Los cuatro equipos que se juegan su paso al Super Bowl
Una remontada histórica. Un favorito eliminado. Un MVP que podría revalidar su título. Este fin de semana se juegan las finales de conferencia: Titans vs Chiefs y Green Bay vs 49ers.
Intensidad. Lucha. Último segundo. Todos conceptos que resumen el desarrollo de los duelos más trascendentales del fútbol americano, previos a la edición número 54 del Super Bowl, que se jugará el 2 de febrero próximo en Miami, en el Hard Rock Stadium.
El campeón vigente (Patriots) no llegó. Tampoco lo hizo aquel equipo que tenía asegurado ser el mejor entre la Conferencia Nacional y la Conferenica Americana (Ravens). Y a pesar de contar con números que vuelven aún más positiva su temporada, la clasificación de los Kansas City Chiefs y Tennessee Titans (AFC), y de los Green Bay Packers junto con los San Francisco 49ers (NFC), no estuvo lejos de ser sorpresiva.
En reiteradas ocasiones se han enfrentado, pero ahora los duelos tendrán un componente especial: añadir un nuevo anillo a la colección.
Con la clasificación ya definida, esta edición bien podría ser un recuerdo de lo que fue la primera vez que se disputó el campeonato válido por ser el mejor de los mejores, en 1967. En esa instancia, Packers se impusieron por 35–10 sobre los Chiefs.
No obstante, el próximo 2 de febrero, desde las 20:30 horas, también podría ser un hito que rompa con lo conocido. Con el cruce final a la espera de lo que suceda este domingo, en PAUTA te mostramos cuáles son las credenciales que emplearon cada una de las cuatro franquicias de la NFL para llegar a dar el golpe final.
CONFERENCIA AMERICANA
Quedaron en el camino los campeones vigentes y el equipo con mejor récord. Sin los Patriots, con un Tom Brady lejos de pasar por su mejor temporada, y los Ravens de Baltimore irreconocibles en el último juego de playoffs, dos equipos sin registros particularmente altos serán quienes disputarán uno de los pases a la final del evento deportivo más grande en Estados Unidos.
En el Arrowhead Stadium, se medirán quienes perdieron sus últimos duelos respectivos la última vez que tuvieron la posibilidad de pelear por el campeonato: los Kansas City Chiefs y Tennessee Titans, que suman 13 enfrentamientos por la corona de la Conferencia Americana.
Habrá dos panoramas distintos. Para los Chiefs es el segundo año consecutivo que llegan a esta instancia, mientras que los Titanes rompen con 17 años sin clasificar. Los equipos dirigidos por Andy Reid y Mike Vrabel, respectivamente, se enfrentarán el domingo 19 de enero en busca de un pase casi tan valioso como un touchdown a cinco segundo del final de un partido.
La sorpresa en esta conferencia, sin embargo, la dieron los comandados por Vrabel. En la disputa por llegar a la final se medían contra los Ravens y un Lamar Jackson (quarterback) que vivía su mejor temporada desde que llegó a la NFL, por medio del draft en 2018.
A pesar que los de Baltimore terminaron con 530 yadas de ofensiva contra 300 de los Titans, y cinco minutos más de tiempo de posesión, no fue suficiente para contrarrestar sus propios errores: un fumble (jugador en ofensiva que suelta el balón cuando todavía está en juego) y cuatro conversiones en el cuarto tiempo no logradas. Esto, sumado con la planificación ofensiva, permitieron a Tennessee inclinar el marcador 28-12 a su favor.
En el caso de los Chiefs, remontaron una desventaja de 24 puntos contra los Houston Texans (la mayor en la historia del deporte) para terminar con un 51-31 que les permitió dar una alegría a Reid, que ha desempeñado 21 de sus 61 años como entrenador jefe en el fútbol americano.
Uno de los principales responsables de esta victoria fue el mariscal de campo Patrick Mahomes. El MVP de la liga completó cuatro pases de touchdown para sobreponerse y dejar atrás el mal sabor del año pasado, luego de haber caido por 37-31 ante los Patriots, que los dejó sin posibilidades de pelear el SuperBowl.
En la décima semana de la competencia, ambos se enfrentaron con un marcador que terminó 35-32 a favor de los Titanes, y en el cual combinaron más de 900 yardas en ofensiva.
Cinco cambios y nueve puntos abajo, Tennessee aprovechó un pase anotador de Ryan Tannehill y un desperdicio de gol de campo por parte de los Chiefs que bien podría haber declarado un empate cuando el reloj ya llegaba a su tiempo límite.
CONFERENCIA NACIONAL
Uno llega luego de tres años y el otro luego de seis. Uno ha jugado nueve de estos duelos de visita (con seis triunfos), mientras que el otro solo ha alcanzado la gloria en cuatro ocasiones. Green Bay Packers y San Francisco 49ers cerrarán la jornada de domingo en el Levi’s Stadium, en otro de los juegos en que los protagonistas llegan luego de perder su último juego de campeonato.
Esta será la octava vez que ambos se midan. La cuenta indica que la serie es favorable para los de Green Bay, que ganó cuatro duelos, contra tres de los Niners, el último de ellos en 2002.
El historial de esta rivalidad está plagado de marcadores cerrados. En 1999 San Francisco venció por 30-27, y 15 años después, al final del último cuarto, los números seguían siendo favorables para los 49ers, esta vez por un 23-20. Desde que comenzaron a enfrentarse por playoffs en 1996, nunca han terminado un partido con menos de 10 puntos.
En lo que fue el primer partido de postemporada para San Francisco en seis años, la tarea fue compleja. Contra los Minnesota Vikings debieron aprovechar las pérdidas de balón, y el papel fundamental que jugó Jimmy Garoppolo (QB) con un pase de touchdown en su primera ofensiva como titular en playoffs.
No obstante, luego de que uno de los pases del quarterback fuera interceptado cerca del final del primer tiempo, la estrategia de Kyle Shanahan (entrenador jefe) fue clara: no tomar riesgos y apostar a la asociación del mariscal con Tevin Coleman y Raheem Mostert (ambos running backs).
La defensa de San Francisco no dio tregua a Minnesota, y el ataque fue trascendental para terminar con un global que anulara a Kirk Cousins, quien solo pudo completar 13 de 19 envíos para 89 yardas, con un touchdown y una intercepción: una pesadilla para el mariscal de campo que, además, fue capturado tres veces.
El marcador final fue de 27-10.
Algo más cerrado fueron los números qe le permitieron a Green Bay llegar a la final de la conferencia. Con Aaron Rodgers como el encargado de comenzar las jugadas, de las cuales ocho fueron pases completos con Davante Adams, lograron 160 yardas y dos anotaciones. Más que una carta simple, fue un acto de supervivencia en el último cuarto.
Una defensa bien posicionada que pudo controlar los intentos de remontada por parte de los Seahawks, impidió que Russell Wilson (QB) pusiera a su equipo a levantar el 21-3 con que se fueron al descanso. Estas acciones permiten que, por tercera vez en seis años, los Packers se posicionen en la pelea por llegar al Supertazón.