y al encuentro, por lo que potencian mucho las actividades; la idea es hacer de este espacio público una plaza pública y la librería quiere aportar en eso”.
Pese a que hay varias librerías de barrio en el dilema entre permanecer abiertas y cerrar, las dueñas de Azafrán explicaron que el espacio físico permite “conectar con las personas y escucharnos; incluso se están dando clubes de lectura donde las personas se reúnen a leer“.
“Hay una necesidad de desconexión también de lo digital y de poder conectar realmente con el objeto, con la persona, con lo análogo. Es como con el recorrido de las páginas que es distinto al ‘escroleo’. Nosotras en el MUT estamos al lado del jardín lo que lo hace sumamente atractivo en el sentido de que puedes comprar un libro y leer en el Jardín”, señalaron.
Revisa la entrevista completa acá: