Liverpool: el rey que recuperó su corona
Son los monarcas vigentes de Europa, y luego de la victoria 2-1 del Chelsea sobre Manchester City, el elenco de Jürgen Klopp lo logró: por primera vez son campeones de la Premier League.
Este jueves 25 de junio la portada es una. El tuit del Liverpool lo resume:
WE’RE PREMIER LEAGUE CHAMPIONS!! 🏆 pic.twitter.com/qX7Duxoslm
— Liverpool FC (at 🏠) (@LFC) June 25, 2020
Pero hubo un antes. Uno de tres décadas.
El antes
Bruce Grobbelaar estira su mano derecha para indicar a sus compañeros que la clave está en el ataque por esa banda. Gary Ablett entiende de inmediato: hay que aprovechar los espacios que deja el rival, pues la gloria está a menos de 35 segundos. El complemento lo encontraban en Ian Rush, John Barnes, Peter Beardsley y Alan Hansen, quienes entraron desde el comienzo a la cancha.
Y celebran. Gloriosos. El conjunto de la tierra de The Beatles lo hace de nuevo. En un banco, alzando las manos a las estrellas, la siempre intensa batuta de Kenny Dalglish, entrenador y artífice del título logrado el 28 de abril de 1990.
La Primera División Inglesa tendría grabado en su historial lo siguiente: Liverpool, campeón 1989-1990.
De aquello pasaron ya 30 años.
El equipo que bajó del trono
Hasta 1992, el equipo con mayor cantidad de títulos en Inglaterra era el Liverpool. Sus 18 trofeos eclipsaban los 10 de su escolta de entonces: Arsenal. Más atrás, el Everton, con nueve, completaba el podio de los más ganadores.
Hoy parece difícil creer que otro de los históricos clubes, y clásico rival ante el Liverpool, Manchester United, contara solo con siete títulos hasta ese año. ¿Qué pasó desde 1967 hasta la fecha, que el exequipo de Alexis Sánchez lo ganó todo? Dos respuestas: 1992 y Alex Ferguson.
Mientras que el cambio de nombre a Premier League fue letal para el hoy equipo de Klopp, el United alcanzó su mejor nivel de la mano de uno de los mejores técnicos en la historia del fútbol inglés: 13 copas, alcanzando los 20 títulos en la máxima competencia británica.
Y así quedó: Manchester United en primer lugar histórico, y el Liverpool, el monarca imbatible por décadas, en un segundo puesto sin ninguna copa de Premier League en sus vitrinas.
No es que el Liverpool haya dejado de luchar. De hecho, de las cuatro ocasiones que cerró el año como el segundo mejor de la Premier, en las últimas dos la copa se la arrebató el Manchester City (por dos puntos en 2014 con Manuel Pellegrini y una unidad en 2019 con Pep Guardiola).
El 2020 rojo
Los 30 años, sin embargo, no han sido de sequía absoluta. En Anfield Road, el Liverpool ha ganado la FA Cup y la Copa de la Liga. Esa localía también la han hecho sentir fuera de casa, al quedarse en dos oportunidades con la Champions (2005 y 2019) y la Europa League.
Pero la Premier no llegaba. Es lo que les faltaba y dolía. Una herida que tenía solo un remedio: el factor Jürgen Klopp.
En la temporada pasada, luego del épico 4-0 ante el Barcelona que les permitió remontar una clasificación casi imposible a la final de Champions League, los ingleses recuperaron a dos de sus grande figuras, Mohamed Salah y Roberto Firmino, para volcarse en la lucha por su trofeo más importante de Europa.
Time to create more #UCL memories here 👊🔴 pic.twitter.com/z7ERfDFuke
— Liverpool FC (@LFC) February 18, 2020
Pero “suficiente” es una palabra que desconocen, y viendo la temporada 2019-2020, esa ignorancia se vuelve conocimiento: Con 86 puntos (28 partidos ganados, dos empates y solo una derrota), el equipo alcanzó el título con un 92.4% de rendimiento. A siete fechas del término de la temporada.
Los “rojos” lo festejaron con todos los colores. Partieron por el blanco y negro, dado que historia tienen a borbotones, como se aprecia en este video publicado en su cuenta en Twitter.
Tell the world…
We are Liverpool, champions of England. pic.twitter.com/altgWn1Wda
— Liverpool FC (at 🏠) (@LFC) June 25, 2020
Frente al Crystal Palace, este miércoles 24 de junio, con los goles convertidos por Alexander-Arnold, Salah, Tavares y Mané descontaban un paso más en el camino hacia la Premier. Si el Chelsea lograba imponerse al City, Liverpool festejaría fuera de cancha.
Tuvieron que pasar 11.015 días para retornar a la gloria local.
Klopp y compañía ahora cantan “You’ll never walk alone”, y si fuera en Anfield, podría lucir más o menos así: