El rodeo: la tradición que apasiona como práctica deportiva

En el país hay 42 asociaciones y 300 clubes. Solo el año pasado se corrieron 536 rodeos, Y aunque la actividad tiene gran arraigo rural, hay críticas por el maltrato animal.

“Para nosotros, el rodeo es una tradición que se ha transformado en una práctica deportiva. Es una tradición que viene desde los tiempos de la colonia. La verdad que sí lo consideramos un deporte, que cada día tiene más adeptos”, explica el gerente deportivo de la Federación Deportiva Nacional del Rodeo Chileno (Ferochi), Felipe Soto.

El rodeo es uno de los deportes más populares de Chile, y su afición se concentra principalmente en a zona centro y sur del país, en comunas de corte agrícola o rural. La estructura deportiva en la Ferochi está compuesta por 10 mil personas con carnet activo y, de acuerdo con sus estadísticas, mueve a más de 100 mil personas en el país.

Hay un flujo permanente de competidores agrupados en 42 asociaciones y 300 clubes. En 2018 se disputaron 536 rodeos. La cita máxima de cada año es el Campeonato Nacional, conocido como el Champion de Chile, que se realiza a inicios de abril. Clasifican los mejores jinetes de toda la temporada, quienes agrupados en 31 colleras (o duplas) representativas de las zonas norte, centro y sur del país disputan el máximo trofeo en la medialuna de Rancagua.

También están los rodeos clasificatorios, zonales, y de primera y segunda categoría. Estos rodeos recogen a los mejores jinetes de cada zona de Chile y, posteriormente, llegan a los distintos clasificatorios. Luego de ello, están los repechajes y el rodeo zonal centro en San Clemente el próximo 12 y 13 de octubre. En este campeonato participan las colleras que tengan puntajes mínimos en rodeos de cada zona. Lo primordial es ser finalista de un rodeo en alguna zona.

“Hay competencias desde Arica a Magallanes. En cada clasificatoria son 100 colleras por torneo. Este deporte mueve a muchísima gente y genera más de 100 mil fuentes laborales. En cuanto al Champion es una fiesta del rodeo nacional, donde participa un volumen importante de gente”, agregó Soto. 

Comienzan los problemas

En los últimos años, distintas organizaciones animalistas -como Animal Libre o Elige Veganismo- han comenzado a realizar protestas, funas y manifestaciones en contra de esta práctica. Hace algunas semanas, activistas de estas agrupaciones se manifestaron en contra del rodeo en Coquimbo, ingresando a la medialuna con mensajes y carteles en contra de los participantes.

En Curacaví, el pasado 8 de septiembre, un grupo quemó parte de la medialuna de la localidad para impedir su apertura para las Fiestas Patrias. “No más rodeos. Empatía, conciencia y reacción”, fueron los panfletos lanzados en el recinto. El alcalde de la comuna, Juan Pablo Barros, anunció acciones legales en contra de quienes resulten responsables.

“Es un tema complejo, porque es una manifestación de rechazo de una forma que no compartimos, ya que estos recintos no solo albergan estos tipos de eventos, sino que participan muchas más personas. Por lo general, los clubes organizadores de estas fechas están atentos a tomar resguardos y han contratado guardias privados, para velar por la seguridad de los asistentes”, explica Soto.

Según la Ferochi, quienes participan del rodeo hacen un trabajo conjunto que busca el bienestar animal. “Sus participantes y el huaso chileno se preocupan diariamente en la medialuna por el cuidado de caballos y novillos, y son los principales defensores de los animales. Junto con ello, existe un manual de bienestar animal, personas capacitadas en manejo animal y un reglamento muy estricto que vela por el bienestar de los animales que participan del rodeo”, aseguran en su sitio web.