El valor de mercado de La Roja la deja muy lejos de pelear la Copa América
El hincha demanda mejores resultados al equipo de Rueda, sin embargo, la valorización actual de los jugadores chilenos es un tercio menos que hace tres años.
Que no puede jugar como Jorge Sampaoli. Que hasta Juan Antonio Pizzi hacía rendir mejor a los jugadores. Que Marcelo Bielsa agarró este equipo cuando no eran nadie y los llevó a competir con los grandes del mundo. Esas son algunas de las críticas que se hacen comunes en los hinchas de la Selección justo antes de la Copa América 2019.
La Roja defiende el título que ganó en 2015 —y volvió a ganar en 2016— en tierras brasileñas. Y aunque existe la ilusión de lograr el tricampeonato, los resultados de los amistosos no acompañan las expectativas de repetir otro glorioso certamen. ¿Hasta donde le podemos exigir a este equipo?
Notable devaluación del equipo
En 12 partidos, el equipo dirigido por Reinaldo Rueda consiguió cuatro victorias, cuatro empates y cuatro derrotas. Este rendimiento de 44% lo deja en el lodazal tras las críticas de los periodistas de deportes y de la hinchada, que ve como el colombiano no parece capaz de reeditar los éxitos de sus antecesores.
Sin embargo, no parece justa la comparación con los planteles que dirigieron Sampaoli y Pizzi. Solo considerando la edad de la “generación dorada”, hoy todos superan los 30 años, mientras entre 2015 y 2016 promediaron 27 años, edad en que generalmente los futbolistas viven su mejor rendimiento.
Prueba de ello es la valoración de mercado del equipo. Si en 2015 el once que más jugó de La Roja costaba US$167 millones, según el sitio especializado Transfermarkt, hoy llega a US$118,2 millones, es decir, casi un tercio menos.
Comparativa de los equipos campeones de la Copa América y el probable once de Chile para la edición 2019:
Muy lejos de las potencias del continente
Más se agrava la situación cuando se comparan los valores de los equipos más caros que podrían alinear en Sudamérica: el de Brasil llega a los US$898,4 millones; el de Argentina, US$648,1 millones; el de Uruguay, US$440,7 millones, y el de Colombia, US$319,2 millones. Chile aparece en un muy lejano quinto lugar, cuyo equipo titular más caro llega a los US$132,2 millones.
De hecho, se encuentra más cerca de quienes le siguen en la lista: el once más caro de Japón (que jugará como invitado la Copa América) se valoriza en US$94,6 millones, y el de Paraguay, en US$81,7 millones.
En este ejercicio se tomaron los jugadores más caros por posición, dejando de lado aquellos que son más valorados que otros en otros puestos. Eso no implica que sean las posiciones ideales de cada uno, pero sí donde podrían actuar según su historial. También se incluyen jugadores que podrían haber dejado de participar en su selección.
Comparativa de los equipos titulares más caros de los equipos participantes de la Copa América 2019:
Veteranos fuera y escaso recambio
Pero existe otro problema: claro está que los equipos no valen lo que juegan ni que los entrenadores paran en cancha a sus jugadores más caros, pero en Chile se da el especial caso de que tiene valiosos jugadores excluidos de las nóminas.
Claudio Bravo (US$2,8 millones), ausente de todas las citaciones -sea por decisión de Reinaldo Rueda o por lesión-, es el arquero más valioso de Chile, y Eduardo Vargas (US$ 5,1 millones), relegado desde hace varios meses, está entre los 10 jugadores más valiosos del país.
Ese es un fenómeno bastante atípico en la región. El prescindir de los jugadores mejor valorados se puede explicar por el proceso de renovación, pero en equipos que están en un proceso similar (Uruguay o Venezuela) esto no sucede. Solo se podría destacar el caso de Sergio Agüero (US$84,8 millones), ausente en las últimas nóminas, aunque de valorización más baja que los otros delanteros argentinos.
¿Por qué? Pese a ser jugadores notablemente más jóvenes, los llamados a ser el recambio no tienen ni el nivel de la “generación dorada” ni se pueden comparar con los de potencias continentales de la misma edad.
El jugador más valioso de Chile menor de 25 años es Guillermo Maripán (US$8,5 millones). Al buscar ese mismo ítem en los otros equipos candidatos al título, la diferencia es abismal:
Argentina: Leandro Paredes – US$45,2 millones
Brasil: Gabriel Jesús y Vinicius Junior – US$79,1 millones
Colombia: Davinson Sánchez – US$50,9 millones
Paraguay: Antonio Sanabria – US$11,3 millones
Uruguay: José María Giménez – US$79,1 millones
Japón: Shoya Nakajima – US$20,3 millones
Esto también explica el bajo valor de la plantilla nacional, puesto que los jugadores jóvenes están mejor valorizados. De hecho, si Alexis Sánchez no estuviera en la Copa América, el equipo chileno valdría casi la mitad menos.
Mire la presentación de este tema en Primera Pauta: